Will Smith está en el foco de atención de Los Ángeles. Ya dejó atrás su escándalo en los Premios Oscar 2022 y su nombre volvió a estar en boca por su protagonismo en Bad Boys: hasta la muerte (Bad Boys: Ride or Die), la cuarta entrega de la exitosa franquicia de comedia de acción. Si bien para el rodaje de esta película se rompió el talón mientras saltaba la soga, no fue lo peor que le pasó en un set de grabación.
El actor estadounidense, ahora con 55 años, ha revelado detalles sorprendentes sobre su experiencia cuando interpretó al legendario boxeador Muhammad Ali en la película biográfica del púgil, que fue estrenada en 2001 y dirigida por Michael Mann.
Estas confesiones se dieron en una entrevista reciente en el programa Hot Ones de First We Feast. El golpe más duro que ha recibido en el set de grabación de una película fue durante la filmación de esta icónica película, revelado por el mismo Smith.
Durante el rodaje de “Ali”, Smith trabajó estrechamente con Michael Bentt, quien interpretó al boxeador Sonny Liston, también conocido como “The Big Bear” y por ser el púgil en el suelo de la emblemática foto de Ali. Según contó Smith al presentador Sean Evans, mientras filmaban una escena de boxeo, ocurrió un incidente que nunca olvidará.
“Mi entrenador estaba tratando de hacerme avanzar el ángulo de mi columna. Y en ese segundo pensé: ‘¿Sabes qué? Hay que comprometerse.’ Y me comprometí y me incliné hacia adelante”. En ese instante, casi como un reflejo instintivo, Bentt lanzó un derechazo que Smith no pudo esquivar completamente.
“Yo lo vi venir en el último segundo y bajé la cabeza, pero no llegué a esquivarlo. Me atrapó con un derechazo justo encima de mi cabeza”, explicó Smith. El actor describió el impacto como algo que no hizo retroceder su cabeza, sino que comprimió su cuello hasta la columna.
“Sentí una descarga eléctrica que recorrió la parte posterior de ambos brazos hasta los codos... fue el golpe más fuerte que jamás me hayan golpeado en un set de película”, recordó con impresión como si volviera a sentir la electricidad.
El dolor sufrido en ese momento fue tan intenso que Smith solo podía pensar en una cosa: “¿Dónde carajo están mis llaves? ¿Dónde están mis llaves del coche?”, recordó.
Valió la pena
La dedicación que Smith puso en retratar al pionero boxeador no fue en vano: su interpretación en Ali le valió la primera de sus tres nominaciones al Oscar. Michael Mann, el director de la película, es conocido por su obsesión con la autenticidad, un rasgo que Smith resaltó durante la entrevista con Evans.
Recordó con detalle cómo Mann no permitía que en el set se reprodujera música que hubiera sido creada después del período que estaban filmando. “Así de apasionado es capturar la autenticidad de un momento”, sentenció Smith.
Cuando Muhammad Ali falleció a los 74 años en 2016, Smith tuvo el honor de desempeñar un papel especial en su funeral. Fue uno de los portadores del féretro del difunto campeón de peso pesado. Esta fue una muestra del profundo respeto y conexión que Smith sentía hacia el ícono deportivo que tan orgullosamente interpretó en la pantalla grande.
Todo eso quedó atrás para el actor y rapero norteamericano. En la actualidad está enfocado en lo que fue el lanzamiento del cuarto filme de Bad Boys y las repercusiones que está teniendo. En Los Ángeles, el estreno de la cinta congregó a una multitud en Hollywood Boulevard, donde Will Smith fue recibido con vítores y aplausos. Los golpes recibidos, en este y otros rodajes, valieron la pena.