En abril de 2020 la venta de autos usados cayó 86,4% respecto de igual mes de 2019 y 81% respecto de marzo, informó la Cámara del Comercio Automotor (CCA). En todo el mes se vendieron 18.027 unidades, contra 132.308 de abril del año pasado. Así, el cuatrimestre cerró con una venta total de 391.100 unidades, lo que representa una caída de 27,7% comparada con la cifra de 540.582 unidades que se vendieron en los primeros cuatro meses de 2019.
“Nuestro mercado no escapa a la parálisis económica que la pandemia produjo y está produciendo en el país. Los números hablan por sí solos”, dijo el presidente de la Cámara, Alberto Príncipe.
La cifra de abril, señaló, “es la más baja desde que se tienen datos estadísticos del sector (1995) cuando se comercializaron en igual mes 40.000 vehículos”. Esto es, la venta del mes pasado fue inferior a la mitad de la que se había registrado en el peor abril de los último 26 años.
Los modelos más vendidos y la cantidad de unidades comerciadas en abril fueron los siguientes:
VW Gol y Trend: 1203
Chev. Corsa y Classic: 659
Toyota Hilux: 606
Renault Clio: 464
Fiat Palio: 388
Ford Ranger: 387
Ford Fiesta: 380
Ford F-100: 379
Ford Focus: 360
Ford Ka: 329
El informe de la CCA incluye además la lista de precios de todos los modelos, con validez hasta junio.
En los primeros cuatro meses del año las ventas cayeron entre 22 y 42% en todas las provincias argentinas. La venta de usados colapsó en tierra del Fuego (42%), La Rioja (36,2), Formosa (34,2), la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (34,1%), Santiago del Estero (33,8) y Corrientes (30%). En sólo cinco provincias las ventas cayeron menos del 25%: Tucumán (24,8), Mendoza (24,5), Santa Fe (24,3), Misiones (22,7) y Entre Ríos (22 por ciento).
Príncipe reconoció que “desde hace una semana el gobierno nacional junto a algunas provincias del interior del país, donde la circulación del virus es muy baja o nula, autorizó la apertura de salones de venta de autos, con horarios de atención acotados, turnos y protocolos de salubridad acordes a las circunstancias”, pero señaló que pese a esa limitada apertura “nuestro mercado se sigue manteniendo con los ahorros propios y es imperiosa la apertura de nuestras empresas para poder hacer frente a todos los gastos que las mismas están ocasionando mes a mes”.
Como ejemplo positivo mencionó la reciente decisión de la Agencia de Recaudación de la Provincia de Buenos Aires (ARBA) de diferir el pago de Ingresos Brutos hasta julio y dijo que ya pidieron que lo mismo haga el gobierno porteño.
Teniendo en cuenta que una de las principales prevenciones para limitar la transmisión de coronavirus es la limitación del uso de transporte público, Príncipe sugirió que “sería importante, dentro de todas las variantes que se analizan, trabajar sobre la posibilidad de flexibilizar el uso del auto particular para aquellas personas que no lo pueden usar y se trasladan en transporte público o implementar la entrada a capital de autos según días con dominio par o impar. Colaboraría con las medidas de seguridad que pregona el Poder Ejecutivo Nacional”, expresó.
Pero más allá de los paliativos que se puedan implementar, el titular de la Cámara del Comercio Automotor reconoció que “la reconstrucción del sector y de la industria automotriz llevará tiempo, mucho tiempo”.
Seguí leyendo: