Sarpullido por calor: cuáles son los síntomas y el tratamiento de la miliaria

Las erupciones que aparecen en la piel cuando hay temperaturas muy altas y hace mucho calor están causadas por una obstrucción de los conductos sudoríparos, es decir, la sudoración, que queda atrapada bajo la superficie de la piel. Este sarpullido, también denominado miliaria o sudamina, es una afección cutánea frecuente en bebés, pero también puede afectar a personas adultas.

La obstrucción de los conductos estrechos que transportan el sudor a la superficie de la piel provoca una inflamación y una irritación, que se manifiesta con pequeñas ampollas o bultos enrojecidos que pueden causar picazón intensa, dolor o quemazón.

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Los expertos indican que no existe una causa concreta que motive esta afección, pero existen ciertos factores que pueden hacer que aumente el riesgo de sufrir esta afección cutánea, como vivir en climas cálidos y húmeros, así como en aquellas personas que tienen más tendencia a una sudoración excesiva. Otro factor es la práctica de actividad física que suponga una alta producción de sudor. También afecta las altas temperaturas y el calor excesivo.

En el caso de los bebes puede deberse a que sus conductos sudoríparos estén aún inmaduros. Estas erupciones pueden aparecer durante la primera semana de vida, en particular si el lactante permanece en incubadora para conservar el calor, si está demasiado abrigado o si tiene fiebre.

Las erupciones suelen aparecer en los pliegues de la piel y zonas con mayor fricción como las axilas, ingles, codos o muslos. En el caso de los bebes, estos pequeños bultos suelen verse, principalmente, en el cuello, hombros y pecho.

Según el Manual MSD, una web de profesionales para médicos y farmacéuticos, el tratamiento de la miliaria consiste en el enfriamiento y secado de las áreas afectadas, además de evitar los factores que pueden inducir la sudoración y para ello puede utilizarse el aire acondicionado, de manera que se enfríe la sala en la que permanece una persona con esta afección.

También pueden utilizarse pomadas o lociones con corticoides, a veces con el agregado de una pequeña cantidad de mentol. Desde el portal, advierten que se deben evitar los vendajes oclusivos y los ungüentos espesos.

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