Vincent Cassel sobre su influencias en el cine y la moda: “Es cuestión de dejarse llevar”

El actor Vincent Cassel es una de las figuras más reconocidas del cine francés. Su presencia en la industria cinematográfica se construyó sobre una trayectoria versátil, que lo llevó desde los márgenes del cine independiente a producciones internacionales de gran escala. La revista Esquire compartió un artículo sobre las influencias del intérprete en el entretenimiento y la moda.

Con un carisma que recuerda a leyendas francesas como Alain Delon y Jean-Paul Belmondo, Cassel supo trasladarse con naturalidad entre personajes intensos y proyectos de autor, sin perder de vista su relación con el mundo del modelaje. Desde campañas para Prada y Saint Laurent hasta desfiles exclusivos, su estilo es un reflejo de su elegante y arriesgada identidad.

A lo largo de su carrera, Vincent Cassel demostró ser más que un actor talentoso. Su imagen trasciende la pantalla y se convirtió en un referente estético y de estilo. Su porte y actitud hicieron de él un emblema de la moda francesa, colaborando con marcas de lujo y participando en eventos exclusivos. Esta faceta lo ayuda a resaltar en cualquier escenario, ya sea un set de filmación o una pasarela.

Recientemente, Cassel estuvo presente en el exclusivo desfile de Moncler Grenoble en Courchevel (Francia), donde la firma italiana presentó su colección de invierno en un ambiente imponente. La combinación entre la sofisticación del actor y la identidad de la marca fue natural. “Cuando era niño y esquiaba, usaba estaba marca”, comentó Cassel sobre su relación con la compañía.

El desfile de Moncler no fue un evento convencional. Se llevó a cabo en la pista del aeropuerto de Courchevel, a más de 2.000 metros sobre el nivel del mar, lo que lo convirtió en un espectáculo sin precedentes. La elección del lugar garantizaba una vista impresionante, y también evocaba la identidad de la línea diseñada para entornos extremos.

En la audiencia se encontraban figuras como Leonardo DiCaprio, Jessica Chastain, Anne Hathaway y Adrien Brody, todos cubiertos por un manto de nieve mientras la gala transcurría en medio de una tormenta. La organización del evento se encargó de que los invitados recibieran capas, gorros y guantes para protegerse del clima.

El espectáculo incluyó una escenografía única: luces que simulaban la aurora boreal iluminaban la pista mientras los modelos avanzaban envueltos en trajes de esquí y accesorios técnicos. Entre ellos se encontraban modelos internacionales como Eva Herzigová y Adriana Lima, quienes dieron vida a las creaciones de la marca en un entorno que desafió los límites de la moda.

Más allá de su relación con la moda, Vincent Cassel construyó una filmografía notable, que abarca desde el cine francés hasta grandes producciones de Hollywood. Desde L’Instinct de Mort hasta Eastern Promises u Oceans Twelve, su versatilidad le permitió encarnar desde antihéroes hasta personajes complejos y oscuros. Su carrera se caracterizó por una búsqueda constante de proyectos que desafíen su capacidad interpretativa.

En una entrevista con Numéro Magazine, Cassel reflexionó sobre su evolución como actor y la relación con los papeles que interpretó, y explicó: “Siempre creí que hay algo de nosotros en cada personaje. A veces, un papel abre una puerta dentro de ti que no habías visto antes”.

Esta inquietud lo condujo a trabajar con directores como el argentino Gaspar Noé y David Cronenberg, figuras que marcaron el cine francés contemporáneo con propuestas arriesgadas y narrativas poco convencionales. Cassel valora la autenticidad en el cine y busca proyectos que desafíen normas establecidas. “Prefiero trabajar con directores que tienen una visión clara, que tengan algo que decir”, resaltó.

Con más de tres décadas en la industria, Cassel fue testigo de los cambios en el cine y su forma de producción. Para él, la relación entre los actores y los cineastas cambió con el tiempo, y las supuestas “familias cinematográficas” perdieron cohesión. Sobre esto, comentó: “Al principio, existía un grupo de cineastas con los que compartíamos una visión común. Ahora es difícil mantener esa dinámica cuando la industria se mueve a otro ritmo”.

A pesar de los cambios en la manera de hacer cine, Cassel continúa apostando por la espontaneidad en la actuación. Con los años, aprendió a confiar más en su intuición y en la naturalidad de cada escena. “Antes necesitaba ponerme en un estado emocional muy intenso para ciertas escenas. Ahora, logro el mismo resultado con menos esfuerzo. Es cuestión de aprender a dejarse llevar”, concluyó sobre su capacidad de adaptación.