Hace 22 años, Escuela de Rock llegaba a los cines y se convertía en un clásico moderno de los musicales. Dirigida por Richard Linklater y protagonizada por Jack Black, la película contaba la historia de un músico fracasado que forma una banda con estudiantes de primaria. Aunque el éxito del filme dejó una marca imborrable en la cultura popular, también unió a un grupo de niños actores que desarrollarían lazos de amistad que durarían toda la vida.
Uno de esos lazos se transformó en una historia de amor. Caitlin Hale y Angelo Massagli, quienes interpretaron a Marta y Frankie en la película, se casaron el pasado 4 de enero en una ceremonia en Nueva Jersey. Su romance, que comenzó mucho después del rodaje, conmovió a fanáticos de la película, quienes celebraron la reunión de varios miembros del elenco original en el evento.
La boda, celebrada en el elegante Park Château Estate & Gardens, estuvo llena de referencias a la película que los unió. Desde la música elegida para la recepción hasta la reunión en la pista de baile de los antiguos actores infantiles, la celebración fue una mezcla de nostalgia y alegría que revivió el espíritu de Escuela de Rock.
Un amor nacido fuera de los reflectores
Caitlin Hale y Angelo Massagli se conocieron en 2002, cuando ambos audicionaron para Escuela de Rock. En ese entonces, Hale, de 10 años, impresionó al equipo de casting con una versión personalizada de la canción “Everything’s Coming Up Roses”, mientras que Massagli, de 11, cantó “Crazy Train” de Ozzy Osbourne. Durante el rodaje, los actores desarrollaron una amistad, pero ambos han confirmado que no había ningún interés romántico en ese momento.
Tras el estreno de la película en 2003, Hale y Massagli se alejaron del mundo del cine. Hale estudió periodismo y luego se especializó como tecnóloga de ultrasonido. Massagli, por su parte, se convirtió en abogado y actualmente trabaja como asesor legal en la industria musical. Según relataron al New York Post, se reencontraron en 2018 mientras cursaban estudios en Florida. Lo que comenzó como una reunión casual por “los viejos tiempos” pronto se transformó en algo más.
“Al principio solo compartíamos cenas y fines de semana, pero luego nos dimos cuenta de que algo estaba surgiendo”, dijo Massagli. Hale, por su parte, confesó que supo muy pronto que él sería el indicado. “Le dije a una amiga que sentía que me iba a casar con él”, recordó.
Una boda llena de nostalgia
La ceremonia fue un homenaje tanto a la película como a la amistad que unió al elenco. Entre los invitados estuvieron Rivkah Reyes (Katie), Brian Falduto (Billy), Joey Gaydos Jr. (Zack), Maryam Hassan (Tomika), Aleisha Allen (Alicia) y Cole Hawkins (Leonard), quienes compartieron momentos en redes sociales que generaron nostalgia entre los seguidores. Reyes publicó un video en TikTok donde mostró la reunión al ritmo de “Edge of Seventeen” de Stevie Nicks, una canción que también aparece en la película.
Aunque Jack Black no pudo asistir debido a compromisos laborales, envió un mensaje privado para felicitar a los recién casados. Hale reveló que el actor fue muy generoso con sus palabras y que lamentó no poder estar presente.
La pista de baile también fue testigo de momentos memorables, como el reencuentro de Hale con las otras cantantes de respaldo de la película. “Fue como una cápsula del tiempo. Estábamos bailando y, de repente, sincronizamos un paso como si el tiempo no hubiera pasado”, dijo la actriz.
De las aulas al altar
El camino de Hale y Massagli hacia el altar estuvo marcado por momentos significativos. En 2019 se mudaron juntos a Brooklyn, y en junio de 2023, Massagli propuso matrimonio en el icónico Museo Metropolitano de Arte de Nueva York. La celebración del compromiso incluyó una cena en un restaurante italiano del Upper East Side y brindis con champán en el Carlyle Hotel.
El día de la boda, Hale lució un vestido de satén blanco con un velo brillante y botas con taco decoradas con pedrería, mientras que Massagli optó por un clásico traje negro. La recepción incluyó una selección musical inspirada en el Studio 54 y cerró con un food truck que distribuyó hamburguesas de McDonald’s.
El matrimonio de Hale y Massagli no solo conmovió a los fanáticos de Escuela de Rock, sino que también ha revitalizado el recuerdo de una película que marcó a toda una generación. Su historia es un testimonio de cómo los lazos formados en la infancia pueden perdurar y transformarse en algo mucho más profundo con el tiempo.