“31/07 PARO DOCENTE. ASI NO INICIAMOS”, advierte el comunicado publicado ayer por Ademys, el sindicato que nuclea a docentes de la Ciudad de Buenos Aires y que llevará adelante un nuevo paro docente el próximo 31 de julio, el día que los alumnos deben retornar a la escuela después de dos semanas de receso por vacaciones de invierno.
En diálogo con Infobae, el secretario de Prensa de Ademys, Federico Puy, explicó que la decisión se debe a que “los reclamos siguen siendo los mismos desde principios de año”. Y en ese sentido, puntualizó: “Nuestro salario no alcanza para ganarle a la inflación, y una compañera que sea sostén de hogar se tiene que ver obligada hasta dos o tres turnos para llegar a fin de mes. Eso precariza muchísimo nuestra jornada laboral y además empeora muchísimo el proceso de enseñanza en las aulas”.
Te puede interesar: El gobierno porteño lanzó becas de hasta más de 500 mil pesos para egresados de programación
Ante este escenario, la ministra de Educación porteña, Soledad Acuña señaló “el total descaro” de Ademys para convocar a un paro docente justo el día que los chicos deberían volver a las escuelas.
“La lucha se toma vacaciones. El sindicato kirchnerista convoca a un paro para el primer día hábil después de 15 días de receso de invierno. Parece que el secretario general del gremio que se postula a jefe de gobierno de la Ciudad necesita descansar. El descaro es total. Hacen política a costa de la educación de los chicos y las chicas”, lamentó Acuña.
En cuanto a los reclamos que impulsan Ademys, cuyo secretario general es Jorge Adaro -precandidato a jefe de Gobierno porteño por el Frente de Izquierda, en la boleta de Myriam Bregman-, exigen que haya un aumento salarial del 100% por cargo.
Además, la medida de fuerza se llevaría adelante para pedir por la construcción de más escuelas en CABA, con el objetivo de que “no haya más de 30 mil chicos que no tengan su vacante en el nivel inicial”.
“No hay refacción de las aulas y las escuelas, no hay un plan para enviar decenas de libros de literatura para los primeros grados para profundizar el proceso de alfabetización, no se construyen bibliotecas, y no se envía el máximo nivel de tecnología a las escuelas para poder trabajar acorde a los mayores desarrollos de la tecnología digital para poder profundizar la educación con los chicos”, sumó Puy a la lista de pedidos.
Durante el contacto con este medio, el representante de Ademys expresó su descontento con el bono que anunció el Gobierno porteño para aquellos docentes que que cuenten con asistencia perfecta. “Otorgan un bono de 30 mil pesos por cargo a las docentes que nunca se enfermaron, que no tuvieron que cuidar a un hijo o un familiar enfermo, que no se pidieron un día por estudio. Este bono supuestamente es contra las huelgas, pero ningún docente lo podría cobrar ya que todos alguna vez tuvieron que atender necesidades básicas de sus familias. Se ataca el derecho a huelga, se intenta dividir a la docencia, y nosotros continuamos con el plan de lucha”, sostuvieron.
Te puede interesar: La infraestructura escolar impacta en los aprendizajes: claves para repensarla
Frente a las reiteradas manifestaciones de los docentes en la ciudad de Buenos Aires, el Gobierno porteño anunció a principios de mes que otorgará un reconocimiento salarial para unos 35 mil docentes de escuelas de gestión estatal que no faltaron a su trabajo durante los primeros seis meses del año.
De esta manera, un maestro de grado de jornada completa que haya trabajado del 1° de febrero al 30 de junio sin una sola falta cobrará una asignación extraordinaria de 60 mil pesos. Este monto será proporcional al cargo ejercido y a la carga horaria correspondiente y se pagará con la liquidación del sueldo de julio, informaron desde el Ministerio de Educación de CABA en un comunicado.
Seguir leyendo: