¿Qué es lo que hace que las personas tengan éxito en su carrera profesional? La formación, la suerte o las aptitudes pueden ser aspectos determinantes, pero hay una herramienta no cognitiva que tienen las personas que logran el éxito laboral. Según Joseph Fuller, un profesor de la Escuela de Negocios de Harvard que ha trabajado gran parte de su vida con algunas de las personas más exitosas del mundo, considera que es un rasgo difícil de encontrar, aunque sea de suma importancia en una sociedad tan cambiante.
Los cambios suelen ser difíciles de asimilar, especialmente si se trata del área laboral, pues es habitual que la gente se aferre a la rutina y desear que todo siga como hasta ahora. Sin embargo, en la era del Nuevo Trabajo, esto se ha convertido casi en una ilusión.
Sin importar cuál sea la rama en la que se desempeñe la persona, lo que marca la diferencia y pone el primer escalón al éxito es estar abiertos a oportunidades y aceptar cambios sin tener miedo al mismo. En este sentido, el experto reivindica que, si bien es bueno fijar metas, no es ideal adoptar una mentalidad rígida que le cierre puertas a otras alternativas más ambiciosas.
Esta es la habilidad que hace a las personas exitosas
Un informe de LinkedIn demuestra que la capacidad de adaptación es una habilidad cada vez más demandada. De acuerdo con el estudio, las empresas actuales necesitan empleados flexibles y resilientes, debido a los cambios que viven en el entorno laboral de la era pospandémica.
El desarrollo de la inteligencia artificial, la adaptación al trabajo en casa o híbrido y la entrada al mercado laboral de las nuevas comunicaciones hace que la adaptabilidad sea cada vez más necesaria. Los reclutadores buscan contratar a personas que puedan habituarse rápidamente a diferentes circunstancias, como explica el informe.
“La adaptabilidad es la mejor manera de tener capacidad de acción en este momento. La esencia de la gestión del cambio es desarrollar ese músculo de adaptabilidad”, concluyeron los autores de LinkedIn. Pese a ello, es una habilidad cada vez más difícil de encontrar, como refiere Joseph Fuller, sobre todo por el miedo a probar cosas nuevas, salir de la zona de confort y equivocarse.
¿Qué es la adaptabilidad?
De acuerdo con la definición que brindó el psicólogo empresarial y autor Carl Naughton en una entrevista con dpa, la adaptabilidad es la capacidad de responder de manera efectiva ante diferentes escenarios y desafíos, en este caso, en el lugar de trabajo. Se trata de ajustar el propio comportamiento a las situaciones cambiantes, de avanzar de forma proactiva hacia las alternancias que se avecinan. El especialista calificó esta aptitud como la competencia más importante del futuro.
En sus palabras, no se trata de ser más flexible y aceptar todo, es decir, no es algo sin límite. “No se trata de decir ‘sí, estoy de acuerdo’ cada vez que hay un cambio o una nueva situación, pero alguien que tiene un muy bajo coeficiente de adaptación siempre dice que no”. Agregó que cuando una persona con capacidad de adaptación se encuentra bajo una situación compleja, se puede apuntar hacia el diálogo y la reflexión para lograr un acuerdo con la empresa.
Naughton comentó que durante la pandemia de coronavirus se enfrentó el desafío del trabajo remoto al cual la mayoría estuvo condicionado. Al final de la emergencia sanitaria se obtuvo un nuevo reto, que fue la vuelta a las oficinas sin que muchos de los empleados lo quisieran. En esta problemática, el psicólogo recalcó que hay dos cuestiones de adaptabilidad, la de los trabajadores y la de los empleadores, donde ambos deben ajustarse a una cuestión híbrida que beneficie a todos.
¿Cómo trabajar en mi capacidad de adaptación?
Trabajar en esta capacidad no solo promueve el crecimiento personal, sino que también permite afrontar desafíos con mayor confianza y eficacia. Para alcanzar estos beneficios, es necesario combinar actitudes y estrategias que fomenten la flexibilidad y la resiliencia ante nuevas circunstancias.
Aceptar el cambio es esencial para ser adaptable. Reconocer que el cambio es una constante inevitable ayuda a redirigir la energía hacia la búsqueda de oportunidades y el crecimiento personal dentro de los nuevos escenarios. De la misma forma, comprender el fracaso también juega un papel crucial. Para ello, es necesario ver los errores como parte del proceso de aprendizaje y adaptación, lo que permitirá fortalecer la resiliencia.
Por otro lado, mejorar las habilidades de resolución de problemas resulta indispensable. Al analizar situaciones de manera objetiva y buscar soluciones efectivas, es posible abordar cualquier reto con mayor confianza. Una mentalidad abierta, además, es clave para aprovechar las nuevas ideas y experiencias, especialmente aquellas que representan una salida de la zona de confort. Ampliar horizontes personales, como conocer nuevas personas o asumir retos distintos, fomenta esta apertura y fortalece la adaptabilidad.
La comunicación efectiva también es un componente esencial en el proceso de adaptación, ya que permite expresar dudas, intercambiar ideas y buscar apoyo para gestionar las transformaciones de manera más ágil y eficiente. Esto se complementa con el esfuerzo continuo por adquirir nuevas habilidades y conocimientos, es decir, mantenerse en constante aprendizaje, lo que facilita la adaptación a los avances y demandas de cualquier disciplina y aumenta la seguridad personal.
Ser una persona con una gran capacidad de adaptación tiene un impacto positivo dentro y fuera del ámbito laboral, pues fortalece la resiliencia, impulsa las habilidades de liderazgo, mejora la productividad y genera una actitud más optimista frente a los desafíos.
En definitiva, la adaptabilidad no solo es una herramienta para enfrentar el cambio, sino también una puerta a nuevas oportunidades y logros. Trabajar en su desarrollo es una inversión que rinde frutos a lo largo de toda la vida, permitiendo a las personas y organizaciones avanzar con seguridad y éxito en un mundo en constante transformación.