La regulación de los vapeadores y cigarrillos electrónicos en Colombia fue finalmente aprobada por la Cámara de Representantes después de un largo proceso. Este proyecto de ley, impulsado por los senadores Norma Hurtado y José David Name del Partido de La U, tiene como objetivo controlar el uso de estos dispositivos en el país, especialmente entre los jóvenes, dada la preocupante tendencia de consumo que se ha observado en los últimos años.
El proyecto de ley aborda la regulación de los Sistemas Electrónicos de Administración de Nicotina (Sean), los Sistemas Similares Sin Nicotina (Sssn) y los Productos de Tabaco Calentado (PTC), que representan una preocupación creciente para la salud pública debido a su proliferación y al impacto en la juventud colombiana.
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Según datos de la última Encuesta Nacional de Sustancias Psicoactivas del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), aproximadamente 1,1 millones de personas en Colombia han probado cigarrillos electrónicos o vapeadores en algún momento de su vida. Esta tendencia es especialmente preocupante entre los jóvenes, con una prevalencia del consumo más alta en la población de 18 a 24 años.
La aprobación de esta regulación ha sido recibida con beneplácito por parte de varios sectores políticos y sociales, que ven en ella una medida necesaria para proteger la salud de la población, especialmente de los jóvenes.
La senadora Norma Hurtado destacó la importancia de modernizar el marco normativo para regular estos dispositivos nocivos, mientras que la representante Carolina Giraldo resaltó la necesidad de que los vapeadores paguen impuestos para desincentivar su consumo.
“Logramos modernizar el marco normativo para regular también estos dispositivos nocivos para la salud, especialmente de nuestros niños, niñas y jóvenes”, señaló en su cuenta de X la senadora Hurtado.
La regulación aprobada implica que los vapeadores y cigarrillos electrónicos estarán sujetos a restricciones similares a las del cigarrillo convencional, incluyendo limitaciones a la publicidad y al consumo en espacios públicos. Esto busca reducir el acceso y la exposición de los jóvenes a estos productos, que muchas veces desconocen los riesgos asociados y son atraídos por sus sabores y diseño.
Un estudio liderado por la Universidad Industrial de Santander reveló datos preocupantes sobre las enfermedades asociadas al vapeo en Colombia, evidenciando un aumento en los casos de muerte y enfermedad relacionados con el uso de estos dispositivos. Esto ha generado una mayor conciencia sobre los riesgos para la salud y ha impulsado la necesidad de una regulación más estricta.
El médico Álvaro Javier Idrovo, uno de los autores del estudio, destacó la importancia de los hallazgos, que representan el primer registro convincente de enfermedades asociadas al vapeo en el país. Estos resultados han alertado a la comunidad médica y han generado un llamado a acciones más contundentes para proteger la salud pública.
En resumen, la regulación de los vapeadores y cigarrillos electrónicos en Colombia representa un paso importante en la protección de la salud de la población, especialmente de los jóvenes. Sin embargo, se necesitarán esfuerzos adicionales para combatir el uso y la comercialización de estos productos y mitigar los riesgos asociados.