Sanidad aprueba la primera vacuna contra el virus respiratorio sincitial

En España, las salas de urgencia reciben entre 15.000 y 20.000 visitas pediátricas por infecciones del virus respiratorio sincitial (VRS), de las que entre 7.000 y 14.000 acaban en hospitalizaciones. Junto con la gripe y el Covid, el VRS ha tensionado el sistema sanitario español este pasado mes de diciembre, en una ola de contagios por virus respiratorios que muchos etiquetaron como “tripledemia”.

El Ministerio de Sanidad acaba de dar luz verde a la primera y única vacuna contra al virus respiratorio sincitial, enfocada para la protección de las personas mayores de 60 años y de los lactantes, mediante la inmunización de la embarazada. Las madres que así lo deseen pueden vacunarse ya, entre las 24 y las 36 semanas de gestación, para prevenir el contagio de bronquiolitis de sus bebés.

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La vacuna, que ha recibido el nombre comercial de Abrysvo, ha sido desarrollada por la farmacéutica Pfizer y actúa contra la proteína F en prefusión (RSVpreF). De momento, el Sistema Nacional de Salud solo la financiará para las mujeres embarazadas, según ha explicado José Chaves, director médico de la compañía.

La Comisión de Salud Pública aún debe decidir las pautas a seguir, como la incorporación en el calendario vacunal. Abrysvo consta de una única dosis que se inyecta en el músculo de la parte superior del brazo y ya está disponible en farmacias por un precio de 234,95 euros con IVA.

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Según el prospecto de la vacuna, Abrysvo se puede poner junto con la vacuna de la gripe estacional. Como todo medicamento, tiene efectos adversos, siendo los más comunes en mujeres embarazadas el dolor en la zona del pinchazo, de cabeza, muscular y náuseas; mientras que en los mayores, los más frecuentes registrados han sido fatiga, dolor de cabeza, en la zona de la inyección y mialgia (dolor de músculo).

Desde el pasado mes de octubre, los bebés recién nacidos ya están siendo inmunizados con nirsevimab, un fármaco que no es una vacuna. Se trata de un anticuerpo monoclonal que está reduciendo ampliamente las hospitalizaciones pediátricas por VRS, un hito si tenemos en cuenta que es la segunda causa de muerte en lactantes menores de 12 meses en el mundo.

El VRS actúa infectando los pulmones y las vías respiratorias. Aunque afecta especialmente a bebés, niños pequeños y personas mayores, las personas todas las edades son susceptibles de contraerlo. Los síntomas varían desde leves hasta graves y suelen aparecer en etapas.

• Inicio leve: Los síntomas iniciales suelen ser similares a los de un resfriado común y pueden incluir congestión nasal, tos leve, fiebre baja, dificultad para respirar leve, o irritabilidad en bebés y niños pequeños.
• Progresión a síntomas más graves: En algunos casos, el VRS puede llevar a complicaciones más severas como la bronquiolitis y la neumonía, cuyos síntomas pueden aumentar la dificultad para respirar, sibilancias (silbidos al respirar), tos persistente y severa, fiebre alta y cianosis (coloración azulada en labios y uñas) debido a la falta de oxígeno.
• Síntomas en adultos y adolescentes: Aunque menos común, los adultos y adolescentes también pueden infectarse, y sus síntomas son generalmente leves, similares a los de un resfriado común.