A sus 79 años, Debbie Harry, la icónica voz de “Blondie”, sigue desafiando estereotipos y construyendo una vida que mezcla irreverencia, moda y música.
Desde su apogeo en los años 70 como el rostro del punk y el pop, hasta su reciente participación en una campaña de Gucci, Harry demuestra que la edad no es un límite, sino una parte de su narrativa.
En una entrevista reciente con el diario británico The Times, Harry comparte un momento inesperado de su vida cotidiana: un coqueteo en Home Depot, una tienda que ella describe con humor como su lugar de flirteo habitual.
“Hay algunos hombres grandes y fuertes allí”, comenta con su característico ingenio. Este episodio muestra la faceta más desenfadada de una artista que, décadas atrás, fue considerada “la definición de lo cool” por el fotógrafo David LaChapelle.
Desde la cocina de su apartamento en Chelsea, Manhattan, Harry se muestra relajada y afable. A pesar de su imagen distante en los 70 y 80, su actitud actual desarma cualquier expectativa de frialdad.
Con gafas de carey, piel impecable y su icónica melena rubia, la cantante proyecta la misma presencia magnética que fascinó a generaciones.
Una carrera marcada por el caos y la creatividad
El éxito de Blondie en los años 70 y 80 la llevó a la cima con hits como Call Me y Hanging on the Telephone.
Sin embargo, la separación de la banda en 1982 marcó el inicio de una etapa difícil. Harry enfrentó adicciones, problemas financieros y el desafío de cuidar a su compañero de banda y pareja, Chris Stein, durante su enfermedad.
A pesar de estos obstáculos, la cantante nunca dejó de reinventarse. En 1997, Blondie resurgió con éxitos como Maria, y en 2017 lanzaron el álbum Pollinator, con colaboraciones de artistas como Sia y Charli XCX.
En 2023, la banda volvió a conquistar al público británico durante su actuación en Glastonbury, demostrando que la relevancia de Harry no ha disminuido.
Moda y reinvención
La longevidad de Debbie Harry no solo se refleja en la música. Este año se convirtió en el rostro de la colección Crucero 2025 de Gucci, consolidando su estatus como un ícono de estilo atemporal.
Fotografiada por la célebre Nan Goldin en un taxi negro, Harry describe el proyecto como un recordatorio de la conexión de “Blondie” con la cultura británica.
“Blondie fue parte de la cultura en el Reino Unido durante mucho tiempo”, reflexiona. La banda debutó allí en 1977, marcando el inicio de una relación especial con el público británico.
Enfrentando el pasado y el presente
A pesar de las tragedias y desafíos que ha enfrentado, Harry aborda su historia con humor y filosofía. En sus memorias, Face It (2019), relata episodios traumáticos como un acosador y una violación, pero lo hace con una ligereza que refleja su resiliencia.
“No soy propensa a la histeria. La mayoría de las veces me tomo las cosas con filosofía”, dice, recordando incluso cómo cantó en el escenario mientras un grupo de Hell’s Angels (banda de motoqueros violentos) lo invadía, hasta que Stein la retiró por precaución.
Reflexiones sobre envejecer
Harry admite que su imagen pública sigue siendo importante para ella, aunque con menos presión que antes. Con sus 80 años a la vuelta de la esquina, planea una fiesta para celebrarlo.
“La belleza de envejecer es que ya sabes de qué se trata”, reflexiona, aunque lamenta las pérdidas inevitables: “Lo malo es que muchos de los que estaban ya se han ido”.
A lo largo de su vida, Harry ha desafiado las expectativas sociales y profesionales. Su enfoque en el presente y su rechazo al sentimentalismo hacia el pasado reflejan una mentalidad que la mantiene relevante. En sus propias palabras: “Me gusta cómo gira el mundo”.
Debbie Harry no es solo una sobreviviente, sino una fuerza creativa que continúa redefiniendo lo que significa ser una leyenda.
A los 79 años, su historia no es solo una de éxitos pasados, sino una prueba viviente de cómo el arte, la moda y la música pueden seguir evolucionando con el tiempo.