Subastarán a más de 60 mil dólares las medallas de Gary Shaw, leyenda del Aston Villa, que murió hace tres meses

Las medallas y trofeos ganados por Gary Shaw, leyenda del Aston Villa, serán subastadas a menos de tres meses de su fallecimiento.

La colección incluye la emblemática medalla de la Copa de Europa de 1982, lograda luego de la histórica victoria de los Villanos por 1-0 sobre el Bayern Múnich en Rotterdam, así como otros títulos que marcaron su carrera, como la medalla de campeón de liga de 1981 y el trofeo de Jugador Joven del Año de la PFA (asociación de futbolistas profesionales, del fútbol inglés).

Esta subasta, que será organizada por la casa Mullock Jones Auctioneers & Valuers, está programada para el 4 y 5 de diciembre. La estimación inicial de la colección es de 50.000 libras esterlinas (alrededor de 63.000 dólares), informó la cadena de noticias británica BBC.

Shaw, que falleció a los 63 años, fue una de las figuras más destacadas en la historia del Aston Villa. Durante su década en el club, entre 1978 y 1988, el delantero dejó una huella imborrable al ayudar al equipo a conseguir algunos de los títulos más prestigiosos en su historia.

Su nombre quedó marcado por su participación en la Copa de Europa de 1982, cuando el Aston Villa sorprendió al mundo al derrotar al Bayern Múnich 1-0 en la final de Rotterdam y luego consiguió la Supercopa de Europa.

Además, formó parte fundamental del equipo que ganó el título de la Primera División en 1981, un logro que consolidó su estatus como uno de los jugadores más importantes de su generación.

Pero sus éxitos no solo se limitaban a los títulos. Shaw también fue reconocido a nivel individual por su talento y logros. En 1981, fue galardonado con el Premio Bravo, que distingue al jugador más destacado de Europa en su categoría de joven, y en el mismo año recibió el Premio al Jugador Joven del Año y formó parte del Equipo del Año de la PFA.

Estas distinciones son un reflejo de la enorme promesa y habilidad que Shaw mostró en sus primeros años como profesional y cómo se consolidó rápidamente como una de las grandes figuras del fútbol inglés. En el club marcó 79 goles en 213 partidos, según el medio británico The Telegraph.

La importancia de Shaw en el Aston Villa fue tal que su legado continúa siendo recordado con cariño por los aficionados del club, quienes celebran su contribución a la historia dorada del equipo en los años 80.

Además, fue parte de la selección inglesa sub-21 y jugó en otros clubes como: Blackpool, Walsall, Kilmarnock y Shrewsbury Town. Una vez que se retiró en 1992, trabajó como analista estadístico, aseguró la BBC.

A pesar de que el vendedor anónimo de estos objetos optó por seguir los deseos previos de Shaw -que en su momento vendió su colección a un comprador privado con la condición de que no se separara ni se revendiera mientras estuviera vivo-, la operación generó debate.

La subasta planteó preguntas sobre el momento elegido para poner estos trofeos a disposición del público. Mientras algunos defienden la venta como un acto legítimo, otros señalaron que la decisión se podría interpretar como una manera de aprovecharse del reciente fallecimiento de Shaw para obtener una ganancia.

Un nombre que destacó en este contexto es el del ex jugador Stan Collymore, quien instó al club a adquirir la colección para exponerla en el estadio Villa Park, como parte de un proyecto para crear un museo digno de la historia del club.

En su cuenta de redes sociales, Collymore afirmó que no había mejor manera de honrar la memoria de Shaw que comprando sus medallas y permitiendo que las futuras generaciones pudieran conocer y apreciar la figura de uno de los jugadores más importantes en la historia del equipo, afirmó el medio británico Daily Mail.

A pesar de las críticas, Ben Jones, el subastador a cargo de la venta de la colección, defendió la decisión de mantener los objetos juntos y destacó que, a pesar de que habría sido más rentable venderlos por separado, el vendedor decidió respetar los deseos de Shaw, quien en su momento había pedido que sus trofeos no fueran revendidos ni divididos.

“Siempre habrá opiniones sobre si un artículo o artículos deben venderse o no. Eso es de esperar, pero siempre decimos que la forma más justa de vender es en una subasta”, aseguró Jones en una entrevista con The Telegraph.

“Aún no nos hemos puesto en contacto con el Aston Villa sobre la subasta, pero está abierta a todo el mundo, incluido el club y los particulares”, cerró el subastador.