En un lamentable incidente, 73 niños con edades comprendidas entre los 4 y 6 años resultaron afectados por una intoxicación masiva en el jardín infantil Celmira Mejía, operado por el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf) en el municipio de La Tebaida, Quindío.
Los pequeños, que manifestaron síntomas como vómitos y dolores estomacales, fueron trasladados de inmediato al hospital Pio X del mismo municipio. Según el secretario de Gobierno, Jhonatan Gualdrón, las autoridades se encuentran realizando investigaciones para determinar la causa exacta de esta emergencia sanitaria.
Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Google News.
Gualdrón señaló a Caracol Radio que se están llevando a cabo pruebas de laboratorio para determinar si la intoxicación fue provocada por el consumo de alimentos. Según el informe inicial del equipo interdisciplinario, los niños habrían ingerido pan, chocolate con leche, queso y papaya, tras lo cual comenzaron a manifestar los síntomas.
El secretario de Gobierno enfatizó que a pesar de la gravedad de la situación todos los niños afectados han tenido un buen desenlace según los informes médicos. Ningún menor fue remitido a otro hospital debido a la gravedad de los síntomas.
Profesionales de la salud continúan trabajando en colaboración con la administración municipal para esclarecer las circunstancias que llevaron a esta intoxicación masiva.
“Afortunadamente el hogar infantil queda muy cerca del hospital”, dijo el gerente del centro médico, Leonardo Quiceno al medio local Nueva Crónica Quindío. Quiceno agregó que los niños “presentaban diferentes grados de deshidratación”, por lo que 20 de ellos fueron hospitalizados y se encuentran en observación médica aunque ya se encuentran fuera de peligro.
Por lo pronto, el Icbf anunció que “suspendió de manera provisional la atención en el hogar infantil Celmira Mejía Palacio, donde presuntamente resultaron intoxicados niños y niñas que asisten a la unidad”.
Otros casos de niños intoxicados en Colombia
Como en Quindío, han ocurrido por lo menos otras dos situaciones similares en esta segunda mitad del 2023, en las que decenas de menores de edad resultan en el hospital por deshidratación vinculada a síntomas de intoxicación.
Una de ellas ocurrió el 7 de septiembre, cuando 16 niños con edades comprendidas entre los 6 y 12 años sufrieron una aparente intoxicación después de ingerir el almuerzo proporcionado en una institución educativa de Norte de Santander.
Tras experimentar malestar estomacal, los menores fueron trasladados a centros de atención médica cercanos. El incidente ocurrió en la escuela El Guayabal, ubicada en el corregimiento San Pedro, en la zona rural de La Esperanza (Norte de Santander).
Los niños afectados habrían consumido un plato que incluía arroz, pollo y jugo de guayaba, antes de comenzar a vomitar y quejarse de dolores mientras estaban en su salón de clases. Según informes, algunos de los niños incluso se habrían lanzado al suelo debido a la gravedad de la incomodidad experimentada.
Otro caso sucedió el 29 de agosto de 2023, cuando se reportó que al menos 53 niños, con edades comprendidas entre 1 y 5 años, resultaron intoxicados en un Centro de Desarrollo Infantil (CDI) ubicado en el barrio Los Milagros, comuna 2, en Valledupar, Cesar.
El secretario de Salud del departamento, Guillermo Girón, confirmó que los menores fueron ingresados a diferentes establecimientos médicos después de consumir alimentos aparentemente en mal estado.
Las autoridades de salud están llevando a cabo investigaciones exhaustivas en los colegios de la región y en los centros de desarrollo infantil afiliados al Instituto de Bienestar Familiar. El objetivo es verificar si estos centros cumplen con las condiciones necesarias para proporcionar una alimentación segura y adecuada a los niños.
El miércoles 30 de agosto, el secretario de Salud del Cesar informó que el Centro de Desarrollo Infantil donde ocurrieron los hechos ya había sido advertido previamente por las autoridades. “A este centro en específico se le realizó una revisión en marzo con advertencia, y a pesar de ello, volvieron a incurrir en irregularidades. Al constatar la situación ayer, se cerró el lugar preventivamente”, expresó el funcionario.
Las autoridades continúan trabajando en acciones de monitoreo para que los niños de Colombia no sigan siendo intoxicados por consumir alimentos.