El fitness evolucionó a lo largo del tiempo, adaptándose a las demandas de una sociedad cada vez más consciente de la importancia del bienestar físico y mental. Desde los clásicos gimnasios de pesas hasta las disciplinas más recientes, como el CrossFit o yoga funcional, el panorama del entrenamiento no deja de transformarse.
En este contexto, surgen nuevas modalidades diseñadas para retar al cuerpo de manera integral, combinando fuerza, resistencia y capacidad mental. Una de estas innovaciones es Hyrox, una competición híbrida que está redefiniendo las reglas del fitness funcional y atrayendo a miles de atletas de todo el mundo.
Esta disciplina, que combina carreras de resistencia con ejercicios de fuerza, logró posicionarse como una alternativa fresca frente a otras prácticas consolidadas como el CrossFit.
Para la temporada 2024-2025, la nueva modalidad planea organizar 85 competiciones en los cinco continentes, y se calcula una posible participación de más de 400.000 atletas. Este crecimiento exponencial fue impulsado por colaboraciones estratégicas con marcas reconocidas como Centr, dirigida por el actor Chris Hemsworth y la firma deportiva Puma.
Uno de los factores clave en el éxito de Hyrox es su capacidad de atraer a una amplia gama de participantes, desde aficionados al fitness hasta atletas de élite. Esta modalidad ofrece una experiencia accesible para cualquier persona que entrene regularmente en un gimnasio todos los días.
Entre las estaciones de ejercicio se encuentran desafíos que abarcan movimientos funcionales diseñados para replicar patrones de actividad natural. Ejercicios como el skierg, el remo, el empuje y arrastre de trineo, las zancadas con saco o los lanzamientos de balón medicinal forman parte de este circuito.
La estructura de las competiciones Hyrox se basa en un formato estandarizado que combina ejercicios funcionales con carreras de resistencia, una fórmula que equilibra el esfuerzo físico con la capacidad mental. Cada evento consta de ocho estaciones, intercaladas con tramos de carrera de un kilómetro.
Según Christian Toetzke, cofundador y director general de Hyrox, los ejercicios fueron seleccionados cuidadosamente no sólo por su efectividad para desarrollar potencia, explica Toetzke en Men’s Health.
Cada estación está diseñada para que los participantes puedan medir su rendimiento de manera consistente, un atributo que fue clave para atraer tanto a deportistas ocasionales como a atletas de alto nivel. Por ejemplo, el tiempo promedio para completar una prueba Hyrox es de 90 minutos, aunque los más avanzados pueden terminar el circuito en menos tiempo.
Las estaciones más duras, como los burpees con salto de longitud, pueden ser un verdadero desafío, incluso para los más entrenados.
La experiencia de Brett Williams como participante en una competición Hyrox en Nueva York refleja la intensidad, el desafío y la emoción que caracterizan a esta disciplina. Su relato, publicado en Men’s Health, lleva al lector al corazón de un evento que reúne a miles de entusiastas del fitness en un ambiente electrizante. En este caso, más de 5.300 competidores se congregaron en el muelle 76 de Manhattan, listos para enfrentar el circuito estandarizado.
Williams describe el bullicio del área de calentamiento, donde los participantes se preparaban al ritmo de música de Skrillex e Imagine Dragons, mientras el sol de Manhattan acentuaba el calor y la tensión previa al desafío.
La carrera comenzó con una explosión de adrenalina: un sprint de 1 kilómetro que conectaba a los corredores con la primera estación, el skierg, un ejercicio que simula el movimiento del esquí de fondo. A medida que avanzaba, enfrentó retos cada vez más demandantes, como el empuje y arrastre de trineo, los 100 metros de burpees con salto de longitud y las agotadoras zancadas con saco.
El ambiente del evento, con el apoyo del público y la camaradería entre los competidores, lo impulsó a continuar hasta llegar a la última estación: los lanzamientos de balón medicinal. Con los brazos ardiendo y al borde de sus fuerzas, completó las 100 repeticiones requeridas, culminando la carrera con una mezcla de agotamiento y euforia.
Hyrox vs. CrossFit
Desde su aparición, Hyrox fue inevitablemente comparado con el CrossFit, una disciplina ya consolidada dentro del fitness funcional. Sin embargo, aunque comparten ciertos elementos como el uso de ejercicios variados, estas dos modalidades se diferencian en aspectos fundamentales que permitieron atraer a un público diverso.
Una de las principales diferencias radica en la estructura de las competiciones. En CrossFit, los eventos están marcados por la incertidumbre: los participantes no conocen con antelación las pruebas que enfrentarán, y estas pueden incluir una amplia gama de movimientos.
Actualmente, 2.500 gimnasios y entrenadores de todo el mundo forman parte de la red de Hyrox, y la organización planea expandirse con centros de rendimiento dedicados.
Hyrox también destaca por su enfoque en la medición del progreso físico. Mientras que en el CrossFit el rendimiento puede depender de factores subjetivos como la calidad de la técnica y la intensidad de los WODs (entrenamientos del día).
Además, los tiempos registrados durante las competiciones permiten a los atletas monitorear su mejora y establecer metas claras.
Una modalidad en ascenso
Además de ser una experiencia accesible para aficionados, Hyrox ganó relevancia como deporte competitivo, atrayendo a atletas de alto rendimiento. La organización creó la categoría Elite 15, que reúne a los mejores competidores individuales, para enfrentarse en el Campeonato Mundial.
Este formato permite que los atletas más destacados luchen por el trofeo en un escenario global, lo que eleva el prestigio de la disciplina. Así, el Hyrox se posiciona cmo una disciplina con potencial para consolidarse en el panorama deportivo internacional.