Desde las ventanas de la sexta planta del Teatro Real siempre suena la Flauta Mágica. O al menos, el restaurante Papagena, con una de las vistas más privilegiadas de la capital al Palacio Real y la Plaza de Oriente, se encarga de rendirle cada noche culto a Mozart y a la ópera a través de los sabores de sus platos y sus cócteles desde el templo de la música de Madrid.
El origen del nombre del restaurante hay que buscarlo en la historia de la ópera. Papageno es uno de los personajes principales de La flauta mágica, de Wolfgang Amadeus Mozart.
En la obra encarna al hombre común, obsesionado con encontrar el amor y formar una familia. Representado también como el hombre-pájaro, en el libreto es puesto a prueba repetidas veces en el curso de la historia para ser premiado finalmente con su pareja, su ‘Papagena’, que aparecerá en el dúo final de la ópera del genio alemán.
A la batuta de la cocina de este restaurante que bebe de la música y el arte, se encuentra el chef catalán Ramón Freixa. La carta incluye platos tradicionales revisionados, como el ‘Gazpacho de fresas con su mimético helado’, los ’Buñuelos de merluza con all i oli suave de cebollino y perlas cítricas’, o la ‘Burrata caprese inyectada de albahaca y tartar de tomate’.
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Hay también platos clásicos como las croquetas o las alcachofas, que se combinan en la carta con sabores más exóticos, como las ‘Empanadillas de pollo al curry con hoisin de pisto morrón’ o el ‘Saam ibérico con lechuga ‘viva’, panceta y pulpo a la llama’.
Entre los platos principales se encuentran una selección de platos como la ‘Costilla de ternera glaseada con puré de patatas al queso idiazábal’, el ‘Tartar de ternera gallega reposada con toques picantes’ o el ‘Canelón asado de tres carnes con salsa de boletos, foie y trufa’.
Entre los pescados, también ofrecen creaciones de Freixa, que ha sido reconocido con dos estrellas Michelin y tres soles Repsol, como los ‘langostinos robuchon y mayonesa cítrica’ o el ‘rodaballo frito con emulsión cítrica y hierbas frescas’.
Aprovechando la singularidad del lugar, el Restaurante Papagena también ofrece ‘cenas de entreacto’, un servicio de menú degustación en el que cada plato está inspirado en el gran estreno operístico de la temporada y que se puede pedir que se sirva en el entreacto de las actuaciones o al final del espectáculo.
Sinfonía de cócteles
El interiorista Luis García Fraile, reconocido por sus trabajos con Hermés, Ángel Schlesser, Dior o Joyería Suárez, se ha encargado de dar vida a la sala y la coctelería del restaurante, escenario improbable donde Papageno y Papagena encontrarían finalmente el amor.
Xandra Falcó ha colaborado como asesora sumiller en la carta de vinos del restaurante y en la creación de los maridajes.
Los cócteles que ofrecen son por ahora nueve, todos inspirados en obras maestras de la ópera como Aida, de Giuseppe Verdi; La sonnambula, de Vincenzo Bellini; Arabella, de Richard Strauss, Aquiles en Esciros, de Francesco Corselli; La Nariz, de Dmitri Shostakóvich; Nixon en China, de John Adams; Tristán e Isolda, de Richard Wagner; Il turco in Italia, de Gioachino Rossini; y Turandot, de Giacomo Puccini.
Hay que recordar que el restaurante ofrece servicio los lunes, martes y miércoles de ópera y, si no, solo de jueves a domingo desde las 19:00 a las 00:00 horas.
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