La Universidad de Buenos Aires (UBA) tiene seis carreras que se ubican entre las 50 mejores en su materia a nivel mundial, según los datos del ranking universitario QS por disciplinas, que se publicó hoy. En un contexto en el que las universidades públicas vienen denunciando el congelamiento del presupuesto educativo, la UBA volvió a ubicarse en el ranking QS como la mejor institución de educación superior del país.
Las posiciones de Argentina más destacadas en el ranking las alcanzan dos carreras de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA: Letras (Lenguas Modernas) queda en el puesto 21 en su categoría a nivel mundial (la carrera argentina mejor clasificada), mientras que Antropología se ubica en el puesto 24. Luego siguen Derecho (puesto 26), Ingeniería en Petróleo (26), Sociología (40) y las carreras del área de Arte y Diseño (46).
La UBA ubica otras tres carreras en el top 100 mundial: Historia y Geografía (ambas de la Facultad de Filosofía y Letras), y Política y Estudios Internacionales (de la Facultad de Ciencias Sociales). Otras 12 carreras de la Universidad de Buenos Aires se ubican entre las 150 mejores en su materia a nivel global.
Entre las universidades públicas, también se destacan las carreras de Antropología e Historia de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) y la carrera de Ingeniería Química de la Universidad Nacional del Sur, las tres dentro del top 150 mundial. La UNLP es la segunda universidad argentina con mayor presencia en la medición, con 20 carreras rankeadas.
El informe de QS señala que el sistema universitario argentino se destaca en las áreas de Artes y Humanidades y Ciencias Sociales. De las diez carreras mejor clasificadas en el país, nueve pertenecen a estos campos, ocho de ellas ofrecidas por la UBA.
Entre las universidades privadas, el lugar más destacado lo vuelve a ocupar la Universidad de Palermo en el área temática de Arte y Diseño (puesto 44): es la única institución privada que se ubica en el top 50. La Universidad Católica Argentina (UCA) sobresale en el área de Teología, Divinidad y Estudios Religiosos (dentro del top 100 mundial). En tanto, también se destacan entre las 150 mejores del mundo la carrera de Derecho de la Universidad Austral y la Universidad Torcuato Di Tella en el área de Política y Estudios Internacionales.
El ranking QS por disciplinas evalúa 5 áreas generales (Artes y Humanidades, Ingeniería y Tecnología, Ciencias de la Vida, Ciencias Naturales y Ciencias Sociales) y 53 áreas específicas. Participan más de 1500 universidades de todo el mundo.
En Argentina, quedaron clasificadas 98 disciplinas de 16 universidades: 11 públicas y 5 privadas. Esa cifra ubica al país en el quinto lugar a nivel regional, por detrás de Brasil (con 309 disciplinas rankeadas), Chile (173), México (156) y Colombia (138). Bastante más abajo quedaron los sistemas universitarios de Perú (38), Ecuador (12) y, con menos de 10 carreras rankeadas, Costa Rica, Uruguay, Venezuela y Puerto Rico.
La medición hace referencia a “áreas temáticas” porque las carreras tienen distintos nombres en los diferentes países. La clasificación toma en cuenta la reputación –tanto académica como entre los empleadores– que se obtiene a partir de encuestas de percepción, así como la cantidad de papers publicados y citados en revistas especializadas (con referato).
En función de estos parámetros, la UBA es la universidad mejor posicionada del país, con 35 áreas temáticas en el ranking QS, 9 de ellas entre las 100 mejores del mundo. Diez de sus asignaturas mejoraron en la clasificación con respecto a 2023. Además, la universidad se ubicó este año en el top 50 en un área temática general: Artes y Humanidades. Desde la UBA también destacaron la mejora en la disciplina de Ciencias de la Vida y Medicina, que pasó del puesto 155 al 147 en 2024.
“El estudio vuelve a posicionar a la UBA en la élite mundial de instituciones de educación superior, destacándola por su excelente desempeño en casi la totalidad de sus áreas de aprendizaje, los procesos de formación docente y la incorporación de nuevas tecnologías en el proceso enseñanza-aprendizaje. Todo esto, complementado con una fuerte política de internacionalización que se traduce en alcanzar los más altos estándares de evaluación mundial”, señaló la universidad en un comunicado.
El nivel de internacionalización –el porcentaje de estudiantes y profesores extranjeros– es uno de los indicadores de calidad que consideran los rankings universitarios. Por eso, desde QS cuestionaron el posible arancelamiento de las universidades estatales para los estudiantes extranjeros, según estaba previsto en la Ley Ómnibus original.
Para Ben Sowter, vicepresidente senior de QS, “la posible introducción de tasas de matrícula para los estudiantes internacionales” por parte del actual Gobierno nacional “podría poner en peligro el atractivo de Argentina en la escena internacional”. Sowter planteó: “Este delicado equilibrio entre mantener la excelencia educativa y ampliar el acceso y las oportunidades ante la adversidad económica pone de manifiesto la dura situación de las universidades argentinas”.
“Estamos orgullosos de recibir este reconocimiento por décimo año consecutivo como la mejor universidad argentina en Diseño, entre las mejores del mundo”, dijo Oscar Echevarría, decano de la Facultad de Diseño y Comunicación de la Universidad de Palermo (UP). “Este es un premio a todos los profesores y comunidad académica de la UP, y reafirma nuestro liderazgo en la formación de la nueva generación de diseñadores de la región”, opinó Echevarría.
