Con devaluación de por medio, los precios de los alimentos se dispararon en los primeros días de Javier Milei como presidente de la Nación. Según el IPC del Indec, los productos de ese rubro se encarecieron 29,7% en diciembre y algunos artículos llegaron a superar el 50% de suba.
En detalle, lo que más subió en el último mes del 2023 fue el limón, que pasó de costar $459,36 por kilo en noviembre a $775,97 en diciembre (69% de incremento) en el Gran Buenos Aires. En segundo lugar aparece el aceite de girasol, cuyo precio avanzó 57% en las góndolas (pasó de $1.273 a $1993 la botella de 1,5 litros); completa el podio el arroz blanco simple, que sufrió un incremento del 53% en el paquete de un kilogramo ($1.020 a 1.557).
Más atrás, pero también con subas por encima del 50%, figuran la harina de trigo común 000 -aumentó 52% y llegó a $492- y el tomate entero en conserva, que tuvo un incremento de 51% (la lata de 230 gramos pasó de $379,69 a $ 573,51).
En sexto y séptimo lugar aparecen dos cortes de carne. El kilo de asado, saltó de $3.617 en noviembre a $5.195,96 en diciembre (44% de aumento), mientras que el cuadril saltó de $4.224,45 a $6.034,42 (43%). Apenas un punto por debajo, con 42% de incremento, figura también el jamón cocido; el kilo de ese producto se conseguía a $5.617,03 en noviembre y ahora se vende a $7.948,24 en promedio, según el relevamiento de precios realizado por el Indec en GBA.
El top ten de aumentos se completa con las galletitas de agua envasadas, que en su presentación de 250 gramos subieron 41% (pasaron de $385,96 a $544,92) y el polvo para flan de 8 porciones, que también tuve un ajuste en las góndolas del 41% ($161,50 a $227,27).
Es importante recordar que en las últimas semanas se registraron fuertes aumentos en los precios de los combustibles, por lo que es esperable que los precios de los alimentos continúen avanzando a ritmo acelerado en las próximas semanas.
Fuertes subas anuales
Durante todo 2023 sólo tres productos alimenticios -entre los medidos por el Indec- no duplicaron su valor. El resto subió al menos 100% y algunos llegaron a multiplicar su precio por siete e incluso por ocho.
En el transcurso de los doce meses, el producto que más subió fue el arroz blanco simple. En diciembre de 2022 el paquete de un kilo se conseguía a $183,52 en el Gran Buenos Aires y hoy se exhibe en las góndolas a $1.557,53, lo que marca una suba total de 749% de punta a punta.
Bastante más abajo, pero con un incremento igualmente significativo, se encuentra el azúcar, que hace un año se vendía a $251,86 y ahora se vende a $1.308,43 (450% más). El tercer producto de mayor suba fue el paquete de 500 gramos de fideos tipo guiseros, que saltó de $191,91 a $991,66 (417% de incremento).
También aumentaron con fuerza la naranja (407%), las arvejas secas remojadas (350%), la carne picada común (350%), el kilo de cuadril (343%), la gaseosa base cola (340%), la paleta (331%) y el kilo de nalga (329%).
En el otro extremo aparecen por supuesto los únicos tres productos que no duplicaron su valor en el último año. Los tres pertenecen al rubro de “frutas y verduras”, que tiene la particularidad de tener un comportamiento de precios particularmente volátil por cuestiones de estacionalidad. En detalle, el producto alimenticio de menor suba en los últimos doce meses fue la lechuga, que tuvo un incremento de sólo 23%, seguida por el zapallo anco (46%) y la cebolla (54%).