El director de Joker reveló los problemas para trabajar con Joaquin Phoenix y lo difícil de filmar la segunda película de la saga

En el mundo del cine, pocas películas han generado tanta expectativa y debate como “Joker”. La primera entrega, lanzada en 2019, fue un éxito rotundo, no solo en taquilla, sino también entre la crítica, consolidando a Joaquin Phoenix como uno de los actores más versátiles y complejos de su generación. Bajo la dirección de Todd Phillips, Phoenix encarnó a un Arthur Fleck devastado por la sociedad, que finalmente se transforma en el célebre villano de Gotham. Sin embargo, si bien el resultado en pantalla fue deslumbrante, el camino hacia la secuela, “Joker: Folie à Deux”, estuvo plagado de desafíos que empujaron al límite tanto a sus protagonistas como al equipo de producción.

Con la expectativa puesta en esta secuela, Phillips decidió repetir la fórmula que llevó a la primera película al éxito, pero lo que muchos no esperaban era que este enfoque libre y caótico resultaría aún más complicado de manejar. La presencia de Lady Gaga, en el papel de Harley Quinn, y la innegable libertad creativa de Phoenix fueron tanto una bendición como una maldición durante el proceso de rodaje.

A lo largo de meses de filmación, el guion fue reescrito varias veces; las escenas cambiaron de rumbo y el caos se instaló en el set, generando lo que Phillips describe como “una experiencia liberadora, pero extremadamente difícil de controlar”.

El rodaje de “Joker: Folie à Deux” no fue solo un ejercicio cinematográfico; fue un campo de batalla emocional y artístico. En una reciente entrevista para Variety, Phillips detalló cómo Phoenix se convirtió en un factor impredecible, impulsando constantes cambios en la narrativa. Lo que muchos podrían considerar una falta de profesionalismo, el director lo definió como una “genialidad fuera de lo común”, un proceso creativo que, aunque frustrante, dio lugar a un producto final que promete ser tan inquietante como la primera entrega.

Desde el primer día, Joaquin Phoenix marcó el tono de lo que sería un proceso de producción atípico. Según confesó Todd Phillips, el actor, conocido por su intensa dedicación y enfoque poco convencional, solía detener el rodaje para pedir cambios en las escenas. “Pensábamos que una escena ya estaba lista para ser filmada, pero entonces ,Joaquin decía: ‘No, no, no, tengamos una reunión rápida al respecto’, y tres horas después estábamos reescribiendo todo en una servilleta”, relató el director.

Esta tendencia a cuestionar cada detalle se trasladó también a su relación con Lady Gaga, quien, a pesar de las dificultades, demostró estar a la altura de las circunstancias. La cantante y actriz, que da vida a Harley Quinn en esta secuela, describió el proceso como “liberador”, aunque no sin esfuerzo. Gaga explicó en otra entrevista para Vogue que a menudo pasaba horas aprendiendo su parte solo para llegar al set y descubrir que el guion había cambiado por completo. “Nos reuníamos en el tráiler de Joaquin y a veces rompíamos el guion y empezábamos de nuevo”, recordó.

Ridley Scott, quien trabajó con Phoenix en “Napoleón”, corroboró este estilo de trabajo del actor, describiéndolo como un hombre que opera “a partir de la intuición”. “Si algo le molesta, lo hace saber”, señaló Scott, explicando que también tuvo que reescribir escenas enteras en su película para acomodar los comentarios del actor. Sin embargo, aunque estos cambios han llevado a algunos a calificar a Phoenix de “prima donna”, Phillips se apresuró a defenderlo, argumentando que su enfoque “fuera de lo común” es lo que hace que sus personajes sean tan memorables.

Pero este nivel de improvisación también tuvo consecuencias. Durante la producción, se reportaron largas jornadas de filmación en las que los extras debían esperar horas sin poder moverse, y se impusieron restricciones en los descansos para ir al baño, lo que desató críticas sobre las condiciones laborales en el set. Aunque no se puede culpar directamente a Phoenix, las interrupciones constantes y las sesiones de reescritura sin duda contribuyeron a un ambiente de trabajo tenso y agotador.

Para los fans que esperan con ansias el regreso de Arthur Fleck y la presentación de Harley Quinn en este universo, la fecha de estreno de “Joker: Folie à Deux” está marcada para el 4 de octubre de 2024. La película será distribuida por Warner Bros., y se espera que continúe el tono oscuro y perturbador que caracterizó a la primera entrega.

La historia, que retoma la vida de Arthur Fleck tras ser arrestado por el asesinato del presentador de un programa de televisión, se centrará en su juicio y su tiempo en el Arkham Asylum, donde entablará una relación con Lee, el personaje interpretado por Lady Gaga. Aunque algunos rumores sugieren que la película tendrá momentos musicales, Gaga ha aclarado que no se trata de un musical tradicional, sino de una película que mezcla géneros de una manera innovadora.

Phillips explicó que la meta con esta secuela fue crear algo que “pareciera hecho por gente loca”, y si los informes del set sirven de indicativo, parece haberlo conseguido. La colaboración entre Phoenix y Gaga, sumada a la audacia narrativa de Phillips, promete una secuela que, si bien fue difícil de realizar, seguramente dejará una huella indeleble en el cine contemporáneo.