El tema de las apuestas online ha encendido alarmas en el ámbito educativo. Cada vez más escuelas reportan situaciones preocupantes relacionadas con estas prácticas, que afectan principalmente a los adolescentes. En respuesta a estas inquietudes, Ticmas organizó un webinar con Federico Pavlovsky, médico psiquiatra especializado en adicciones y compilador del reciente libro Apuestas online: La tormenta perfecta (Noveduc). El encuentro se transmitió en vivo por el canal de YouTube de Ticmas, donde está disponible para ver en forma completa.
“Estamos viendo un nuevo tipo de paciente, chicos muy jóvenes, incluso preadolescentes, que desarrollan dinámicas de azar en los videojuegos y luego pasan a las apuestas online”, explicó Pavlovsky. La expansión de las apuestas online entre los adolescentes está borrando los límites entre el ocio y la compulsión. Sin embargo, el psiquiatra advirió que no se debe encasillar rápidamente estos casos como ludopatía, lo que no es sino una forma de simplificar demasiado una realidad compleja. “En este caso, puede ser más útil ver el fenómeno como un hecho social que afecta a los adolescentes de una manera masiva y no solo como un trastorno individual”, señaló.
Las apuestas online tienen un impacto significativo en la salud mental de los adolescentes, ya que fomentan comportamientos adictivos y aumentan los riesgos de ansiedad y depresión. Las aplicaciones pueden ser la puerta hacia un mundo de recompensas aleatorias y compulsión. Los adolescentes, en una etapa de la vida en la que aún están desarrollando la regulación emocional y el autocontrol, son especialmente vulnerables a estos estímulos.
Hacia una estrategia colectiva en la escuela
“Yo no le pediría a los maestros y profesores más de lo que han hecho porque han cumplido un rol social fenomenal”, dijo Pavlovsky, “han visto el problema antes que nadie”. En este contexto, el papel de las escuelas y las familias es fundamental para enfrentar este desafío. Pavlovsky enfatizó la importancia de generar entornos de diálogo y apoyo, y recalcó que las soluciones individuales no son suficientes frente a una dinámica que invierte millones en mantener a los jóvenes enganchados. Por eso, propuso que las escuelas implementen “contratos grupales”: acuerdos colectivos donde se definan límites y normas claras sobre el uso de la tecnología y las apuestas.
Estos contratos no solo buscan reducir la exposición a las apuestas, sino también repensar cómo se integra la tecnología en la vida diaria. Los acuerdos podrían incluir pautas sobre el uso de dispositivos móviles durante la jornada escolar, así como normas sobre el manejo del tiempo libre. La idea es crear un entorno que refuerce la capacidad de los jóvenes para tomar decisiones informadas y responsables. Muchos estudiantes, de hecho, reconocían los beneficios de reducir su uso de dispositivos, notando mejoras en su bienestar y relaciones interpersonales.
Mientras se discute proyectos de ley que buscan limitar el acceso de los menores a estas plataformas y regular la publicidad que las promueve, Pavlovsky advirtió que la respuesta legislativa no siempre podía seguir el ritmo acelerado del mercado. “Estamos tratando de entender qué está pasando, pero la tecnología avanza mucho más rápido que las regulaciones”, reflexionó. Las escuelas, en muchos casos, son el primer lugar donde se detectan los signos de alerta, y allí es donde se pueden implementar estrategias efectivas para mitigar el problema.
El rol de la familia en la prevención
Más allá del ámbito escolar, Pavlovsky subrayó la importancia de involucrar a toda la comunidad en la lucha contra las apuestas online. Esto, por supuesto, incluye a las familias, que deben estar atentas a las actividades de sus hijos y fomentar espacios de conversación abiertos y sin prejuicios. “Hay padres que confunden el conocimiento tecnológico de sus hijos con la madurez emocional. Es fundamental recordar que siguen siendo chicos de 14 o 15 años, sin importar cuán hábiles sean con la tecnología”, dijo.
El psiquiatra insistió en que no se puede esperar que los adolescentes manejaran este problema solos. Es necesario fomentar un entorno de diálogo constante, donde las experiencias y preocupaciones de los jóvenes sean escuchadas y atendidas. En lugar de prohibiciones estrictas, Pavlovsky propuso un enfoque basado en el acompañamiento y el apoyo comunitario.
El fenómeno de las apuestas online entre adolescentes es un desafío complejo que exige una respuesta coordinada e integral. Pavlovsky instó a no subestimar el poder de la comunidad educativa y familiar en la formación de hábitos saludables y la prevención de conductas adictivas. La clave, según él, está en construir puentes de diálogo y acompañamiento que permitieran a los jóvenes navegar el mundo digital de manera segura y consciente. “La solución no vendrá de una sola parte; necesitamos un enfoque integral que involucre a todos los actores”, concluyó.