Qué es la hepatitis A, el virus que se ha detectado en las fresas que provenían de Marruecos

Se transmite a través de agua o alimentos contaminados por las heces de personas infectadas por el virus

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Cultivo de fresas (Shutterstock)
Cultivo de fresas (Shutterstock)

La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-Asaja) ha denunciado la presencia de hepatitis A en fresas provenientes de Marruecos y ha instado al Gobierno y a Bruselas a llevar a cabo “medidas urgentes” para la alerta alimentaria. Así lo notifica un comunicado publicado este lunes este lunes en el portal comunitario RASFF (Rapid Alert System Feed and Food). Los agricultores exigen además una exhaustiva inspección sanitaria a todas las fresas que provengan de Marruecos, pues estas frutas superaban el máximo permitido de una sustancia.

Pero, ¿qué es exactamente la Hepatitis A y por qué es un riesgo para la salud pública? La hepatitis A es una enfermedad viral que afecta principalmente al hígado y que lo causa el virus de la hepatitis A (VHA). Este se transmite principalmente a través del consumo de agua o alimentos contaminados por heces de una persona infectada, por lo que los agricultores españoles sostienen que el virus en estas fresas marroquíes puede haber aparecido “por regar las explotaciones con aguas fecales”.

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La hepatitis A es una enfermedad aguda y autolimitada, lo que significa que por lo general no se convierte en una infección crónica. Sin embargo, puede provocar síntomas graves y, en casos raros, puede causar complicaciones graves. Las personas pueden infectarse al ingerir alimentos o agua contaminados con heces de una persona infectada. También puede transmitirse a través del contacto cercano con una persona infectada, especialmente si no se siguen prácticas adecuadas de higiene, como lavarse las manos después de ir al baño.

Un paciente en la consulta del hepatólogo (Shutterstock)
Un paciente en la consulta del hepatólogo (Shutterstock)

Una vez que una persona ha sido infectada con el virus de la hepatitis A, puede tardar de dos a seis semanas en desarrollar síntomas. Estos pueden variar desde leves hasta graves e incluyen fatiga, náuseas, vómitos, fiebre, pérdida de apetito, dolor abdominal, orina oscura y coloración amarillenta de la piel y los ojos, conocida como ictericia. Los síntomas suelen durar varias semanas, aunque en algunos casos pueden persistir durante varios meses.

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Al tratarse de una enfermedad generalmente autolimitada, el cuerpo puede eliminar el virus por sí mismo sin necesidad de tratamiento específico. Sin embargo, en casos graves, especialmente en personas mayores o con sistemas inmunológicos debilitados, la hepatitis A puede provocar complicaciones graves, como insuficiencia hepática aguda. En estos casos, el tratamiento puede requerir hospitalización y, en algunos casos, trasplante de hígado.

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Cómo prevenir y tratar la hepatitis A

La mejor manera de prevenir la hepatitis A es mediante la vacunación. La vacuna contra la hepatitis A está disponible y se recomienda especialmente para personas con mayor riesgo de contraer la enfermedad, como viajeros a áreas donde la hepatitis A es endémica. Además de la vacunación, también es importante seguir prácticas adecuadas de higiene, como lavarse las manos con frecuencia, especialmente después de ir al baño y antes de manipular alimentos.

En cuanto al tratamiento de la hepatitis A, no existe un tratamiento específico para la enfermedad. El enfoque principal es el manejo de los síntomas y el apoyo al cuerpo mientras se recupera. Esto puede incluir descanso, una dieta saludable, hidratación adecuada y evitar el alcohol y ciertos medicamentos que puedan dañar el hígado. En casos graves, puede ser necesario el tratamiento hospitalario para controlar los síntomas y prevenir complicaciones.

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