Con motivo de la reciente realización de la Conferencia Internacional Archivos y derechos humanos: una agenda para el fortalecimiento democrático, organizada por el Centro Internacional para la Promoción de los Derechos Humanos (Argentina) junto a Swisspeace (Suiza) y al Centro Nacional de Memoria Histórica (Colombia), dos muestras se abrieron en la Ciudad de Buenos Aires. Por un lado, El informe Nuca Más: la potencia de un archivo, y por otro, la instalación Relicarios: obra en duelo.
¿De qué tratan? ¿Por qué son importantes a la hora de pensar el estatus de los derechos humanos en la historia reciente pero también en nuestro presente?
El informe Nuca Más: la potencia de un archivo
A finales de septiembre de 1984, la CONADEP terminó las tareas de investigación encargadas por el presidente Raúl Alfonsín y entregó el fruto de ese trabajo: el informe Nunca más. En ese acto, se creaba también un archivo público sobre la represión ejercida por el terrorismo de Estado entre el 1976 y 1983. En apenas nueve meses, había recabado y sistematizado toda la información brindada por los organismos, sobrevivientes y familiares de las víctimas.
En total, más de cincuenta mil folios constituían el material probatorio para el inminente juicio a las juntas militares. Esta documentación inauguraba una nueva narrativa sobre la violencia política en nuestra región. Entre todo ese material intacto desde el último día de trabajo de la CONADEP, hay también actas, cartas, listas, cuestionarios, declaraciones y resoluciones que integran hoy la parte menos conocida y visitada de este archivo. La exposición de estos objetos de la memoria es la muestra El informe Nuca Más: la potencia de un archivo, curada por Luciana Delfabro.
Relicarios: obra en duelo
La artista visual y antropóloga colombiana Erika Diettes confeccionó una instalación que se muestra reveladora. Durante varios años recorrió diversos territorios de Colombia signados por el conflicto armado y la violencia, acompañando y dialogando con personas que perdieron seres queridos, recibiendo los objetos y prendas que le fueron confiados. Su tarea fue la de embalsamar, amortajar y hacerle un nicho a cada prenda como el lugar de cada cuerpo.
Relicarios: obra en duelo contiene objetos expuestos que pertenecen a familiares de personas desaparecidas, que no fueron prestados en esta ocasión, sino donados. No es sólo una vitrina con excentricidades, se trata na oportunidad para enseñar lo que más de cinco décadas de guerra ha dejado en Colombia y ofrecer así un testimonio de alcance universal.
* El informe Nuca Más: la potencia de un archivo
* Relicarios: obra en duelo
Hasta el 20 de mayo
Martes a domingos y feriados de 11 a 21 horas
Centro Cultural de la memoria Haroldo Conti
Av. del Libertador 8151 – CABA
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