El precio del vino superó por varias cabezas al índice de precios al consumidor (IPC) tanto en junio como en los últimos ocho meses. El mayor incremento se produjo entre las botellas de la gama baja de precios y, entre las provincias, aumentaron más las de San Juan que el resto.
Así lo revela el Informe “Vinodata” de precios del mercado del vino argentino, que elabora desde octubre pasado el Instituto Interdisciplinario de Economía Política de la Facultad de Ciencias Económicas de la UBA.
Según este relevamiento que dirigen los investigadores Andrés López y Nicolás Grosman, “la variación mensual del Índice de Precio del Vino (IPV) en junio de 2023 alcanzó al 11,2% en la comparación con el pasado mes de mayo del mismo año”, frente al 6% de aumento registrado por el IPC del Indec.
“Esta variación es, por tercer mes consecutivo, superior a la registrada por el IPC de junio y representa una leve aceleración respecto del aumento del IPV en el mes de mayo (10,4%)”, indicaron en el reporte.
López precisó en diálogo con Infobae que desde el mes pasado se observa un incremento mayor en los vinos más baratos, en sintonía con las cifras del IPC para el conurbano bonaerense, lo que claramente afecta a los sectores de menores recursos.
Los expertos aclararon que “la variabilidad que se observa en el IPV guarda estrecha relación con la cantidad de etiquetas cuyos precios suben cada mes y con la magnitud de dichos aumentos”.
De este modo, “en marzo (cuando el IPV registró una suba de 1,8%) el 28% de las botellas de la muestra tuvieron aumentos de precios (promedio 10,8% para las botellas con aumentos). En tanto, en abril (con una suba del IPV de 21,1%) hubo remarcaciones en el 82% de las etiquetas, con aumentos de precios promedio de 23,4%”. En cambio, “en junio cerca del 56% de las botellas relevadas registraron aumentos, que en promedio llegaron al 14,9%”
“Si se proyecta el incremento de precios acumulado entre octubre y junio (8,7% promedio mensual) el IPV registraría un aumento anualizado del 173% para el período octubre de 2022/septiembre de 2023″, afirmaron.
Qué vinos aumentaron más
El mes pasado, igual que en mayo, “los mayores aumentos se dieron en las botellas de las gamas de precios más bajas”.
De este modo, “aquellas etiquetas con precios menores a $1.041 registraron un aumento promedio de 14%, seguidas de las que están en la gama de $1.041 a $1.784 (12,4%), mientras que en todos los restantes casos los incrementos fueron menores al 10%”.
“Si se proyectan los incrementos por gama de precios (extrapolando las cifras acumuladas de octubre de 2022 a junio de 2023) se observa que los vinos ubicados en las más bajas (las dos recién mencionadas más la que va de $1.784 a $2.676) registrarían aumentos anualizados en torno al 175%”, precisaron.
En tanto, “para las etiquetas ubicadas en la franja de precios más cara (superior a los $7.433) el aumento sería algo menor al 160%”.
Respecto del valor de las diferentes variedades de uvas, “las tintas, blancas y rosadas registraron aumentos mayores al 10%, mientras que los dulces y espumantes subieron en torno al 3 y 1% respectivamente”.
En el aumento estimado entre octubre 2022/septiembre 2023 “los vinos blancos registrarían un incremento del 191%, mientras que los dulces y espumantes solo subirían 91 y 120% respectivamente”.
En cuanto a la evolución del IPV por provincia, se registró una amplia dispersión, “desde aumentos promedio de 17% para los vinos neuquinos y de 21% para los de San Juan” en junio.
En términos anualizados, la proyección refleja que las botellas de San Juan y Neuquén aumentaron en torno a 210 y 190%, respectivamente, mientras que las de Salta escalaron 132%”. Para este informe se relevaron 4.577 etiquetas que cubren todas las gamas de precios del mercado.
Seguir leyendo: