Se llama Francisco Guerra, pero su nombre en Zoom dice “Paco War”. Es el Líder Nacional de Robótica de las PrepasTec, y desde hace semanas viene trabajando en la preparación de los equipos que este fin de semana participarán en la primera competencia regional del año de FIRST, el evento que —por sus siglas en inglés— significa “Para la inspiración y el reconocimiento de la ciencia y la tecnología”. Con casi 50 equipos participando, las PrepasTec se presentan a competir con la mitad.
El interés de la institución por participar en el certamen es prioritario, ya que entienden fomentan en los estudiantes valiosos aprendizajes: generan habilidades como autogestión, el trabajo en equipo, la comunicación efectiva. El premio más importante, de hecho, no es la creación del robot sino la innovación en responsabilidad social. En una primera etapa, justamente mientras aprenden de ciencia y tecnología, desarrollan soluciones específicamente apuntadas al impacto positivo en su comunidad. Uno de los equipos, por ejemplo, levantó las paredes de una pequeña escuela con ecoladrillos y otro desarrolló hornos solares para evitar el uso hogareño de cocinas a leña, que puede traer problemas de salud.
Pasada esa primera parte, llega la preparación del robot para la competencia. El primer sábado del enero cada equipo recibió el reto del año, “Crescendo”: inspirado en una temática musical, los robots debían recoger aros (“notas”) para armar una melodía. Desde ese momento, se conformaron los planteles donde los integrantes cumplen roles en distintas áreas: hay mecánicos, programadores, otros se dedican a electrónica, el márketing y los patrocinios, que son quienes debe conseguir los recursos para el equipamiento. “Funciona como una pequeña empresa”, dice Francisco Guerra, “que, al final, es lo que van a vivir ellos cuando estén trabajando”.
—Antes de llegar a la posición de Líder Nacional de Robótica, diste clases durante diez años en el área de Tecnología, Arte y Diseño: ¿cómo es el vínculo del Arte en las áreas STEM?
—Es una buena pregunta, y es algo en lo que enfoco mucho también a los equipos. A veces se confunde con la pintura o con hacer un dibujo, pero eso está equivocado. Pensemos, por ejemplo, en un carro que te atrae no sólo por la ingeniería sino por cómo se ve, cómo están los asientos, cómo es el tablero, etc. La ingeniería necesita de gente que trabaje en cómo se ven las cosas. Aquí, en los robots que estamos haciendo, se ve el arte. A veces para reducir peso tienen que hacerle un patrón de cortes, pero tienen que verse bien. Además de hacer diseños funcionales, artísticamente tienen que verse bien.
—En tu sudadera llevas un parche de la NASA. ¿Por qué?
—La NASA es un gran impulsor de FIRST. El año pasado, inscribimos a los equipos de PrepaTec en un programa de la NASA que se llama NASA Partner. Ellos tienen un programa que difunde la ciencia y la tecnología en niños y adolescentes y quieren que los equipos de robótica asociados a NASA Partner impulsen la iniciativa replicando los programas de robótica en sus comunidades.
—¿Cómo es el acompañamiento que se hace con los estudiantes que participan en la competencia?
—Desde el 6 de enero, que fue cuando se les señaló el reto de este año, tuvieron seis semanas para armar un robot. Pero no es que tengan seis semanas para aprender a programar, ensamblar, etcétera, si no que eso es algo que viene de la vivencia de los tres años en la preparatoria. Y no solo aprenden de los mentores sino que también los estudiantes más grandes les enseñan a los chicos. Entonces el reto es como si se preparan para un examen final.
—¿Cómo es el rol del mentor?
—Por su experiencia, el rol del mentor es muy importante. Sabe cómo son las competencias y puede guiar a los estudiantes en qué funciona y qué no. Dean Kamen, el creador de la competencia, impulsa a los mentores a que trabajen junto a los estudiantes porque así ellos aprenden las mejores prácticas. Obviamente no se trata de que haga el trabajo, pero sí que los acompañe.
—Hay tres regionales: esta semana es en Monterrey, luego vienen Hermosillo y Torreón. ¿Cuántos equipos llegan a la final?
—Es muy interesante cómo funciona aquí la competencia, porque se juega en una cancha con tres equipos contra otros tres robots y tienes que armar una estrategia con los demás para ganarles a los oponente. A cada equipo le tocan diez juegos y siempre van cambiando aliados y oponentes. Al final se hace un ranking de todos los robots y los primeros ocho eligen con quienes hacer una alianza para jugar los playoffs. Al final, en cada regional, queda un equipo campeón de tres robots.