Los alimentos son siempre protagonistas indiscutidos de la inflación, pero no todos avanzan al mismo ritmo. Esto quedó demostrado con la evolución de los precios que se dio desde la devaluación implementada por el Gobierno de Milei hasta hoy. Mientras algunos avanzaron a menor ritmo que la inflación general, otros duplicaron su valor en tan sólo 90 días.
Tomando como punto de partida el precio del 30 de noviembre, se puede identificar a quince productos alimenticios que subieron más de 100% hasta la fecha. El que más aumentó fue el polvo para flan, que pasó de costar $161,50 antes de la devaluación a $629.86 en febrero. En ese caso la diferencia fue de $468 por lo que el valor en góndola se triplicó y casi se cuadruplicó en el período analizado, de acuerdo al relevamiento realizado por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) en el Gran Buenos Aires.
En segundo lugar aparece el kilo de lechuga, que por cuestiones estacionales y coyunturales saltó de $790,93 a $2.302,4 (191% de suba). También estuvo cerca de triplicar su precio el kilo de naranja, que hasta antes de la devaluación tenía un precio de $505,71 y actualmente se vende a $1.397 (176% de diferencia).
El cuarto aumento más pronunciado registrado desde la devaluación es el del café molido, cuyo valor en góndola pasó de $2.231,42 a $5.976,08 (168% de suba), con una diferencia total de $3.744,66 en la presentación de 500 gramos.
Fue similar el comportamiento de la sal fina, que sufrió un aumento del 164%. En detalle, se vendía a $302,04 (paquete de 500 gramos) antes de la devaluación y hoy se vende a $796,52, lo que significa que duplicó su valor e incluso se acercó a triplicarlo.
Apenas menor fue el aumento que tuvo el tomate entero en conserva. La lata de 230 gramos se vendía a $379,69 hace poco más de tres meses y ahora figura en góndola a $965,5, con lo que registra una variación del 154%, según los datos relevados por el Indec en GBA.
No se queda atrás el pan de mesa. De acuerdo al relevamiento, los 390 gramos se vendían a principios de diciembre a $804,52, pero después de la devaluación el precio se disparó y en cuestión de semanas llegó a los $2.021,64. La diferencia de $1.217 marca un incremento de punta a punta de 151%.
Fue algo menor el aumento registrado por el arroz blanco simple, que en la presentación de un kilo registró una suba del 131% en el transcurso de los 90 días. Se podía conseguir a $1.020,69 a comienzos de diciembre y pasó a $2.355,31 a finales de febrero, con lo que marcó una variación del 131%.
Por su parte, la harina de trigo común 000, costaba $323,26 promedio por kilo antes de la suba del dólar y ahora se comercializa a $741,12, un 129% más.
Otro producto que duplicó su valor desde que la Nación decidió devaluar es el paquete de 250 gramos de galletitas de agua envasadas. Valían $395,96 a comienzos de diciembre y se consiguen a $877,97 en la actualidad.
También la leche entera en sachet subió más de 100%. En detalle, costaba $457,1 por litro y ahora se comercializa a $842,24 (123% más). Apenas menor (120%) fue la suba de las salchichas tipo viena; el paquete de seis unidades aumentó de $459,53 a $1.208,09 en el período analizado.
Quienes van usualmente al supermercado posiblemente hayan notado también el ajuste de precios que sufrió la cebolla, que saltó de $349.77 a $764,95 por kilo (119%).
No se quedó atrás el aceite de girasol de 1,5 litros, que costaba $1.273,09 antes de la devaluación y ahora se vende a un valor promedio de $2.763,02 (117% de incremento).
Finalmente, el agua sin gas de 1,5 litros, pasó de costar $329,12 a 698,19 en el transcurso de tres meses, con lo que registró una suba del 112%.
De igual manera se podrían mencionar muchos otros alimentos, que si bien no llegaron al 100% de suba estuvieron muy cerca. Entre el 95% y el 99% de aumento aparecen por ejemplo el queso cremoso, la leche en polvo entera y las hamburguesas congeladas, entre otros.