La pregabalina es un medicamento recetado utilizado principalmente para tratar varias condiciones neurológicas y psiquiátricas, pues se trata de un antiepiléptico que se emplea para controlar las convulsiones y para aliviar el dolor neuropático. Sin embargo, una reciente publicación del medio británico The Sunday Times ha relacionado casi 3.400 muertes en el Reino Unido (y quizás con más en Europa) con el uso de este fármaco. Buena parte de estos fallecimientos se explican porque la pregabalina interacciona con otros medicamentos, como los opiáceos, que pueden provocar consecuencias fatales.
Si se siguen las recomendaciones de los profesionales de la salud, la pregabalina es un fármaco seguro y especialmente útil para tratar el dolor neuropático, que es un tipo de dolor causado por daño o disfunción en los nervios. Según MedlinePlus, se utiliza para manejar el dolor neuropático asociado con la neuropatía diabética, la neuralgia posherpética (dolor persistente después de un episodio de herpes zóster) y el dolor neuropático causado por lesiones en la médula espinal.
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Este medicamento también está aprobado para el tratamiento de la fibromialgia, una condición crónica caracterizada por dolor generalizado, fatiga y sensibilidad en múltiples áreas del cuerpo. En algunos países, la pregabalina también está aprobada para el tratamiento del trastorno de ansiedad generalizada (TAG), proporcionando alivio a aquellos que sufren de ansiedad excesiva y prolongada.
Según MedlinePlus, los efectos secundarios más comunes incluyen mareos, somnolencia, boca seca, edemas (hinchazón de las extremidades), aumento de peso o visión borrosa. Otros efectos secundarios menos comunes pero más serios pueden incluir reacciones alérgicas graves (dificultad para respirar, hinchazón de la cara, labios, lengua o garganta), problemas de visión, confusión y desorientación, problemas de coordinación o dolor muscular inexplicable o debilidad, especialmente si se acompaña de fiebre o malestar general.
Es importante que los pacientes informen a su médico sobre cualquier efecto secundario que experimenten, especialmente si son graves o persistentes.
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La pregabalina en poblaciones específicas
En algunos sectores de la población, este fármaco puede conllevar más riesgos que son importantes tener en cuenta:
- Embarazo y lactancia. La seguridad de este medicamento durante el embarazo y la lactancia no está completamente establecida. Las mujeres embarazadas o en período de lactancia deben discutir con su médico los posibles riesgos y beneficios antes de usar este fármaco.
- Personas mayores. Los pacientes de edad avanzada pueden ser más susceptibles a los efectos secundarios de la pregabalina, especialmente los mareos y la somnolencia, lo que aumenta el riesgo de caídas.
Aunque la pregabalina tiene un potencial relativamente bajo de abuso y dependencia en comparación con otros medicamentos, aún existe un riesgo, especialmente en personas con antecedentes de abuso de sustancias. Los médicos deben evaluar este riesgo antes de prescribirla y monitorear a los pacientes durante el tratamiento.