La exitosa serie de Netflix “Emily en París” se ha convertido en un verdadero fenómeno global, cautivando a millones de espectadores con su atractiva combinación de moda, romance y cultura francesa. Desde su estreno en 2020, esta comedia romántica ha sido elogiada por su estilo visual deslumbrante, sus escenarios parisinos de ensueño y su mirada fresca a la vida en una de las capitales más glamorosas del mundo.
Protagonizada por Lily Collins en el papel de Emily Cooper, una enérgica y ambiciosa ejecutiva de marketing que se muda de Chicago a París por trabajo, la serie sigue sus aventuras mientras navega por los desafíos culturales, las complejidades del amor y su carrera en una prestigiosa firma de marketing francesa.
A medida que Emily se sumerge en la vibrante escena parisina, su estilo de moda ecléctico y su personalidad encantadora cautivan a sus compañeros de trabajo y al público por igual. Desde sus atuendos llamativos hasta sus icónicas faldas con estampados, Emily en París se ha convertido en una fuente inagotable de inspiración para las tendencias de moda más recientes.
Pero más allá del glamour y el estilo, la serie también explora temas profundos como la amistad, el amor, la identidad cultural y la búsqueda de la realización personal. A medida que Emily se enamora de la ciudad de las luces y sus encantadores habitantes, los espectadores se ven inmersos en un mundo lleno de romance, intrigas laborales y aventuras inesperadas.
Durante las tres temporadas, Emily Cooper resalta por su sentido del estilo que en la cuarta no se queda atrás. En uno de los episodios, el atuendo que usó la protagonista llamó la atención de los espectadores: un vestido a rayas negras y blancas con un sorprendente sombrero como accesorio junto a un antifaz de encaje. El vestido tiene fuertes referencias y guineos a grandes iconos de la moda.
Lily Collins expresó su emoción por el atuendo que lució vía Instagram: “Pequeña conmoción por el vestido/mono, sin duda mi traje favorito absoluto de la cuarta temporada, diseñado por mi querido amigo, el único e inigualable Harris Reed.” También comentó que “Desde el momento en que leí el guion por primera vez, supe que solo Harris podía hacerlo. Cada detalle estaba tan bien pensado, inspirado y simplemente perfecto para Emily.”
Del baile glamoroso neoyorquino a la elegancia exuberante parisina
El atuendo que luce Lily Collins en el baile de máscaras del tercer episodio de la cuarta temporada es una clara referencia al vestido a rayas blancas y negras que llevó Amanda Carter Burden, hija de Babe Paley, en el famoso “Black and White Ball” organizado por Truman Capote en 1966 en Nueva York.
El “Black and White Ball” fue una legendaria fiesta de máscaras. Este glamoroso evento reunió a las más altas esferas de la sociedad neoyorquina, convocando a estrellas de Hollywood, aristócratas, artistas, modelos y diseñadores de renombre. Con un código de vestimenta estricto que exigía esmóquines negros y máscaras del mismo color para los caballeros, y vestidos largos blancos o negros con máscaras blancas para las damas, el “Black and White Ball” se convirtió en una velada icónica y sin precedentes. El evento marcó un hito en la historia de las fiestas de la alta sociedad, y su legado ha perdurado durante décadas, convirtiéndose en una referencia ineludible del glamour y la opulencia de la época dorada de Nueva York.
En 1956, el diseñador Cecil Beaton creó un impresionante vestido de estilo eduardiano para la escena de Ascot en la producción original de Broadway del musical “My Fair Lady” de Lerner y Loewe. La escena estaba repleta de hermosos vestidos blancos y negros, siguiendo la tradición del famoso “Black Ascot” de 1910, cuando el rey Eduardo VII falleció justo antes del evento, haciendo inapropiado el uso de colores vivos.
Beaton diseñó el vestido de crepé crema con rayas de terciopelo negro y un bib de encaje bordado, que fue ejecutado por Helene Pons basándose en sus bocetos. Cuando Truman Capote decidió organizar su legendario “Black and White Ball” en 1966, utilizó la escena de Ascot de “My Fair Lady” como inspiración principal. Amanda Carter Burden optó por usar uno de los vestidos de la producción teatral de Broadway, el mismo que se subastó en 2015 por $1.280 y que incluía un cuello de encaje añadido después de la producción, visible en las fotografías de Burden en el baile.
Los guiños de Emily in Paris a Audrey Hepburn
Además de la inspiración en el vestido de Amanda Carter Burden, el look de Emily Cooper cuenta con otros detalles que rinden homenaje a la icónica actriz y estilo de Audrey Hepburn. Por un lado, la sobrefalda voluminosa y el sombrero de ala ancha son una reminiscencia del estilismo de Hepburn en la película “My Fair Lady”.
No es la primera vez que en la serie aparecen guiños al estilo legendario de Audrey, en una escena de esquí, Emily viste un pasamontañas parecido al que Hepburn llevó en la película “Charade”. Además, el vestido fue confeccionado especialmente por Harris Reed, director creativo de Nina Ricci, marca de la que Hepburn fue embajadora.
Qué va a pasar en la cuarta temporada de Emily in Paris
La cuarta temporada de “Emily in Paris” se estrenará en dos partes: la primera el 15 de agosto de 2024 y la segunda el 12 de septiembre. La trama profundizará en las consecuencias de la boda fallida de Camille y Gabriel, el embarazo inesperado de un personaje importante, y los dilemas amorosos de Emily. Además, la serie explorará nuevas locaciones como Roma, ampliando su universo geográfico y cultural. Se espera un giro dramático en la relación entre Emily y Gabriel, amenazada por dos grandes secretos que pondrán en riesgo sus sueños compartidos.