Angelina Jolie ha sido una camaleónica presencia en la gran pantalla, adaptándose a cualquier rol como un agente encubierto cambia de identidad. Desde dramas intensos como Inocencia interrumpida, donde ganó su Oscar, hasta comedias de acción como Sr. y Sra. Smith, la actriz dejó su huella en cada género. Pero fue en 2010, con Salt, cuando mostró que podía ser tan implacable como cualquier héroe de acción. Su interpretación de Evelyn Salt no solo transformó una película originalmente pensada para Tom Cruise, sino que demostró que el trono de las estrellas de acción no tiene género. Jolie dejó claro que puede liderar una franquicia con la misma destreza con la que maneja armas en pantalla.
Salt, dirigida por Phillip Noyce, fue un éxito de taquilla. Estrenada en 2010, la película recaudó cerca de 300 millones de dólares a nivel mundial, gracias a una trama intensa y a la actuación de Jolie, quien inicialmente no estaba contemplada para el papel. El cambio de Cruise a Jolie resultó beneficioso, pues la actriz entregó una actuación impecable que ayudó a la película a captar la atención del público y a obtener buenos resultados en taquilla.
El argumento de Salt se centraba en Evelyn, una agente de la CIA cuya lealtad se pone en duda cuando es acusada de ser una espía rusa. La historia culmina con un final abierto que dejaba muchas posibilidades para una secuela. Evelyn escapa de la custodia de la CIA con la promesa de cazar a los infiltrados rusos conocidos como agentes durmientes. Además, se insinúa que el presidente de Estados Unidos podría ser un espía ruso encubierto. Este desenlace planteaba las bases para Salt 2.
A pesar del éxito de Salt y las expectativas de convertir la película en una franquicia, el proyecto de una secuela se vio truncado por varios factores. Uno de los principales obstáculos fue el rechazo de Angelina Jolie al primer borrador del guion de Salt 2, escrito por Kurt Wimmer, el mismo que se encargó del guion original. En 2012, Kurt Wimmer presentó el primer borrador de la segunda entrega, el que recibió un rechazo rotundo por parte de la actriz, según explicó Sensacine. A pesar de que Sony Pictures continuó trabajando en el proyecto y contrató a Becky Johnston para escribir una nueva versión del guion, la participación de Jolie en la secuela nunca estuvo asegurada, lo que terminó ralentizando el desarrollo.
Frente a la falta de avances en la secuela cinematográfica, en 2016 se anunció que Sony Pictures estaba explorando la idea de una serie de televisión basada en la película original. Esta adaptación buscaba relanzar la historia de Evelyn Salt, trasladando la acción a Europa y manteniendo la trama de espionaje internacional. Sin embargo, al igual que con la secuela, este proyecto también se quedó en el aire y no se ha sabido más sobre su desarrollo.
El fracaso en la realización de Salt 2 y la serie de televisión no es un caso aislado en Hollywood. En los últimos años, la industria cinematográfica ha apostado fuerte por los remakes, secuelas y reboots, lo que deja abierta la posibilidad de que la historia de Evelyn Salt sea retomada en algún momento.
La carrera de Angelina Jolie
Angelina Jolie irrumpió en Hollywood a finales de los 90, heredando parte del talento de su padre, el actor Jon Voight. Tras algunos papeles menores, su gran oportunidad llegó con Gia (1998), una película para televisión donde interpretó a la modelo Gia Carangi, papel que le valió su primer Globo de Oro y atrajo la atención de la crítica. Sin embargo, fue en el año 1999 cuando su carrera despegó definitivamente gracias a Inocencia interrumpida. Su interpretación de Lisa, una joven rebelde en un hospital psiquiátrico, le valió el Oscar a Mejor Actriz de Reparto y marcó su entrada en el estrellato.
A partir de ahí, Jolie se consolidó como una de las actrices más versátiles y solicitadas de Hollywood. Entre sus películas más destacadas se encuentran Lara Croft: Tomb Raider (2001), que la catapultó como estrella de acción, Sr. y Sra. Smith (2005), donde compartió pantalla con Brad Pitt en una exitosa mezcla de acción y comedia, Maléfica (2014), que la convirtió en el rostro de una icónica villana de Disney y Changeling (2008), donde mostró su destreza dramática bajo la dirección de Clint Eastwood, obteniendo una nominación al Oscar por su interpretación. Con películas como Eternals (2021), Jolie sigue siendo una figura clave en la industria, mostrando una carrera que ha desafiado las convenciones y ha redefinido lo que significa ser una estrella de cine en Hollywood.