La educación privada atraviesa una crisis generalizada en todo el país: alta morosidad en el pago de las cuotas, dificultades para afrontar los salarios de los docentes y los primeros cierres de establecimientos. En ese contexto, la provincia de Buenos Aires, que reúne al 45% de la matrícula privada nacional, atraviesa la situación más crítica.
Senadores de Juntos por el Cambio impulsan un proyecto de ley que bautizaron como “salvataje de las escuelas privadas”. La iniciativa plantea que la provincia de Buenos Aires otorgue un subsidio extraordinario a todos los establecimientos educativos del sector y que se les condone la deuda por no haber pagado a tiempo los aportes previsionales del personal.
El proyecto ya se discutió en la comisión de Educación. El martes logrará el dictamen y tendrá un tratamiento exprés: el mismo jueves se aprobará en el Senado bonaerense ya que la oposición cuenta con mayoría. Donde habrá dificultades es en Diputados. Allí el Frente de Todos dispone de más legisladores.
“El proyecto comprende a todos los niveles educativos, incluso a los jardines maternales que son los que más están sufriendo la crisis. Lo que vemos es que los cierres en la provincia ya alcanzan a jardines de infantes y los directivos dicen que a la vuelta del receso invernal el horizonte es crítico tanto en primarias como secundaria. Sobre todo en el Conurbano donde nadie sabe cuándo volverían las clases. Se trata de una medida anticipatoria que evite el tendal”, dijo a Infobae Juan Pablo Allan, presidente de la comisión de Educación del Senado bonaerense.
De aprobarse, el monto del subsidio extraordinario destinado a cada institución irá de la mano con su nómina salarial y se le descontará el aporte estatal que ya reciben de la provincia y el importe del ATP en caso de haber accedido a la subvención nacional. En todos los casos, el subsidio extraordinario será para el pago de salarios de docentes y no docentes.
La provincia de Buenos Aires tiene 6 mil escuelas privadas: un tercio de ellas no recibe subsidios estatales. La morosidad en las cuotas oscila entre el 70 y el 72 por ciento en las escuelas. En los jardines maternales es aún mayor, entre el 90 y el 100 por ciento. Por eso, ya trece establecimientos decretaron el cierre definitivo.
“El 90% de los jardines son privados en la provincia. Esta situación no le conviene a nadie, mucho menos al Estado. Hay un faltante muy grande de jardines estatales. Ni bien abren inscripción, los pocos que hay se llenan. El jardín maternal es muy caro de sostener porque tiene muchos docentes por alumno y, en su mayoría, alquilan sus espacios. Están haciendo un esfuerzo enorme y la perspectiva es complejísima”, advirtió Martín Zurita, secretario ejecutivo de AIEPBA, la principal cámara de la provincia.
Respecto al proyecto, señaló: “Consideramos que no solamente el Estado nacional debe ayudarnos, sino que debe haber un compromiso de todos: la provincia, los municipios, los sindicatos, las familias. Estamos con un atraso fuerte en el cobro de ATP: la mitad de las escuelas no cobró abril, más de la mitad no cobró mayo y todavía ninguno cobró junio. El gran quiebre va a estar después de las vacaciones de invierno. Ahí lamentablemente vamos a tener muchas sorpresas”.
Además del subsidio extraordinario, el proyecto de ley contempla la condonación de los intereses por las deudas generadas por la postergación del pago de los aportes jubilatorios. Según las estimaciones de los senadores opositores, el 40% de los establecimientos aplazó las contribuciones previsionales. La remisión sería desde mayo hasta diciembre.
Más allá de los empleos en juego, en el horizonte surge otra preocupación: las vacantes. “Si estos chicos se caen del sistema privado, no hay capacidad en el sector público para absorber la migración”, remarcó Allan.
Hace quince días, el gobierno de Axel Kicillof anunció una ayuda de 340 millones de pesos para los 4 mil colegios privados que reciben subsidio estatal. Se trató de un préstamo que las instituciones deben retribuir a partir de septiembre, en un plazo de tres meses.
Considerando que aún no hay una fecha de regreso a las aulas bonaerenses, la oposición califica ese aporte de “insuficiente” y proyecta un cierre masivo de establecimientos, sobre todo aquellos de cuota baja que reciben a los alumnos más vulnerables. En el oficialismo comprenden las necesidades, pero argumentan que no cuentan con los fondos y por ahora rechazan el proyecto.
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