La inflación le volverá a dar una mala noticia al Gobierno y a la sociedad este mes, con un índice que superará nuevamente el 3 por ciento luego de la pausa de noviembre.
Aunque la Secretaría de Comercio Interior se esfuerce por aumentar la cantidad de productos congelados -y así influir también sobre el índice de precios al consumidor- la inflación núcleo se mantiene a una velocidad crucero alta y no se prevé un descenso de corto plazo.
En este sentido, los analistas privados creen que el índice de precios al consumidor superará el 3% luego del 2,5% registrado en noviembre y hasta podría rondar el 4 por ciento.
De este modo, la inflación de 2021 terminará en el 51%, pese a que el Gobierno mantuvo casi todo el año pisado el valor del dólar y de las tarifas de los servicios públicos.
A la incesante emisión monetaria del Banco Central para asistir al Tesoro por el alto déficit fiscal, se suman este mes una serie de aumentos puntuales que incidirán sobre el IPC que dará a conocer el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) a mediados de enero.
Un informe de la consultora Abeceb señaló que “a pesar de la desaceleración de noviembre, la inflación aún persiste en niveles elevados y el panorama hacia adelante es poco alentador en el marco de un secretario de Comercio Interior que considera un éxito una tasa mensual de inflación del 3% o un ministro de Economía que mantiene en su Presupuesto una proyección para 2021 que ya ha sido superada cuando aún falta un mes para que termine el año”.
“Con vistas a fin de año estimamos una aceleración de la tasa de inflación en diciembre que volvería a ubicarse por encima del 3% mensual y cerraría 2021 entorno al 50%”
Hacia adelante, “se espera para 2022 un piso inflacionario de 50% (con riesgo al alza) en un contexto en que se esperan reacomodamientos tarifarios y una aceleración de la tasa de devaluación del tipo de cambio oficial”, según la consultora del ex ministro Dante Sica.
A su vez, “se estima una reducción de la brecha fiscal y la emisión monetaria para financiarla en el marco del acuerdo con el FMI, lo que contendría subas inflacionarias mayores en un contexto de reacomodamiento de precios relativos”.
En la primera quincena de este mes, Ecolatina registró una suba del 4,4% a nivel general, del 5,2% en alimentos y bebidas, del 7,5% en indumentaria y del 5,7% en esparcimiento. “Alta primera quincena, en parte de arrastre, en parte aumento neto; el incremento en los alimentos estuvo traccionado por carne, frutas y verduras, pero también algo de precios de consumo masivo”, señaló Federico Moll.
“Si a esto le sumamos la nueva ‘estrategia cambiaria’, descongelamiento de tarifas y paritarias cerca de 50%, es difícil pensar en una inflación menor al 45-50% en 2022″, aclaró.
Un informe de ECO GO destacó los principales incrementos programados para este mes:
Taxis: el gobierno porteño dispuso una suba del 30% en las tarifas de taxis en la Ciudad de Buenos Aires desde el 1 de diciembre. Se trata de la tercera suba del año. Así, durante el día, la bajada de bandera costará $111 y cada ficha $11,1, mientras que la tarifa nocturna pasará a $133,20 y la ficha, a $13,2.
Cocheras: tienen en la Capital Federal un aumento promedio en la franja del 15%-25% desde el comienzo del mes.
Colegios: los colegios privados que reciben aportes estatales recibieron una autorización del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires para llevar adelante incrementos de hasta 7% en sus cuotas. En la provincia de Buenos Aires en principio no debería haber ninguna suba en los aranceles ya que la última se habría aplicado en noviembre (entre 3% y 4%) como consecuencia de la paritaria del gremio docente.
Personal doméstico: según la paritaria firmada en junio se fijó un aumento del 5% en las remuneraciones horarias y mensuales mínimas, al mismo tiempo que en octubre se adicionó un 2% no acumulativo a cobrarse en diciembre. De esa manera, el acumulado anual de la paritaria (junio de 2021 a mayo de 2022) llegará a 50%.
En la economía coexiste con una importante distorsión de precios relativos ya que el 2021 no fue un año en el que se hicieran correcciones, sino en el cual se acumularon distorsiones (ECO GO)
La consultora de Marina Dal Poggetto señaló que “en el caso de los combustibles permanecieron congelados durante más de seis meses. Al mismo tiempo que, en mayor o menor medida, los alimentos también se vieron sujetas a algún tipo de regulación”.
“El salto del 36,1% del 2020 al 51% en la inflación anual responde en parte a la reapertura de aquellos sectores vinculados al turismo o al entretenimiento que se habían encontrado prácticamente inactivos como consecuencia de la cuarentena y las restricciones a la movilidad y que hicieron el catch-up”.
De todos modos, según ECO GO, “en la economía coexiste con una importante distorsión de precios relativos ya que el 2021 no fue un año en el que se hicieran correcciones, sino en el cual se acumularon distorsiones”.
“Quedan pendientes para el año próximo ajustes de tarifas (transporte público, electricidad, gas y agua), combustibles, telefonía e internet. A lo que si le sumamos un salto discreto en el tipo de cambio la inflación difícilmente cierre por debajo del 60%”, indicó el equipo de Sebastián Menescaldi.
Por su parte, Guido Lorenzo, director de LCG, dijo que “prevemos que la inflación núcleo sea más alta que el 3,3% de noviembre”.
Además, sostuvo que el año cerrará con una inflación general “en torno al 51%, que está mostrando una tendencia de la inflación núcleo que no cede del 3%”.
“Sobre esta tendencia se montará una actualización de tarifas y tipo de cambio que nos hace pensar que ganará mayor inercia para ubicarse en un 60% anual para 2022″.
Y si bien la inflación en alimentos arrancó a la baja este mes, Lorenzo señaló que “es un dato aislado que ya nos ha pasado que se repite en el pasado que viene una semana baja y después se acelera”.
“Creo que nuevamente las próximas semanas se acelerará la suba en los precios, porque no hay razones para que haya una disminución de la tasa de inflación”, indicó Lorenzo.
A su vez, Camilo Tiscornia, socio de C&T, dijo que la inflación terminaría “arriba del 4 por ciento este mes”.
“La carne influye mucho pero no es lo único. Está el pico del turismo también, aumento de empleadas domésticas, cigarrillos y aguinaldos de encargados en las expensas”, detalló.
A su vez, ACM prevé un aumento de los precios del 3,4% para este mes, del 50,2% en el año y del 51% para 2022, mientras Claudio Caprarulo de Analytica estimó un 3% en diciembre y 50% en el año. “La inflación núcleo sigue firme en torno al 3,3% y con una leve tendencia al alza producto del aumento en el ritmo de devaluación del tipo de cambio oficial”, explicó.
Días atrás, el Fondo Monetario Internacional (FMI) expresó en un comunicado que llegó a un “entendimiento general” con el Gobierno acerca de la necesidad de reducir el financiamiento monetario para reducir el déficit fiscal y subir las tasas de interés, con el objetivo de combatir la alta inflación en la Argentina. Con los datos actuales -y más allá del acuerdo con el FMI- al equipo económico le queda un arduo camino por delante si quiere cumplir con este objetivo.
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