En el mundo del teatro, los imprevistos pueden convertirse en anécdotas inolvidables. Así sucedió durante la producción de la obra The Moment When, en Broadway, cuando el joven actor Kieran Culkin, de apenas 17 años, decidió reemplazar un cigarrillo de utilería por uno real de marihuana. Lo que inicialmente fue concebido como una broma, resultó en una noche memorable tanto para el elenco como para el público.
El incidente, ocurrido en el año 2000, fue revelado recientemente por Culkin en una entrevista con The Guardian, donde asumió plena responsabilidad por el episodio. Según explicó, la idea surgió como una travesura adolescente: “Pensé que era una buena broma. Era joven y estúpido”, admitió.
El cigarrillo real permaneció semanas en el escenario hasta que, durante una presentación con público y críticos presentes, fue utilizado accidentalmente por el actor Mark Ruffalo en una escena inicial.
Reacciones en el escenario y entre bastidores
La noche en que el incidente ocurrió, Culkin notó algo extraño desde el escenario: el olor inconfundible del cannabis. Fue entonces cuando se dio cuenta de que su broma finalmente había surtido efecto. Mark Ruffalo, completamente ajeno al cambio en la utilería, inhaló profundamente varias veces durante la escena, lo que provocó un giro inesperado en su actuación.
Y no solo Ruffalo fue afectado. La actriz Phyllis Newman, quien también compartía escenario, notó el cambio: “No fumo marihuana desde los años 60. Gracias, querido”, comentó divertida más tarde. Otro miembro del elenco, quien nunca había consumido cannabis, expresó: “¿Esto es estar drogado? Es encantador”.
En medio del desconcierto general, el director de escena intervino de manera enérgica. Según recuerda Culkin, le exigió que entregara el resto del cigarrillo: “Arruina tu vida en tu tiempo libre”, fue la sentencia final que recibió el joven actor.
Reflexión y aprendizaje
Para Culkin, la experiencia marcó una lección importante. Ahora con 42 años y reconocido por su papel en la exitosa serie Succession, el actor asegura que no volvería a cometer un error similar. “Era un adolescente inmaduro. Hoy entiendo mejor las implicancias de mis acciones”, explicó en la misma entrevista.
Por su parte, Ruffalo también recordó este episodio en varias ocasiones. En una entrevista en The Graham Norton Show en 2012, aunque sin mencionar el nombre de Culkin, detalló cómo el incidente influyó en su actuación esa noche: “Entre los dos, nos fumamos un porro gigante en el escenario. Yo pensaba: ‘¡Estoy en llamas esta noche! ¿Por qué ese tipo en el backstage se ríe de mí?’”, relató. A pesar del caos, aseguró que obtuvo las mejores críticas de su carrera por aquella presentación.
Impacto en las carreras de los involucrados
La anécdota se convirtió en una curiosidad memorable en las carreras tanto de Ruffalo como de Culkin. Para el primero, fue un ejemplo de cómo incluso las situaciones más inesperadas pueden resultar en actuaciones destacadas. Para Culkin, la broma forma parte de un pasado al que mira con humor pero también con cierta vergüenza.
Actualmente, Culkin promociona su nueva película, A Real Pain, dirigida por Jesse Eisenberg, y está nominado a un Globo de Oro como mejor actor de reparto por este proyecto. Además, planea regresar a Broadway en la primavera para una producción de Glengarry Glen Ross.
Por su parte, Ruffalo continuo consolidándose como uno de los actores más reconocidos de Hollywood, con papeles icónicos como Hulk en el universo cinematográfico de Marvel y películas de alto perfil como Spotlight y The Kids Are All Right.
Una lección para la posteridad
Si bien este incidente podría haberse convertido en un desastre para la producción, terminó siendo un recuerdo compartido con humor entre quienes estuvieron presentes. Refleja tanto la vulnerabilidad del teatro en vivo como la capacidad de sus participantes para adaptarse a lo inesperado. Aunque Culkin insiste en que su tiempo de bromas quedó atrás, este episodio sigue siendo un recordatorio de los riesgos –y las risas– que pueden surgir de una broma fuera de lugar.
“Definitivamente, fue una lección de vida”, concluyó Culkin, reafirmando su compromiso con un enfoque más profesional en el futuro.