Hace tiempo que levantarse sin saber la ciudad y el día en el que uno se mueve dejó de ser cosa de los Beatles y otras estrellas musicales para convertirse en dinámica recurrente, también, en el mundo del deporte. En el baloncesto, siempre lo supieron muy bien en la NBA. Esa dinámica de jugar hasta la extenuación y poder entrenar lo justo acabó trasladándose a Europa. Que se lo digan al vigente campeón de la Euroliga. Un Real Madrid que acaba de acusar un inicio de 2024 sin apenas resuello en forma de lesiones, no importantes pero tampoco menores, de dos de sus referentes: Edy Tavares y Sergio Llull.
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— Turkish Airlines EuroLeague (@EuroLeague) January 12, 2024
Lo que parecía ser una semana plena de alegría para los blancos, que siguen contando sus encuentros casi siempre por victorias, va a terminar con una mala noticia. Este sábado, el club ha emitido dos partes médicos “pendientes de evolución”, pero que apuntan a varias semanas de baja. Tanto en el caso del africano, el pívot más temido del Viejo Continente, como en el del menorquín, capitán y recién proclamado jugador madridista con más partidos de siempre (sin distinción por secciones) en la entidad.
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En cuanto a Tavares, “se le ha diagnosticado una lesión en el ligamento lateral externo del tobillo derecho”. Llull, por su parte, tiene afectada “la fascia plantar del pie derecho”. Se trata del segundo sinsabor físico del curso para el caboverdiano, que hace meses ya tuvo que ausentarse de las pistas por un problema respiratorio que le mermó lo suyo. A Chus Mateo tampoco le gustará mucho perder a El Increíble, en un momento especialmente dulce y cada vez más cerca de convertirse en el máximo triplista de la historia de la Copa de Europa.
La preocupación es comprensible cuando prácticamente queda un mes para la Copa del Rey de Málaga, que arranca el próximo 15 de febrero. Los problemas físicos de Tavares y Llull no parecen graves, pero obligarán a tener a los dos jugadores entre algodones hasta que llegue la primera cita clave de la temporada para el Madrid. Líder destacado tanto en la Euroliga como en la ACB, no ha acusado las distintas bajas que han ido afectándole por el camino: acumula más de una treintena de triunfos y apenas tres derrotas.
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Un inicio de 2024 corto en descanso
El protagonismo de Tavares y Llull en la última victoria de los suyos, ante un Valencia Basket que forzó una prórroga en un WiZink Center abonado a estas últimamente, no puede ser desmerecido. El primero logró un doble-doble de 18 puntos y 19 rebotes (récord personal en la Euroliga). El segundo, 16 puntos y un 4/8 en tiros de tres. Junto con Facundo Campazzo y Dzanan Musa, neutralizaron al conjunto taronja.
Sin embargo, han acabado acusando las minutadas (Tavares) y un golpe en una pierna (Llull). Pero, sobre todo, la dureza de un calendario apretadísimo desde que comenzó el año. El 3 de enero, se jugó (y perdió) contra el Barça en la Ciudad Condal. El 5, llegó el choque de las cuatro prórrogas ante el Efes en la calle Goya. El 7, se visitó al Baskonia en Vitoria. El 9, tocó medirse al Bayern en Múnich. Y el 11, a Valencia en Madrid. Este domingo, espera el UCAM Murcia a domicilio.
El experimento de vivir dos dobles jornadas de Euroliga en semanas consecutivas por primera vez ha hecho mella en el defensor del título. Las excusas no valen, porque el número de compromisos por campaña viene siendo abusivo desde que cambió el formato de la máxima competición europea. Aun así, está claro que tanto trote puede pasar factura. Incluso cuando los momentos comprometidos se encuentran a la vuelta de la esquina.