En un mundo donde la Navidad se asocia cada vez más con el consumismo, regalos y una interminable lista de objetos materiales, la pareja de celebridades Mila Kunis y Ashton Kutcher ha tomado una decisión poco común. Desde hace años, ambos actores decidieron no regalarles nada a sus hijos, Wyatt, de 10 años, y Dimitri, de 8, en el día de Navidad. Esta decisión, lejos de ser una simple preferencia personal, está basada en una reflexión profunda sobre cómo quieren criar a sus hijos y evitar que se conviertan en personas malcriadas o con expectativas erróneas respecto a lo que significa la festividad.
Según explicó Kunis a ETOnline en 2017, esta decisión surgió cuando se dieron cuenta del número excesivo de regalos que recibía su hija cuando era muy pequeña. En palabras de Kunis, “ya no apreciaba el regalo, no sabía qué está esperando; simplemente esperaba cosas”. Para la actriz esa fue la señal de alerta sobre los riesgos de criar hijos con expectativas erróneas sobre el significado de las festividades.
Según detalló la pareja, este tipo de comportamiento puede llevar a que los niños se vuelvan materialistas y sientan que tienen derecho a recibir más, sin ningún esfuerzo. Por esta razón, decidieron establecer una nueva tradición familiar, basada en la generosidad y el valor de las experiencias compartidas.
A lo largo de los años, Kunis y Kutcher han seguido adaptando sus tradiciones familiares a su propia visión de lo que es importante. Además de su decisión de no regalar a sus hijos, también disfrutan de otras actividades que refuerzan su idea de crianza. Se centran en el valor de las experiencias y no en las cosas
A pesar de ser una familia famosa, no suelen asistir a lugares de entretenimiento exclusivos, sino que prefieren actividades simples y enriquecedoras, como visitar bibliotecas públicas. “Tenemos una tarjeta de biblioteca pública en cada ciudad a la que vamos”, aseguró Kunis, lo que demuestra cómo intentan incorporar la cultura y la educación en sus vidas cotidianas.
Este tipo de filosofía familiar, que pone en primer plano la generosidad, el aprendizaje y el vínculo familiar, muestra cómo Kunis y Kutcher están creando un ambiente en el que sus hijos pueden crecer sin caer en los excesos ni en la superficialidad que a menudo acompaña a la fama y el dinero.
No solo se trata de evitar el materialismo, sino de inculcar valores sólidos que, según ellos, son fundamentales para que sus hijos se conviertan en personas empáticas y agradecidas. A través de este enfoque, los Kutcher esperan que sus hijos lleguen a comprender que lo que realmente importa es el tiempo compartido, las buenas acciones y el amor incondicional de la familia, que es un verdadero ejemplo para la sociedad.