Gerónimo Bukosky tiene 19 años, estudia Relaciones Internacionales y ya debutó en las ligas mayores de su carrera: acaba de disertar en la ONU. Más precisamente, en el Foro de la Juventud de la UNCTAD (Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo), que comenzó ayer en Abu Dhabi. Para participar allí, lo eligieron entre 250 postulantes de 195 países: fue el único representante de América Latina en el evento.
Nacido y criado en Hilario Ascasubi, un pueblo bonaerense de menos de 5 mil habitantes ubicado 100 kilómetros al sur de Bahía Blanca, Gerónimo disertó acerca de soluciones innovadoras para las problemáticas cotidianas que enfrentan los jóvenes con discapacidad. El tema lo moviliza desde chico, y lo llevó a colaborar como voluntario con Fundación Comparlante, una ONG que promueve los derechos y el desarrollo en condiciones de equidad para las personas con discapacidad en la región.
Él quiso llevar al Foro tres temas centrales: el acceso de las personas con discapacidad a la educación, las oportunidades y desafíos de los jóvenes a la hora de obtener un primer empleo, y la necesidad de un salario digno e igualitario entre personas con y sin discapacidad. Su exposición formó parte de una sesión titulada “El poder del factor humano en un mundo digital”.
“Fue una experiencia increíble y un orgullo poder representar a la Argentina. Desde chico me vengo preparando con modelos de Naciones Unidas, pero nunca pensé que iba a llegar el día de hablar ante la ONU”, le contó Gerónimo a Infobae.
“En América Latina, solo el 20% de los niños con discapacidad está escolarizado. No acceder a la escuela luego dificulta en la vida adulta el acceso a un trabajo digno”, señaló Gerónimo en su exposición. Sobre la situación laboral en el país, afirmó: “El 91% de las personas con discapacidad en Argentina se encuentra desempleada. Acá debemos poner el foco a la hora de potenciar el factor humano. Si dejamos personas afuera, estamos atentando contra la Agenda 2030 que promueve la ONU”.
Con el lema “Por la prosperidad planetaria”, el Foro de la Juventud de la UNCTAD reúne a 400 estudiantes o profesionales de entre 18 y 30 años de todo el mundo, y se desarrolla en paralelo al Foro Mundial de Inversiones de la ONU.
Hasta el 20 de octubre, los jóvenes discutirán sobre innovaciones tecnológicas, la transformación de las industrias, la educación para el futuro y la creciente importancia de las habilidades interpersonales, sobre todo la colaboración “para abordar cuestiones complejas a escala y crear una economía global más resiliente”, según explicaron los organizadores. Durante toda la semana, los jóvenes líderes participarán en sesiones plenarias al estilo TED, talleres creativos de resolución de problemas, proyectos y trabajo en red, entre otras actividades.
Según los debates de las primeras jornadas, en el nuevo panorama laboral las habilidades interpersonales resultan el vínculo clave entre las capacidades humanas y la tecnología. Mientras que la automatización y la Inteligencia Artificial están transformando los sectores al resolver tareas rutinarias y habilidades duras, el factor humano no puede ser sustituido por máquinas, coincidieron los participantes.
Como resultado final de los cinco días de debate, se espera que surja una “Declaración de la Juventud” que se elevará al Foro Mundial de Inversiones, en el que participan presidentes y jefes de Estado, y que podrá incorporarse también a la COP28, la 28° Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático que se celebrará a partir del 30 de noviembre en Dubái.
Gerónimo, único representante latinoamericano en el Foro, llegó a esta instancia a través de Fundación Comparlante, una organización sin fines de lucro con estatus consultivo en Naciones Unidas.
“Desde la Fundación apostamos al potencial de las tecnologías. Sabemos que, si se implementan de manera correcta, pueden ayudarnos a combatir las brechas con las que convivimos los jóvenes, creando entornos que potencien las capacidades de todo ser humano”, dijo el joven argentino, estudiante de la UADE, e invitó “a todos los que puedan a sumarse y colaborar”.
“Como jóvenes tenemos que involucrarnos. Hay cosas que nosotros estamos pudiendo hacer que otras personas no y es el momento de preguntarnos en qué mundo vivimos. Si realmente nos molesta el mundo desigual en el que estamos, pongámonos las pilas porque las cosas se cambian desde adentro”, le dijo a la agencia Télam.
Para poder llegar a Abu Dhabi, Gerónimo debió conseguir distintos apoyos. A través de una gestión realizada por la Embajada Argentina en los Emiratos Árabes Unidos, la compañía aérea Emirates le facilitó su pasaje de avión. A su vez, desde Fundación Comparlante impulsaron una colecta solidaria para solventar su estadía, y lograron el respaldo de empresas como Palo Verde y Corelite Composites.