Las ventas de los supermercados argentinos se mantuvieron prácticamente estables en mayo (+0,2%) con relación al mismo mes del año pasado, pero registraron una caída real del 2,5% en la comparación mensual desestacionalizada con abril, tras alcanzar una facturación total de $388.908.856 millones. Es decir que vendieron un poco más que en 2022, pero no lograron mantener el ritmo de ventas del cuarto mes de este año.
En lo que respecta al acumulado de los primeros cinco meses del año, el último informe publicado por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) muestra un repunte del 1,9% en relación al mismo período del 2022..
Un dato interesante, es que el ticket promedio fue de $5.239, lo que representa un aumento nominal del 87%, en un período en el que la inflación anual acumulada fue del 114,2%, Por lo tanto, la mejora en los resultados interanuales no se debe a que las personas gastaron más en cada una de sus compras, sino a que fueron más veces al supermercado.
Por otro lado, el estudio del Indec muestra que participación tuvo cada medio de pago en las ventas de los súpers de Argentina. El relevamiento estadístico señala que el repunte nominal más significativo se registró en las transacciones realizadas con tarjeta de débito (crecieron 135,6%). En tanto, las compras realizadas con efectivo mantuvieron una participación alta, pero tuvieron una variación interanual nominal inferior a la inflación (95,6%).
Qué productos crecieron
Otro punto interesante de observar al momento de analizar los niveles de consumo de la población, es en qué gastaron el dinero los argentinos. En términos absolutos, la mayor parte del gasto se concentró en los productos de almacén ($109.942.489 millones), que fueron seguidos de lejos por los artículos de limpieza ($51.798.386 millones) y las carnes ($ 45.297.158 millones).
Ahora bien, si se considera la evolución interanual de cada grupo de artículos, se encuentra que el mejor resultado en términos porcentuales lo tuvo el rubro de “verdulería y frutería”, que tuvo una mejora nominal interanual del 174% en mayo de este año.
Le siguieron en orden descendente los rubros de bebidas (139,9%), “alimentos preparados” (139,3%), panadería (120,9%) y artículos de limpieza (119%).
En otro extremo, crecieron menos de tres dígitos las ventas de carnes (98,3%), electrónicos (95,6%) e indumentaria (62,2%).
Las ventas mayoristas
Los negocios mayoristas tuvieron una situación similar a la de los supermercados en el quinto mes del año, pero con diferencias más marcadas. En la comparación interanual, lograron un crecimiento real del 2% en el mes de mayo, pero en la variación mensual desestacionalizada sufrieron una baja del 4,9%.
Con esos resultados, mantuvieron un crecimiento acumulado del 2,7% en los primeros cinco meses del 2023.
En ese caso, el ticket promedio fue mucho más alto que en los súpers ($11.442), pero la variación interanual nominal fue de 49%, es decir que estuvo 65,2 puntos porcentuales por debajo de la inflación.
Respecto a los medios de pago, el informe del Indec señala que la mayor parte de las transacciones se cancelaron con efectivo, pero a su vez, fueron el medio de pago que menos creció en términos nominales (88,4%), frente a una evolución del 131,4% de las tarjetas de débito, 132,3% de “otros medios” y 167,1% de las tarjetas de crédito.
En la división de ventas por grupo de productos, se destacó un crecimiento del 453,2% en el rubro de “indumentaria, calzado y textiles para el hogar”, pero los sectores que mayor facturación generaron fueron los de almacén ($ 30.839.661 millones) y los artículos de limpieza ($ 18.906.997 millones).
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