El avance de la tecnología, la aceleración exponencial del cambio y la adaptabilidad humana son temas centrales en el pensamiento del reconocido autor y divulgador Joan Cwaik, quien, desde hace más de diez años, ha venido trabajando en estos temas. Autor de los ensayos 7R y El dilema humano, Cwaik dice en diálogo con Infobae que “ambos libros son el resultado de observar la relación entre la humanidad y la tecnología”. Mientras el primero se enfoca en las tecnologías disruptivas del momento, el otro aborda cómo estas revoluciones impactan en nuestra identidad y sociedad. “Son dos caras de la misma moneda”, dice Cwaik, “la innovación y su efecto en nosotros”.
Ahora, mientras prepara un próximo libro —para el que lleva una investigación de más de tres años— sobre las habilidades esenciales que los humanos debemos cultivar para adaptarnos en el mundo tecnológico, Joan Cwaik será el profesor host del programa on demand “Tecnologías emergentes: descubriendo el poder de su sinergia”, que está coorganizado por Ticmas y la Universidad de San Andrés.
Destinado a todos los que buscan mantenerse actualizados sobre los últimos desarrollos tecnológicos y aplicarlos en su carrera profesional, el programa contará con estos profesores invitados: Roberto Bunge (ingeniero y pionero en inteligencia artificial), Tomás Chernoff (líder innovador y fundador de Che3d), Daiana Gómez Banegas (consultora, oradora y educadora, especialista en crypto), Martín Piñeiro (ingeniero en Electrónica y especialista en IoT), Augusto Salvatto (consultor en economía del conocimiento y emprendedor), Julieta Schulkin (periodista y autora sobre tecnología e innovación), Walter Sosa Escudero (economista y académico) y Fredi Vivas (ingeniero, autor y educador, especializado en Big Data Analytics).
Junto a ellos, se podrán recorrer temas como Inteligencia artificial, Big Data, Internet de las cosas, Blockchain, Criptomonedas, NFTs, robótica, impresión 3D, realidad virtual y metaverso: cuáles son los impactos y las potencialidades, los puntos de intersección, y las aplicaciones prácticas en el mundo actual.
—Hoy se habla mucho de la convergencia tecnológica. ¿Qué implica esto y cómo ves su desarrollo en el contexto actual?
—La convergencia tecnológica es cuando distintas tecnologías se entrelazan y potencian mutuamente. Por ejemplo: cómo la Inteligencia Artificial se beneficia del Big Data para ser más eficiente. En el contexto actual, con tantas innovaciones surgiendo, esta convergencia se vuelve aún más crucial y acelera los cambios a un ritmo vertiginoso.
—Frente al dinamismo y la incertidumbre, que son características dominantes de nuestra época, ¿qué papel juega el aprendizaje continuo en este contexto?
—El aprendizaje continuo tiene que ser nuestra brújula en este océano de cambios. Vivimos en un momento donde, como menciona Harari, lo que sabíamos ayer puede no ser válido mañana. Adoptar una mentalidad de aprendizaje constante nos permite navegar con mayor certeza y prepararnos para lo impredecible. Es más, no se trata solo de aprender técnicamente, sino de hacerlo de forma holística, entendiendo contextos y conexiones.
—Hablás de un enfoque holístico, pero ¿a qué te refieres exactamente y cómo se relaciona con la convergencia tecnológica?
—Es un enfoque que va más allá de entender una tecnología o herramienta específica. Es ver cómo todas estas tecnologías se interrelacionan, cómo impactan en nuestra sociedad, cultura, psicología y relaciones humanas. En esta era de convergencia tecnológica, no basta con ser experto en una sola área; necesitamos una visión integradora que conecte los puntos y revele un panorama más amplio.
—Con tantos niveles de cambio y una sensación constante de incertidumbre, ¿cómo recomendarías que las personas busquen esa formación integral y holística?
—Lo mejor es sumergirse en diversas fuentes de conocimiento. Leer a autores contemporáneos, pero también clásicos. Participar en debates, foros y charlas. Buscar espacios educativos que no solo enseñen herramientas, sino contextos. Por ejemplo, el programa on demand de UdeSA y Ticmas, que, siendo 100% asincrónico, propone una inmersión en las tecnologías emergentes desde una perspectiva amplia.
—En un mundo tan complejo, ¿cuál es la clave para mantenerse resiliente y adaptativo?
—La clave, en mi opinión, es combinar la humildad de reconocer lo que no sabemos con la curiosidad insaciable de querer aprender más. Es entender que, en este viaje, todos somos estudiantes y que, como diría Sócrates, solo sé que no sé nada. Es esa combinación de humildad y pasión por aprender lo que nos permitirá navegar con éxito en este mar de incertidumbres.