Cuota alimentaria en 2024: lo que se debe pagar de acuerdo al salario mínimo y el IPC

La actualización de la manutención mensual refleja nuevas realidades económicas y demandas sociales, asegurando el bienestar integral de la niñez colombiana

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El incremento o disminución de
El incremento o disminución de la cuota alimentaria depende de cada caso en particular - crédito Canva.

En Colombia, el Código de Infancia y Adolescencia señala que los progenitores que no ejerzan la custodia de sus hijos tras una separación están obligados a contribuir con una pensión alimentaria. Dicha contribución no solo comprende la provisión de alimentos, sino también gastos derivados de la educación, salud y vestuario del menor.

El monto de la pensión alimentaria no está sujeto a una cifra mínima mensual establecida; sin embargo, parte de la base de que la persona obligada a pagar deberá contar con ingresos no menores a un salario mínimo legal. Los juzgados de familia tienen la facultad de incrementar esta cantidad si consideran que los ingresos de los padres permiten una aportación mayor.

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El proceso para determinar la cuota de sustento se inicia con una estimación relacionada con los recursos económicos del progenitor no custodio. Este cálculo se realiza siempre teniendo como referencia el salario mínimo vigente, pero la decisión final puede ser ajustada por un juez con base en las circunstancias particulares de cada caso.

La implementación de esta medida busca garantizar el bienestar y desarrollo integral de los menores, asegurando que sus necesidades básicas sean satisfechas independientemente de los cambios familiares que puedan surgir. Además, se destaca la importancia de la responsabilidad compartida entre madre y padre, incluso ante situaciones de separación.

En la página del ICBF
En la página del ICBF dejan claro que el máximo a embargar de un salario por la cuota alimentaría es de 50% - crédito ICBF

En Colombia, la actualización de las cuotas alimentarias está sujeta al incremento del índice del IPC (Índice de Precios al Consumidor) del año anterior, y al alza del salario mínimo. Esta medida impactará a las familias que dependen de estas asignaciones para el sostenimiento de menores y otros beneficiarios, asegurando una adecuación acorde a la economía actual.

La cuota alimentaría puede comprender hasta el 50% del salario mínimo dependiendo de la cantidad de hijos y de las necesidades de los mismos y no solo puede subir sino también bajar. Además, en cualquier caso se tiene en cuenta el dato de inflación que para diciembre fue de 9,28% y el incremento del salario mínimo que para el 2024 se estableció en 12%. Con lo anterior se puede llegar a intuir que el aumento de la cuota oscilara entre el 9 y el 12%.

La aplicación de estos ajustes se realizará conforme a lo establecido en las actas de conciliación o en cumplimiento de órdenes emitidas por autoridades competentes como Comisarías de Familia, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) o por un juez de familia, es decir que el incremento se hace de forma particular en cada caso. La regulación busca garantizar que las cuotas sean proporcionales a los índices económicos del país, reflejando así las variaciones en el costo de vida para los ciudadanos.

La revisión de las pensiones alimenticias no es un proceso automático, sino que debe ser solicitado ante las autoridades pertinentes para su aprobación y actualización formal. Es crucial para los beneficiarios comprender que tanto las cifras como los procedimientos pueden variar dependiendo del caso y la entidad encargada de administrar los montos de sustento. Además, los responsables del pago deben ser conscientes del cumplimiento de estas obligaciones legales y de sus posibles ajustes.

El objetivo de la medida
El objetivo de la medida es garantizar que el menor o menores de edad no vean afectada su calidad de vida por cuenta de una separación - crédito Marta Fernández Jara/Europa Press

La sociedad colombiana observa estas disposiciones legales con atención, ya que garantizan el bienestar de niños, niñas y familiares que dependen económicamente de terceros. La alineación de estas cuotas con la realidad económica es un paso vital para la protección social de los más vulnerables. Es recomendable que aquellos afectados por estos cambios se asesoren adecuadamente para entender completamente sus derechos y obligaciones.

Es crucial que los padres entiendan la relevancia de este aporte, ya que va más allá del aspecto alimenticio e incluye las áreas fundamentales para el desarrollo del infante o adolescente. La normativa colombiana establece este mecanismo como un derecho de los hijos que prevalece para asegurar su crecimiento y formación en condiciones dignas y justas.

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