El reconocido actor de Doctor Who, John Simm, se encontraba en una travesía inesperada cuando aceptó participar en un programa de genealogía junto a su amigo y colega Philip Glenister. Lo que comenzó como una simple colaboración para el show de ITV “DNA Journey” resultó en un descubrimiento que cambiaría para siempre la perspectiva que el actor británico tenía sobre su origen y su identidad familiar.
Un test de ADN reveló que el hombre que Simm creía que era su padre biológico no lo era realmente. Esta revelación llevó al actor a un viaje personal que incluyó el encuentro con una media hermana que desconocía y una nueva comprensión de la historia de su familia paterna.
Simm, conocido por su papel en series como “Life on Mars”, explicó que al hablar con su madre sobre el test, ella le confesó algo que nunca antes había mencionado. Durante la época en que Simm fue concebido, sus padres se habían separado brevemente y habían salido con otras personas antes de retomar su relación.
A lo largo de su vida, John Simm siempre había sentido una conexión muy especial con su padre, Ronald Simm, el hombre que lo crio y a quien consideraba su modelo a seguir. Desde pequeño compartieron una afición por la música, llegando incluso a actuar juntos en clubes locales, donde tocaban la guitarra y cantaban canciones de grupos como The Beatles y The Everly Brothers. La revelación de que su verdadero padre biológico era otro hombre fue un duro golpe para el actor, quien manifestó que su padre siempre sería la figura paterna más importante para él. “Me alegra que mi papá no esté aquí para ver esto, porque estoy seguro de que también se sentiría impactado y molesto”, comentó Simm sobre el descubrimiento en el programa.
Al profundizar en la investigación, Simm descubrió que su padre biológico era un hombre llamado Terence Naylor, quien había fallecido en 1998 a la edad de 58 años, cuando el actor tenía 28. Terence había pasado gran parte de su vida en clubes de trabajadores, en una sorprendente coincidencia con la actividad que Simm realizaba junto a su padre adoptivo. El actor llegó a especular que él y Terence podrían haberse cruzado en algún momento de sus vidas, ya que ambos frecuentaban los mismos clubes trabajando en el área de Manchester durante la década de los 80.
La sorpresa no terminó allí. Además Simm descubrió también que tenía una media hermana, Karen, nacida tres años antes que él del primer matrimonio de Terence. Durante su encuentro, Karen le mostró fotografías de su padre biológico y videos donde se destacaba el impresionante parecido físico entre ambos. Fue en este momento cuando Simm se dio cuenta de que, a pesar de no haber conocido a Terence en vida, compartía una herencia física notable con él, especialmente en sus ojos.
El actor reconoció que, aunque fue un momento difícil, quería continuar con el programa y descubrir todos los detalles de su historia familiar. También admitió que, al crecer, siempre se sintió “un poco diferente” al resto de su familia, aunque nunca pudo identificar la razón exacta de ese sentimiento.
Para el actor, la verdad detrás de su origen biológico cambió su comprensión de quién era y también le permitió conocer un nuevo capítulo de su historia familiar, uno que nunca imaginó que descubriría. A pesar de la revelación, no albergó resentimiento hacia quien consideraba su padre, ya que este siempre cumplió con su papel con responsabilidad y cariño. Desde antes de conocer la verdad, había sido un ejemplo de atención y amabilidad, consolidando un lazo paternal sólido.