Según diferentes mediciones privadas, el precio de los alimentos está desacelerando. Eso no significa que los valores estén bajando en góndola, sino que están aumentando a una menor velocidad de lo que lo venían haciendo. Como consecuencia, las consultoras esperan que el IPC general siga la misma tendencia y, posiblemente, sea de un dígito en abril.
Desde Eco Go, por ejemplo, indicaron que en la segunda semana del mes, los alimentos registraron un incremento del 0,2%, marcando un fuerte descenso respecto a los registros de las semanas previas. Con este dato y considerando aumentos proyectados para las semanas restantes del 1,3%, la inflación en alimentos consumidos dentro del hogar ascendería a 5,4% en el mes de abril. El mismo porcentaje se mantiene si además se incorporan los aumentos registrados en alimentos consumidos fuera del hogar.
“La inflación de abril se ubicaría así en 8,9% mensual. La baja en la proyección respecto a la semana previa responde a un dato de inflación en alimentos considerablemente menor al esperado, junto con escasas subas en el resto de los rubros, lo que lleva a modificar a la baja nuestras proyecciones para las próximas semanas”, indicaron desde la consultora.
También LCG midió una desaceleración en el precio de los alimentos. De acuerdo con la consultora, en las últimas cuatro semanas el índice de alimentos y bebidas avanzó un 4,6%, un valor que está claramente por debajo del 6,2% medido en la semana anterior.
De hecho, como lo demuestran los datos históricos, el 4,6% que avanzaron los alimentos en las últimas cuatro semanas es el valor más bajo registrado desde julio del 2023.
Cuánto subió cada rubro
Si bien el promedio general medido por LCG para las últimas cuatro semanas dio una suba de alimentos y bebidas del 4,6%, hay tres rubros que superaron ampliamente la media.
Según la medición, los productos lácteos y huevos conforman el rubro de mayor incremento en el período analizado, con una variación del 11,2%. Le siguieron en orden descendente las verduras (9,5%) y las comidas para llevar (6,5%).
El resto de los rubros se ubicó por debajo del promedio. Los productos de panificación, cereales y pastas tuvieron una suba del 4,2%. Le siguieron las carnes (3,5%), los condimentos (3,3%), las bebidas e infusiones (1,8%) y los aceites (1,8%).
Finalmente hubo dos rubros que mostraron bajas de precios en ese período. Uno fue el de “azúcar, miel, dulces y cacao”, que bajó un 2,2% durante las últimas cuatro semanas. El otro, fue el rubro de frutas, que mostró una reducción del 6,5%.
Desaceleración
Por su parte, el relevamiento de precios que realiza la Fundación Libertad y Progreso (LyP) registró un aumento del IPC de 9,5% mensual en la primera mitad de abril.
“En la segunda semana de abril la variación fue del 0,4% semanal, el registro más bajo en 6 meses. Hay que remontarse hasta octubre de 2023 para encontrar una suba similar. De esta manera, proyectamos que la suba del IPC LyP en abril se situaría en el 9%, siendo la primera variación de un dígito desde octubre del 2023″, proyectaron.
Lautaro Moschet, economista de LyP, advirtió: “La desaceleración del precio de los alimentos es una noticia alentadora, ya que representa una gran proporción de los gastos familiares y es casi una cuarta parte del IPC. En la primera mitad de abril, subieron 2,5% en promedio, mientras que a la misma altura de marzo lo habían hecho un 6,3%”.
Por supuesto, habrá que esperar a conocer los datos oficiales del Indec para saber si realmente hubo desaceleración del rubro de alimentos en abril. Por lo pronto, las estadísticas de los meses anteriores muestran una tendencia de desaceleración, pero todavía con un IPC general de dos dígitos (11% en mayo).