“Los humanos estamos hechos para desear ver la persona más rápida, no a la más rápida de forma natural”, asegura Christian Angermayer, en una entrevista con Forbes. Este multimillonario alemán ha decidido desafiar las convenciones del deporte mundial con su nueva inversión: los Enhanced Games (Juegos Potenciados), una competencia donde los atletas podrán utilizar drogas para mejorar su rendimiento bajo la supervisión de un médico.
El objetivo, según Angermayer en conversación con los periodistas Will Yakowicz y Brandon Kochkodin, es crear un espectáculo que empuje los límites del potencial humano, sin las restricciones impuestas por los Juegos Olímpicos tradicionales.
La idea de los Enhanced Games surgió durante una conversación con su amigo, el abogado y emprendedor Aron D’Souza, quien propuso un evento deportivo que permitiera el uso controlado de sustancias dopantes. Para Angermayer, la propuesta no solo era disruptiva, sino una oportunidad de negocio única. “Es una idea multimillonaria”, afirmó, antes de destinar USD 2,5 millones al proyecto. El evento, que planea debutar en 2025, ofrecerá un premio de USD 1 millón a quienes rompan los récords mundiales en atletismo y natación.
Con la confianza de un medallista olímpico, Angermayer predijo en su entrevista con Forbes que su proyecto pronto superará a los Juegos Olímpicos en popularidad. Pero este inversor, conocido por su portafolio diverso y a menudo controvertido, ha tenido ideas aún más polémicas, como revela el reportaje de Yakowicz y Kochkodin.
Amigo de Peter Thiel y de un colaborador del Kremlin
Su participación en el colapso de Wirecard, una empresa alemana de pagos electrónicos, lo puso en el centro de uno de los mayores escándalos financieros recientes. En 2019, Angermayer facilitó una inversión de USD 1.100 millones de SoftBank en Wirecard, una transacción que, a la postre, resultó en una pérdida catastrófica cuando se descubrió que la compañía declaraba USD 2.100 millones en efectivo inexistentes. “Solo hice la presentación”, asegura Angermayer, quien recibió USD 12 millones por su intervención. Aunque minimiza su rol, el escándalo dejó una marca en su historial financiero.
No es la única vez que ha estado involucrado en polémicas de alto perfil, según Forbes. En 2018, durante su fiesta de cumpleaños en un castillo en Austria, Angermayer presentó a su amigo Peter Thiel con Daniil Bisslinger, un ruso vinculado al Ministerio de Relaciones Exteriores del Kremlin. Posteriormente, Thiel informó al FBI sobre una invitación que recibió para reunirse con Vladimir Putin en San Petersburgo, una oferta que volvió a recibir en 2022. Angermayer ha calificado la narrativa que se construyó en torno a este evento como “absurda”, negando cualquier intención política en la presentación. “Tuve una fiesta de cumpleaños. Mis dos amigos se conocieron allí. Lo que hagan mis amigos no es asunto mío”, declaró.
Emprendedor precoz: les cobraba a sus padres para ver televisión
Angermayer creció en el pequeño pueblo de Triebendorf, en Alemania, y desde temprana edad mostró un interés inusual por los negocios. Su infancia estuvo marcada por su fascinación por los números y las transacciones comerciales, cuentan Yakowicz y Kochkodin. Su primer proyecto escolar cuando aprendió a escribir fue redactar una factura. Incluso llegó a cobrar a sus padres por ver televisión en casa, lo que inquietó a su familia. “Mis padres estaban realmente preocupados”, confiesa a Forbes. Hoy, sin embargo, reconoce que están orgullosos de su éxito.
En cuanto a su filosofía de vida e inversión, Angermayer asegura que se dedica a una clase específica de proyectos “Solo quiero hacer cosas que realmente me fascinen”. Esta visión optimista, según él mismo cuenta a Forbes, se basa en su fe en el poder de la ciencia, la salud y el bienestar para mejorar la vida humana.
Apeiron Investment Group, el vehículo de inversión de Angermayer, refleja perfectamente su visión ecléctica y arriesgada de los negocios. Su portafolio incluye desde drogas psicodélicas y minería de criptomonedas hasta la recolección de fósiles de dinosaurios e implantes cerebrales.
Aunque estos sectores puedan parecer desconectados o, en algunos casos, poco realistas, Angermayer los considera apuestas seguras a largo plazo. Su capacidad para identificar tendencias emergentes y su insistencia en invertir en lo que él llama “megacorrientes” es lo que lo distingue, según explican Yakowicz y Kochkodin en su artículo. “Puede que sea seguidor de tendencias, pero es porque yo creé la tendencia”, dice.
