Ona Carbonell anuncia su retirada

La española, doble medallista en sincronizada en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, pone fin a su carrera deportiva a los 32 años como la mujer más laureada en la historia de los mundiales de natación

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La nadadora, doble medallista olímpica, deja la competición a los 32 años.

La nadadora Ona Carbonell (Barcelona, 32 años) ha anunciado este viernes que se retira tras más de 20 años en la élite. La catalana, que ha hecho pública su decisión en una conferencia de prensa celebrada en la sede del Comité Olímpico Español (COE), en Madrid, deja un exitoso legado que ya es historia del deporte español y de la natación sincronizada. En su palmarés, tres participaciones en los Juegos Olímpicos, con dos medallas en Londres 2012, y 34 metales entre Mundiales y Europeos.

“Hoy dejo de ser una de las ‘niñas’ de sincro. Desde hace meses tenía claro que ya era suficiente y que hay un equipo maravilloso que nos dará muchas alegrías. Sentía que tenía que retarme en otros ámbitos y seguir aprendiendo de la vida. La retirada del deporte siempre es difícil cuando no traumático. Me siento afortunada y agradecida”, ha expresado Carbonell. “El motivo por el que me retiro es que llevo 23 años en la sincro, 18 en la élite. Desde los 14 llevo en el CAR de Sant Cugat y en el equipo nacional. La sincro ha sido el espacio donde he socializado, pero también he conocido el dolor físico y mental, pero también me ha enseñado humildad, el valor del esfuerzo y el compañerismo, además de respeto y apoyo mutuo”, recordó la ya exnadadora.

Carbonell, hasta la fecha capitana del equipo español de natación artística –antes conocida como sincronizada–, se colgó su primera presea en Melbourne, Australia, en el Mundial de 2007. Fue un bronce en equipo técnico la medalla que abrió un camino de dos décadas repleto de logros, y no solo deportivos. La nadadora, que coordina la Comisión Maternidad y Deporte del COE, ha sido una pionera en la lucha por la conciliación y la maternidad en el deporte. De hecho, tras el Mundial de 2019 llegó a retirarse temporalmente de la competición para dedicar más tiempo a su familia, precisamente uno de los principales motivos para ahora tomar esta decisión. “Mi cabeza y mi corazón no querían estar ya al mil por mil en el agua, sino con la familia. No es justo para el deporte español estar a medias tintas. Con mi segundo hijo ya no me apetecía tanto estar en el agua y es tan duro que o tu pasión está a mil o nada”, ha reconocido Ona, quien ha reivindicado también las dificultades que tienen las deportistas para ser madres. “Con mi maternidad me di cuenta de lo poco que ha evolucionado el deporte en materia de conciliación”, dijo, y añadió: “Hace años que soy consciente que las mujeres no disponemos de las herramientas y recursos para avanzar a nivel de igualdad. He trabajado para visibilizar lo poco que se había avanzado en la conciliación. Trabajaremos para que las mujeres quieran ser madres y no tengan que renunciar a su carrera deportiva

Ona Carbonell durante un ejercicio en el Mundial de 2019.
Ona Carbonell durante un ejercicio en el Mundial de 2019.

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La española deja el agua como la mujer con más medallas en la historia de los Mundiales de natación: 23 metales en total, un oro, 11 platas y 11 bronces. Ona, que conquistó sus tres últimas preseas en la cita de Corea del Sur 2019, supera a la histórica Natalia Ischenko –21 medallas entre 2005 y 2015–, y también a la sirena que hizo explotar la sincro en España, Gemma Mengual –20 metales en Mundiales–. Además, se queda en tercer lugar en el ranking de medallistas mundiales absoluto, solo por detrás de Ryan Lochte (27) y Michael Phelps (33).

Dos metales en Londres 2012

Además de sus 23 metales en campeonatos del mundo, la catalana se ha colgado 11 medallas en Europeos –tres oros, siete platas y tres bronces– y ha participado en tres Juegos Olímpicos: Londres 2012, Río 2016 y Tokio 2020. La cita en la capital inglesa marcó un antes y un después en su carrera. Ona llegó a Londres sin haber pisado unos Juegos y salió de allí como doble medallista olímpica: plata en dúo junto a Andrea Fuentes y bronce en la rutina por equipos. Tras 2012, repitió en las citas olímpicas de Río 2016, donde fue quinta en dúo con Gemma Mengual y séptima por equipos, y Tokio 2020 –realmente 2021–, ya su última participación en unos Juegos. En Japón sólo compitió en la rutina por equipos, en la que España terminó de nuevo en séptimo.

Ahora, tras dos décadas de leyenda en la sincro, llega la hora de dar un paso a un lado, como ya hicieron antes Mengual y Fuentes. En el recuerdo, un legado que es historia del deporte español.

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