Carne más cara en Asturias y Extremadura y el precio de las frutas disparado en Canarias: así se han encarecido los alimentos en cada comunidad

Por su parte, el pescado, fresco o congelado, se encareció más en cuatro comunidades del norte peninsular, dos de ellas costeras

Una dependienta selecciona carne para un cliente en un supermercado, en Madrid, España.

Lejos quedan ya las subidas de la inflación a doble dígito. El Instituto Nacional de Estadística ha confirmado este viernes que el Índice de Precios al Consumo (IPC) se mantuvo sin cambios en diciembre respecto al mes anterior y recortó una décima su tasa interanual situándose en el 3,1% al cierre de 2023. Los alimentos, que han sido los grandes protagonistas de la inflación en el último ejercicio, han cerrado el año con una subida del 7,3%. Sin embargo, esta tendencia inflacionista no es igualitaria en todos los productos ni en todas las comunidades.

De los 23 grupos de alimentos y bebidas que distingue el INE en su estadística del IPC, Canarias registró en 2023 las subidas más altas en ocho, más de un tercio, mientras que los índices más bajos estuvieron más repartidos, con Aragón y Murcia al frente. Los cinco epígrafes -las “rúbricas” que denomina el INE- que más subieron en el conjunto del país fueron aceites y grasas (36,3 %), legumbres y hortalizas frescas (13,2 %), carne de porcino (12,3 %), frutas frescas (11,8 %) y carne de ovino (9,7 %).

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Los que más suben

El coste de aceites y grasas, donde más afectó el alza de los precios de los alimentos, llegó al 39,7% en Madrid, el 39,1% en la Rioja, el 38,9% en Extremadura, el 38,4% en Cataluña y el 37,2% en Andalucía; mientras que “solo” fue del 25,1% en Cantabria, el 30,4% en País Vasco y el 33,1% en Canarias.

También en toda España subió el precio de las legumbres y hortalizas frescas, más en Canarias, un 25,3%, en Murcia (17,2%), Baleares (16,6%) y Andalucía (15,2%) y menos -la tercera parte que en el archipiélago atlántico- en Cantabria (7,9%), País Vasco (8,0%) y Aragón (8,4%). Las frutas frescas subió en todas las comunidades, hasta un 16,4% en Canarias, un 15,2% en la Comunidad Valenciana y entre un 14% y un 14,7% en Cantabria, La Rioja y País Vasco, por un 6,5% en Baleares y un 7,4% en Aragón.

Los precios de la carne subieron más en Asturias (11,8%) la de vacuno; en Extremadura (13,6%) y la Comunidad Valenciana (13,5%) la de ovino; en Aragón (17,5%), Murcia (16,9%) y Navarra (16,0%) la de porcino; y en Castilla-La Mancha (3,5%), Asturias y Cataluña (ambas un 3,2%) la de ave. En cambio, en Murcia bajó la carne de vacuno (-0,8%); en Asturias (-1,8%) y Baleares (-1,3%) la de ovino; y en Galicia (-2,6%) la de ave.

Los alimentos que se resisten a las subidas

La leche, el único producto que se abarató el pasado año en la mayor parte de las comunidades, una media del 1,3% con Murcia (-2,15%), País Vasco (-2,2%) y Madrid y Andalucía (-2,1%) a la cabeza, subió más, en cambio, en el archipiélago canario (3,0%), pero también en Navarra (1,3%) y Galicia (0,8%). En Canarias la subida llegó al 7,2% para los productos lácteos, por delante del otro archipiélago, el balear (5,9%), en tanto que los precios bajaron en esta rúbrica en País Vasco (-1,7%), Murcia (-1,1%) y Galicia (-0,6%).

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Los huevos aumentaron de precio más del doble de la media (4,4%) en Canarias (10,7%) y no estuvieron muy lejos de doblar ese porcentaje en Cantabria (8,0%) y en Madrid (7,6%), notablemente por encima de País Vasco (0,5%) y Extremadura (1,10%). Donde más subieron los cereales y derivados fue en Canarias, un 7,1%, más del doble que en Aragón (3,2%) o Asturias y Extremadura (3,5%); y el pan en Murcia (4,1%), mientras que bajó en Extremadura (-0,2%), se mantuvo estable en Navarra y apenas subió en Aragón, País Vasco y Asturias.

El pescado, fresco o congelado, se encareció más en cuatro comunidades del norte peninsular, dos de ellas costeras: un 6,4% en País Vasco, un 5,7% en Navarra; un 5,4% en La Rioja; y un 5,1% en Cantabria; y, sin embargo, creció menos en otra región del litoral, Murcia (1,1%) y en dos de interior: Madrid y Castilla y León -en ambas un 3,3%, igual que en Andalucía-. Madrid, sin embargo, fue donde más subieron crustáceos, moluscos y preparados de pescado (6,6%), algo por encima de Cantabria (6,3%), frente a Navarra (3,1%) y Canarias (3,2%).

Mostrador de una pescadería en el mercado de Prosperidad en Madrid, España (Europa Press)

Las patatas y sus preparados vieron incrementado su coste el año pasado un 18,2% en Canarias, el triple que la media (6,8%), y más de un 10% en La Rioja y Navarra, mientras solo subió un 2,7% en la Comunidad Valenciana y menos de un 5% en Asturias, Baleares y País Vasco e incluso se redujo un 2,7% en Murcia. Otros epígrafes que subieron relativamente menos son el café, cacao e infusiones (6,0%) y el azúcar (6,2%), con máximos en ambos casos en Baleares, del 7,2% y el 11,9%, respectivamente, y mínimos en Aragón, del 3,9% y el 2,3% en cada una de esas comunidades.

En cuanto a las bebidas, el agua mineral, refrescos y zumos se encarecieron hasta un 13% en La Rioja y entre un 11% y un 12% en Galicia, Baleares y Madrid, frente a subidas más reducidas en Cantabria (5,0%), Aragón (5,5%), Asturias (6,6%) y Cataluña (6,8%). Las bebidas alcohólicas fueron las que menos diferencias marcaron, aunque pese a todo el alza en Murcia, del 6,6%, dobló al de Galicia, del 3,3%.

*Información elaborada a partir de agencias

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