En las últimas semanas, se ha generado preocupación por la publicación de un grupo de investigadores colombianos, que trata sobre los efectos deletéreos vinculados al uso de cigarrillos electrónicos en Colombia, visibilizando los primeros casos reportados de enfermedad y muerte a causa de estos dispositivos.
Al respecto, la Sociedad Colombiana de Pediatría y la Asociación Colombiana de Neumología Pediátrica se pronunciaron sobre los riesgos de esta práctica en las personas y de manera particular, en niños.
Ahora puede seguirnos en WhatsApp Channel y en Google News.
De acuerdo con los especialistas, en el mundo, Latinoamérica y Colombia se ha registrado un aumento del consumo de cigarrillos electrónicos entre la población adolescente y niños menores de diez años. Así, indica que esta práctica genera una adicción a la nicotina.
“Este fenómeno no solo plantea riesgos inmediatos para la salud respiratoria y cardiovascular de los niños, sino que también sugiere consecuencias a largo plazo en términos de adicción a la nicotina y sus efectos adversos y más aún, sobre el daño que se ha descrito que es generado por otras sustancias conocidas y no conocidas que se suministran con los equipos de vapeo”.
Respecto del artículo publicado por investigadores colombianos, en el que analizan los datos de enfermedades relacionadas con el vapeo y que había registrado en dos años 59 muertes asociadas a esta práctica en Colombia, los expertos señalaron que están de acuerdo con que los resultados y los calificaron como una “aproximación inicial al problema del vapeo sobre la salud pública para el país”.
Por este motivo, indicaron que las publicaciones son sumamente importantes en aras de promover la discusión académica, la concientización social y propender por la implementación real de una normativa sobre la regulación del empleo de estos dispositivos en el país.
Riesgos de los vapeadores en los seres humanos
La Sociedad Colombiana de Pediatría y la Asociación Colombiana de Neumología Pediátrica emitieron una lista con los riesgos que genera la práctica del vapeo.
A partir de la investigación, los expertos concluyeron que existen riesgos que involucran al sistema respiratorio, cardiovascular y sistema nervioso central, entre otros.
Afirmaron que, pese a experiencias de países como el Reino Unido, donde se reconoció que los cigarrillos electrónicos podrían ser una alternativa para que los adultos dejaran de fumar, “en la actualidad, el cigarrillo electrónico no es aceptado como un dispositivo médico para dejar de fumar”
Por el contrario, aseguraron que el vapeador ha incitado su uso y secundariamente el deseo de fumar en adultos no fumadores; además, para los adolescentes ha resultado una práctica atractiva y aparentemente inocua e incluso los niños más pequeños se han sentido atraídos por su uso por el claro desconocimiento de su potencial daño y por la carencia de regulación precisa al respecto.
En ese sentido, la Sociedad Colombiana de Pediatría y la Asociación Colombiana de Neumología Pediátrica instaron a la comunidad en general y a las sociedades científicas para que continúen advirtiendo sobre los riesgos, que se ha demostrado superan los supuestos beneficios sobre la práctica del vapeo.
También hicieron un llamado a los congresistas para que se acelere la implementación de una normatividad efectiva sobre el uso de los productos de vapeo, que involucre aspectos como la comercialización de estas sustancias con sabores, olores y colores, para reducir su atractivo en grupos de niños y adolescentes, además de restringir la venta online y el consumo, y la exposición de estos productos en sitios públicos.
Finalmente, solicitaron que se promueva la capacitación del personal de salud para la prevención sobre el hábito de vapear y en la identificación e intervención sobre los casos relacionados con enfermedades asociadas al vapeo. Además, extender el trabajo de educación en salud en todo el país para difundir la información sobre los riesgos potenciales del vapeo, especialmente entre los más jóvenes.