Queen es una de las bandas más memorables y emblemáticas. Fue formada en 1970 por Freddie Mercury, Brian May, Roger Taylor y John Deacon. Es conocida por su estilo innovador y su capacidad para desafiar las normas musicales. Entre sus éxitos más notables se encuentra “Bohemian Rhapsody”, una canción que ha dejado una huella en la historia de la música. Desde los cánticos que remontan y ambienta al oyente en la ópera, hasta el cambio brusco en la melodía y su peculiar duración. Pero, cuál es el origen exacto de esta célebre canción.
El origen de “Bohemian Rhapsody”
La génesis de “Bohemian Rhapsody” se remonta a finales de los años 60, cuando Freddie Mercury era aún estudiante en el Ealing Art College en Londres. La canción comenzó como fragmentos y bocetos garabateados en trozos de papel. Brian May recuerda cómo Mercury llegó a los primeros ensayos con la banda con una idea clara, aunque inicialmente nombró la canción “The Cowboy Song”.
Freddie Mercury tenía una visión audaz para el tema, que combinan características clásicas del rock con elementos operísticos, lo que fue algo inusual y experimental para la época. Para Mercury, la idea de mezclar múltiples ideas en una sola pieza monumental era más atractiva que crear varias canciones individuales. En lugar de seguir una estructura convencional, Mercury optó por una formación compleja que incluyera varias secciones distintas.
El proceso de grabación
La grabación de “Bohemian Rhapsody” comenzó formalmente el 24 de agosto de 1975 en los Rockfield Studios en Gales. Antes de eso, Queen ensayó intensamente en el Ridge Farm Studio en Surrey y dedicó tres semanas a perfeccionar detalles en Penrhos Court en Herefordshire. El proceso fue extremadamente demandante, con sesiones que duraban de 10 a 12 horas diarias.
Gran parte del tiempo se dedicó a la sección operística de la canción, con el objetivo de crear el icónico coro. Para ello, la banda superpuso 160 pistas de grabaciones vocales, pero, usaron una grabadora analógica de 24 pistas. Freddie Mercury grabó las partes de registro medio, Brian May las de registro bajo y Roger Taylor las de registro alto. Una semana completa se destinó exclusivamente a esta sección operística.
Las sesiones de grabación fueron intensas y minuciosas. Roger Taylor, el baterista de Queen, confesó que se necesitó mucha paciencia para completar la canción debido a los numerosos gaps (espacios) en la pista final. Los músicos ensayaron sus partes vocales continuamente entre 10 a 12 horas por día, y en la versión original se superponen sus voces múltiples veces, lo que llegó a lograr el sonido deseado.
Impacto y legado
Cuando “Bohemian Rhapsody” fue lanzada el 31 de octubre de 1975, encontró resistencia por parte de la discográfica debido a su duración de seis minutos, considerada demasiado larga para un sencillo. Sin embargo, la perseverancia de la banda y el apoyo del DJ de Capital Radio, Kenny Everett, fueron cruciales para que la canción se difundiera ampliamente y se convirtiera en un éxito inmediato.
La canción alcanzó el número 1 en el Reino Unido, donde permaneció durante nueve semanas consecutivas. El videoclip innovador, dirigido por Bruce Gowers, también jugó un papel fundamental en su éxito, considerado uno de los primeros en sofisticar el formato promocional de música.
A lo largo de los años, “Bohemian Rhapsody” ha sido aclamada como una de las mejores canciones de la historia, con una estructura única y una mezcla atrevida de géneros. En 2018, fue declarada la canción más reproducida del siglo XX en plataformas de streaming, superando los 1,6 mil millones de reproducciones. La biopic de 2018, “Bohemian Rhapsody”, protagonizada por Rami Malek, reavivó el interés por la canción, llevándola nuevamente a las listas de éxitos y demostrando la atemporalidad de esta obra maestra de Queen.
Freddie Mercury, con su creatividad incansable, y el compromiso inquebrantable del resto de la banda, lograron crear una de las piezas más icónicas y revolucionarias en la historia del rock con “Bohemian Rhapsody”, que rompió las convenciones y dejó un legado perdurable en la música.