“Es una gran alegría para la UCA que tres de sus facultades sean reconocidas en el ranking QS. Mientras que Teología y Abogacía se mantienen en los puestos 51-100 y 201-250, respectivamente, se agrega en este año la Facultad de Ciencias Médicas”, afirmó Miguel Ángel Schiavone, rector de la Universidad Católica Argentina. Desde la UCA destacaron especialmente que primera vez el área de Ciencias Médicas de la universidad haya sido valorada entre las de las mejores universidades del mundo, en el rango de puestos 651-700. “La formación de nuestros graduados cumple con las más estrictas normas internacionales de calidad en educación médica”, señaló Schiavone.
“Cada disciplina científica es analizada en estos rankings con criterios que varían de un campo a otro. Ser reconocidos en ámbitos tan variados como el Derecho, el Management o la Medicina estimula el compromiso de la universidad en su conjunto para brindar una educación de calidad”, comentó Julio Durand, responsable de la Unidad de Reputación Institucional de la Universidad Austral.
El conflicto por el presupuesto
Con una tasa de estudios superiores entre los jóvenes del 19% (muy por debajo del promedio de la OCDE), “las universidades argentinas deben aumentar el número de matriculados y las tasas de graduación si quieren progresar”, señalaron desde QS en un comunicado.
“Mientras Argentina se enfrenta a retos económicos marcados por una inflación anual que supera el 250% y una tasa de pobreza a punto de alcanzar el 60%, la resistencia y la excelencia duradera de su educación superior siguen siendo admirables. Las universidades argentinas, especialmente en los ámbitos de las Artes y Humanidades y las Ciencias Sociales, son testimonio del poder de una sólida reputación internacional”, afirmó Sowter.
Esa “resistencia” que QS reconoce su comunicado oficial puede asociarse también con el reclamo que las universidades públicas vienen sosteniendo por los recortes en el presupuesto y salarios. Desde el Gobierno nacional atribuyeron el reclamo a motivaciones partidarias y afirmaron que los gastos de funcionamiento de las universidades habían estado congelados en 2023, durante la gestión anterior, sin que las universidades se quejaran. Autoridades de la UBA y del CIN aseguraron a Infobae que la información es incorrecta.
Según explicaron desde la UBA, “de 2022 a 2023 hubo un incremento de los gastos de funcionamiento de acuerdo con la inflación de 2022″, en el marco de lo definido en la Ley de Presupuesto 2023, que contempló la inflación de 2022. “En términos operativos, esa partida aprobada de gastos de funcionamiento el Ministerio de Educación la divide en 12 cuotas mensuales iguales. Por eso, con el presupuesto en su conjunto ya actualizado, los gastos efectivamente se mantienen sin variación nominal a lo largo del año”, señalaron.
Sin embargo, aclararon que en noviembre y diciembre hubo ajustes en la transferencia de gastos de funcionamiento, luego de que la inflación se disparara a partir de agosto (entre enero y octubre de 2023, la inflación había acumulado 120%). “Pero el actual Gobierno no consideró esas transferencias y volvió a tomar como base el presupuesto de enero 2023″, dijeron desde la UBA.
“En 2023 no tuvimos presupuesto congelado. Tuvimos un refuerzo en noviembre de dos cuotas adicionales de gastos”, agregó Víctor Moriñigo, rector de la Universidad Nacional de San Luis y presidente del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN).
“La cuota de gastos de funcionamiento se actualiza cuando se vota la Ley de Presupuesto. El año pasado, la cuota de enero de 2023 no fue la misma que la de enero de 2022. Este año, al no votarse presupuesto, teníamos a marzo 2024 la misma cuota que en enero 2023″, ratificó Pablo Domenichini, rector de la Universidad Nacional Guillermo Brown. Entre enero de 2023 y marzo de 2024, la inflación alcanzó un 275%. El mes pasado, desde el Gobierno nacional anunciaron un incremento del 70% de los gastos de funcionamiento, que representan alrededor de un 5% del presupuesto universitario.
“Lo que el Gobierno dice es que durante 2023 no se actualizó y eso es así siempre, salvo que haya refuerzos extraordinarios. Lo que no se realizó este año es la actualización sobre el año pasado, con más de 200% de inflación acumulada”, agregó Domenichini.
Infobae consultó a la Secretaría de Educación sobre este tema. “Llama la atención que los gremios universitarios levanten la voz ahora que tienen un gobierno que aumentó 70% los gastos de funcionamiento y no el año pasado cuando, con una inflación de 211,4%, el aumento que tuvieron fue 0%”, respondieron desde la Secretaría.
Con respecto a los reclamos salariales de los profesores universitarios, fuentes de la Secretaría señalaron que tomaron como guía “la Comisión Técnica Asesora de Política Salarial del sector público”, es decir, la de los empleados estatales. Y agregaron: “Frente al acuerdo de los gremios universitarios que habían dejado firmado con la gestión anterior un aumento del 0% para enero y 10% para febrero, tuvimos en cuenta la situación particular autoinflingida y sin obligación agregamos 6% para llegar al 16% del resto de la administración nacional. También otorgamos un 12% en marzo. Esto demuestra la buena voluntad de la administración, pese a las acusaciones que se hacen”.
En este escenario, los rectores de las universidades estatales nucleadas en el Consejo Interuniversitario Nacional convocaron a una marcha a Plaza de Mayo “en defensa del sistema nacional universitario” para el martes 23 de abril. Así lo definieron durante el 91° Plenario de Rectoras y Rectores que tuvo lugar ayer en la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM). La marcha será en conjunto con el Frente Sindical de Universidades Nacionales y la Federación Universitaria Argentina (FUA), que originalmente habían convocado para el 25 de abril, pero definieron unificar la fecha con el CIN.
Desde el Frente Sindical de Universidades Nacionales expresaron: “Convocamos a toda la comunidad universitaria y a la ciudadanía toda a la gran marcha universitaria para defender la universidad pública, porque la verdadera libertad está en la educación”.