Desde el lunes 3 de agosto se espera que comience el regreso a las aulas en los niveles obligatorios: en jardín, primaria y secundaria. La vuelta escalonada empezará en las regiones de escasa o nula circulación del virus. Las universidades, sin embargo, deberán aguardar más. Incluso en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) la idea de seguir con cursada virtual todo el año cobra cada vez más fuerza por su nivel de contagios.
Hoy por la mañana, el ministro de Educación Nicolás Trotta se refirió al tema: “De todos los niveles educativos, proyectamos que las universidades serán las últimas en regresar a las aulas, porque son las que mejor preparadas están para la enseñanza a distancia y la virtualización educativa”, sostuvo.
La Universidad Nacional de Tres de Febrero (UNTREF) se adelantó al resto del sistema y resolvió completar el calendario académico 2020 a través de clases virtuales. Es la primera institución que anuncia que no reabrirá sus puertas en lo que resta del año.
“La implementación del sistema de educación virtual, que garantizó con éxito la cursada durante el primer cuatrimestre, hace posible extender la modalidad a distancia hasta fin de año”, explicó Carlos Mundt, su secretario académico. “En caso de habilitarse algún grado de presencialidad se dictarán solamente materias que realicen actividades prácticas, ya sean del segundo cuatrimestre o adeudadas de la primera parte del año”, agregó.
Según datos de la universidad, durante el primer cuatrimestre se abrieron 1.173 aulas virtuales, que permitieron seguir con la cursada a sus 12.103 alumnos de grado y posgrado. La UNTREF decidió eliminar las materias correlativas y habilitó tres mecanismos de evaluación: monografías, examen oral virtual y examen presencial en caso de que se habilite la posibilidad.
Si bien esperan una definición del Gobierno, según un relevamiento de Infobae, no es la única institución que analiza mantener la cursada remota todo 2020. La Universidad Nacional de La Plata (UNLP), que tiene 115 mil alumnos, confirmó que es una opción que se evalúa. “Esto es día a día, pero sabemos que es una posibilidad, especialmente porque tenemos cátedras muy masivas en nuestras facultades”, explicaron.
De acuerdo a sus voceros, la universidad está preparada para afrontar el próximo cuatrimestre también a distancia. El 96% de las cátedras tienen su propia aula virtual. El 4% restante, por su carga práctica, se hace imposible darlas sin presencialidad. En caso de que las facultades sigan cerradas todo el segundo cuatrimestre, adelantaron, cada unidad académica readaptará los contenidos.
Si se trata de masividad, La Universidad de Buenos Aires es una de las que presenta mayores dificultades. En sus trece facultades, cursan más de 300 mil estudiantes. En la UBA, por ahora, son cautos y prefieren aguardar una directiva oficial para definir la modalidad de cursada en la segunda mitad del año. Por el momento, seguirán trabajando en forma virtual y esperan a que por lo menos se permita la posibilidad de rendir finales en las aulas.
Algunas universidades grandes de la provincia de Buenos Aires, como la de La Matanza y Lomas de Zamora, no le cierran la puerta a la presencialidad todavía, pero sí advierten que las conversaciones con las autoridades vislumbran que ese escenario es complejo. La Universidad de Almirante Brown, en tanto, seguiría el segundo cuatrimestre con clases virtuales.
En las privadas, instituciones como la UCA, la UADE o la UP, también comenzarán en forma virtual la segunda mitad de sus calendarios académicos y no descartan extender la modalidad de acuerdo a los lineamientos oficiales.
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