Desde una sala con vistas al Central Park, Art Garfunkel, socio de Paul Simon en el legendario dúo Simon & Garfunkel, está celebrando por estos días junto a su hijo Art Jr., el lanzamiento de su primer álbum conjunto, Father and Son.
La obra reúne clásicos de los años ‘60 como Blue Moon y temas modernos como Time After Time, aquel hit de Cyndi Lauper, en un proyecto que fusiona generaciones a través de la música. “Mi hijo me supera; tiene un tono puro y hermoso”, reconoce Garfunkel padre, cuya voz -ahora más gastada- encuentra en la claridad de Art Jr. un complemento perfecto.
La conexión musical entre padre e hijo comenzó cuando Art Jr. tenía menos de dos años y debutó en Japón, vestido con un kimono y cantando en escena. Esa dinámica se fortaleció a lo largo de los años, con momentos tan íntimos como compartir un micrófono en el escenario. “Estábamos tan cerca que nuestras frentes se tocaban”, recuerda el padre, definiendo esos instantes como de absoluta plenitud.
Para Art Jr., grabar el álbum juntos era un imperativo emocional. “El tiempo es tan valioso, y rara vez nos detenemos a pensar en ello”, reflexiona. Su padre, por su parte, veía el proyecto como una necesidad: “Este álbum tenía que existir”. Father and Son encapsula décadas de colaboración y un vínculo que trasciende lo musical, convirtiéndose en un testimonio de amor y legado familiar.
La música como lenguaje familiar en los Garfunkel
La historia musical entre Art Garfunkel y su hijo Art Garfunkel Jr. comenzó mucho antes del lanzamiento de Father and Son. Desde los primeros años de Art Jr., la música fue un lenguaje compartido en el hogar. “Empezamos a cantar juntos cuando yo tenía menos de dos años”, recuerda Jr., quien con el tiempo pasó de ser el niño que acompañaba a su padre en presentaciones a ser parte integral de su banda.
El escenario también fue testigo de esta relación única. Art Sr. recuerda con especial cariño los conciertos en los que cantaron tan juntos que sus frentes se tocaban: “Fue un momento de cercanía plena”, relata. Esos instantes en el escenario consolidaron un vínculo profundo, que se transformó en colaboraciones más frecuentes a medida que Art Jr. crecía.
El álbum, nacido de esta conexión, reúne influencias de ambos: mientras Art Sr. seleccionó clásicos estadounidenses de su época, Art Jr. incorporó temas de los años ‘80 que reflejan su propio gusto musical. Así, Father and Son no sólo es un homenaje a la música, sino también una celebración de un lazo familiar forjado a través de la armonía.
Garfunkel solista, una travesía entre poesía y silencio
Lejos de los reflectores y la dinámica de las giras, Art Garfunkel encontró en los largos paseos solitarios una forma de redescubrirse. Durante más de 40 años, el artista recorrió continentes a pie, de Europa a Japón, escribiendo poesía y reflexionando sobre la vida en cada paso. “Descubrí que cuanto menos estímulos recibía de los medios y la televisión, más pleno me sentía”, explica el cantante, ahora de 83 años, sobre su fascinación por estos viajes.
Sin embargo, su conexión con el público nunca desapareció. A pesar de que detuvo sus giras en 2023 por problemas vocales, su legado solista incluye álbumes que exploran su rica sensibilidad artística. Desde su icónica voz, ahora marcada por el paso del tiempo, Garfunkel continúa siendo un referente de armonía y profundidad lírica, manteniendo vivo el espíritu de su música.
Una cena con Paul Simon: un puente sobre aguas tranquilas
Tras años de distanciamiento, Art Garfunkel y Paul Simon compartieron recientemente una cena llena de emociones que marcó un hito en su relación. El encuentro, propiciado por una coincidencia con el hijo de Simon en un hotel, permitió a Garfunkel reflexionar sobre declaraciones pasadas que habían tensado su vínculo. En una entrevista en 2015, Garfunkel calificó a Simon como un “idiota” por abandonar el dúo en la cúspide de su éxito, comentarios que admitió haber hecho para “agitar las cosas”.
Durante la cena, ambos se sinceraron sobre las heridas del pasado. Simon expresó cómo aquellas palabras lo habían afectado, lo que llevó a Garfunkel a disculparse profundamente. “Estaba siendo competitivo, y me quebré en lágrimas”, confesó Garfunkel. La reunión concluyó con abrazos y una sensación de reconciliación, dejando atrás años de tensiones tras la abrupta cancelación de su gira de reunión en 2010.
Aunque el futuro de Simon & Garfunkel sigue siendo incierto, Garfunkel no descarta una colaboración más. “Estoy dispuesto a trabajar con él, pero no sé si está en el ánimo para hacerlo”, comentó. Mientras tanto, imaginan posibles formatos, desde residencias en Las Vegas hasta presentaciones puntuales, que les permitan evitar las exigencias de las giras tradicionales.
Anécdotas arriba y abajo del escenario
Durante su carrera, Art Garfunkel acumuló historias que reflejan tanto el impacto de la fama como su búsqueda de normalidad. Tras la separación de Simon & Garfunkel, sorprendió a muchos al dedicarse en 1971 a enseñar matemáticas en un internado en Connecticut. “Me acerqué a los estudiantes desde lo emocional antes que lo académico”, recuerda, destacando cómo equilibraba sus propios retos personales mientras se alejaba de los reflectores.
No obstante, sus años en la cúspide de la música lo colocaron en momentos memorables junto a leyendas como Paul McCartney, quien en una ocasión interpretó furiosamente Lady Madonna al piano, respondiendo a un comentario de Garfunkel. Asimismo, recuerda con admiración un encuentro con John Lennon, quien le pidió consejo sobre una posible reunión con The Beatles. “Por supuesto, me halagó que alguien como Lennon quisiera mi opinión”, comenta sobre aquel diálogo que dejó huella en su memoria.
Para Garfunkel, la fama fue tanto una carga como una fuente de asombro. Reflexiona con una mezcla de humor y gratitud sobre los días en que tocaba en pequeños clubes de Londres junto a Simon, a cambio de apenas 30 libras por noche, comparándolos con los encuentros con los grandes íconos de su generación.
Lo que viene
A sus 83 años, Art Garfunkel sigue demostrando que la música es el hilo conductor de su vida. Junto a su hijo, Art Garfunkel Jr., encontró una nueva forma de conectar con el público. Su primera presentación como dúo, en el Café Carlyle de Nueva York, agotó entradas rápidamente, confirmando que su propuesta musical resuena tanto con viejas como con nuevas generaciones.
Los futuros conciertos planeados como Garfunkel & Garfunkel prometen ser una mezcla de clásicos de Simon & Garfunkel y temas de su reciente álbum, Father and Son. Art Jr. visualiza estos espectáculos como un “largo y elegante traspaso del testigo” entre padre e hijo. Entre los momentos más esperados, destaca su conmovedora interpretación de Father and Son de Cat Stevens, donde las voces de ambos simbolizan un diálogo generacional lleno de complicidad y afecto.
Para Garfunkel Sr., estos proyectos representan una forma de preservar su legado sin las exigencias físicas de las giras extensas. La posibilidad de residencias en Las Vegas o en Inglaterra surge como una opción atractiva, permitiéndole mantenerse conectado con el público sin alejarse de un ritmo de vida más tranquilo. “Que el público venga a ti, sin necesidad de viajar tanto, es una mejor fórmula”, señala con determinación.