El Hospital Universitario Gregorio Marañón ha marcado un hito en la medicina mundial con la inauguración del primer quirófano híbrido con impresión 3D, un avance tecnológico sin precedentes que permite la fabricación intraoperatoria de productos sanitarios personalizados y, con ello, representa un salto cualitativo en la seguridad y eficacia de las intervenciones quirúrgicas.
Ubicado en el Centro Quirúrgico del hospital, y más concretamente dentro del servicio de Traumatología, el nuevo quirófano tiene capacidad para entre 10 y 12 operaciones semanales, centrándose primordialmente en procedimientos de cirugía oncológica. Desde su primera cirugía llevada a cabo en junio, tras su inauguración en febrero, se han beneficiado 15 pacientes, en su mayoría con patologías de gran complejidad en áreas como cirugía ortopédica oncológica, cirugía de columna compleja y reconstrucción articular avanzada, obteniendo resultados más gratificantes de lo esperado.
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Esta moderna instalación abarca un área total de 75 metros cuadrados, incluyendo una sala de planificación intraoperatoria multidisciplinar de 15 metros cuadrados. Está dotada con dispositivos de vanguardia, que comprenden equipos de angiotomografía computarizada 3D de última generación, fluoroscopio 3D, sistema de navegación quirúrgica, tecnología de guiado holográfico y soluciones avanzadas de diseño e impresión tridimensional. Estas capacidades tecnológicas permiten, por ejemplo, la creación de guías de posicionamiento exactas para casos particulares.
Entre las ventajas más destacadas de este sistema se encuentra la reducción significativa en la duración de las operaciones, y la realización de estas con mayor exactitud. Ello es posible gracias a la fabricación de guías de corte más precisas para los tejidos sanos y un seguimiento optimizado antes y durante la cirugía, que se beneficia además del uso de hologramas para una mayor precisión en tiempo real.
El ahorro de tiempo es especialmente crítico en procedimientos oncológicos, donde cada minuto menos en el quirófano puede tener un impacto directo en la reducción de la morbilidad perioperatoria. Este logro se complementa con la ayuda de sistemas robóticos para operaciones protésicas y el empleo de realidad aumentada e imágenes holográficas.
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El Hospital Gregorio Marañón tiene la distinción de ser el primer centro sanitario en España autorizado a fabricar productos sanitarios personalizados, contando además con la certificación ISO 13485 que avala la calidad del proceso de gestión. Esta capacidad ha sido clave para el desarrollo de la tecnología híbrida pionera que hoy se presenta.
Soluciones a medida del paciente
La medicina personalizada es el nuevo horizonte hacia el que se dirige la atención sanitaria. Como explica Javier Baquero, jefe de servicio de cirugía ortopédica y traumatología del hospital, el objetivo es superar la era de las prótesis por catálogo y avanzar hacia soluciones totalmente adaptadas a la anatomía y patologías individuales de los pacientes.
Actualmente, la tecnología ya permite la confección de guías quirúrgicas a medida y la fabricación de implantes personalizados, aunque estos últimos no de manera generalizada. Conforme se optimicen los procesos y se reduzcan los costes, se espera que en el futuro estas soluciones diseñadas a la medida del paciente se conviertan en la norma.
La formación del personal para trabajar de manera integrada en este ambiente multidisciplinario ha sido uno de los retos más significativos. Según Baquero, lograr juntar y coordinar el conocimiento de alrededor de 12 perfiles profesionales diferentes, incluyendo técnicos de imagen, radiólogos, cirujanos e ingenieros biomédicos, ha sido más complejo que la mera adquisición de equipos.
En palabras de Rubén Pérez Mañanes, cirujano ortopédico y responsable de la coordinación de la unidad 3D, por ahora el quirófano está reservado para los casos más complejos, donde es necesario extirpar tumores y cubrir déficits óseos que de otra forma dejarían secuelas funcionales notables al paciente.