Celebridades, longevidad, psicodélicos y criptomonedas
Además de sus inversiones peculiares, Angermayer ha construido una red de contactos influyente que abarca desde la política hasta la industria del cine y las finanzas. Entre sus amigos y colaboradores más cercanos destacan figuras como Thiel, el inversionista Mike Novogratz y la excanciller alemana Angela Merkel, según señala el artículo de Forbes. También la actriz Uma Thurman, con la que está a punto de lanzar un nuevo proyecto, del que no ofrece muchos detalles.
Gran parte de su enfoque inversor se concentra en en proyectos relacionados con la salud y la longevidad. Según señala el artículo de Yakowicz y Kochkodin, Angermayer es cofundador de empresas como Rejuveron y Cambrian Bio, que buscan desarrollar medicamentos aprobados por la FDA para retrasar el envejecimiento humano. Convencido de que los avances científicos en este campo harán que vivir hasta los 100 años o más sea algo común en el futuro, Angermayer apuesta por lo que él considera la frontera final del bienestar humano. “La longevidad y la felicidad son los productos más naturales”, resumió.
Estas empresas están trabajando en innovaciones que podrían revolucionar la forma en que se concibe el envejecimiento, y Angermayer está seguro de que la demanda por estos productos será inmensa. “No encontrarás a nadie que diga ‘no quiero ser feliz’ o ‘no quiero estar saludable’”, explica a Forbes.
En su incursión en el campo de la salud mental, fundó ATAI Life Sciences, una empresa que se dedica a la investigación y desarrollo de psicodélicos para el tratamiento de condiciones mentales. Según el reportaje de Yakowicz y Kochkodin, ATAI realiza ensayos clínicos con sustancias como el DMT, la ibogaína y el MDMA, con el objetivo de convertir estos compuestos en medicamentos legales y regulados que puedan ser utilizados para tratar trastornos como la depresión.
En 2021, la compañía salió a bolsa con grandes expectativas, pero su valor ha caído drásticamente desde entonces, con las acciones reduciéndose en un 92% desde su debut en el Nasdaq. No obstante, Angermayer se mantiene firme en su visión de que los psicodélicos representan el futuro de la psiquiatría. En su conversación con Forbes, explica que si la ciencia logra “medicalizar” los psicodélicos, ATAI podría convertirse en una empresa valorada en miles de millones de dólares.
Además de su interés en la salud y la biotecnología, Angermayer es un ferviente creyente en el poder de las criptomonedas, específicamente el Bitcoin. En la entrevista revela que posee aproximadamente 1.000 bitcoins y está convencido de que el valor de esta criptomoneda alcanzará el millón de dólares por unidad en el futuro. “La gente complica demasiado el Bitcoin”, comenta Angermayer a Yakowicz y Kochkodin. Para él, el Bitcoin es simplemente “oro digital”, una reserva de valor destinada a superar todas las expectativas de sus críticos.
Su fe en el ecosistema de las criptomonedas lo llevó a invertir en la minería de Bitcoin a través de Northern Data, una empresa alemana que ha tenido serios problemas financieros desde el pico de la pandemia. Forbes detalla que las acciones de Northern Data han caído más de un 70% desde que Angermayer tomó posición en la compañía. Pero, una vez más, el multimillonario se mantiene optimista y cree que la gestión de la empresa corregirá el rumbo si logra cotizar en el mercado estadounidense.
De las Swifties al deporte con dopaje
Además de sus proyectos empresariales y científicos, Angermayer tiene una visión única sobre la sociedad actual. En su entrevista con Yakowicz y Kochkodin, reflexiona sobre cómo el movimiento por los derechos trans está generando más autonomía corporal. Admirador de las Swifties, los fervientes seguidores de Taylor Swift, considera que la confianza que antes se depositaba en las instituciones tradicionales ha sido reemplazada por la devoción a las figuras públicas. Incluso plantea la idea de crear un índice de inversión en las 20 celebridades más influyentes del mundo.
En la diversa y polémica red del inversor, el nuevo proyecto de los Enhanced Games es quizás el más controvertido de todos. Una vez más, tiene el respaldo de aliados estratégicos como Peter Thiel y, con su seguridad habitual, espera que este evento marque el futuro del deporte global.