Colombia registró una de las tasas más altas de neuromielitis óptica en el mundo: ¿de qué se trata esta enfermedad?

Colombia tiene una de las tasas de prevalencia más altas de neuromielitis óptica en América Latina y el mundo. Así lo reveló un estudio dirigido por el doctor Luis Alfonso Zarco, director del departamento de Neurociencias de la Universidad Javeriana de Bogotá.

De acuerdo con la investigación titulada Prevalencia del trastorno del espectro de la neuromielitis óptica en Colombia, entre los años 2017 y 2021, se notificaron un total de 2.650 casos de neuromielitis óptica en el país.

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De esta cifra, el 73,1% fueron mujeres y la edad media de las personas afectadas por la enfermedad fue de 45 años. Sin embargo, existen otros estudios que revelan una importante proporción de casos, que oscila entre el 20% y el 28%, con presentación tardía por encima de los 60 años.

Por otra parte, el país registró una prevalencia de 5,3 casos por 100.000 habitantes, lo que supera la medida establecida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) de entre 0.5 y 4 casos por cada 100,000 personas.

En el estudio de los casos de neuromielitis óptica en el país, se evidenció que la región con más afectados por esta enfermedad fue Sucre, en la región del Caribe, con una tasa de 10,5 casos por 100.000 habitantes.

A este, le siguieron Bogotá y Risaralda, que reportaron tasas de prevalencia de 10,3 y 10,2 casos por 100.000 habitantes, respectivamente.

El estudio arrojó que una de las posibles causas de neuromielitis óptica en Colombia se debe a que puede haber una alta frecuencia de antígenos leucocitarios humanos asociados con un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad, aspecto que para los investigadores amerita investigación en futuros estudios.

Adicionalmente, el doctor Zarco se refirió a otros factores por las cuales Colombia registra altas cifras de la enfermedad. Uno de ellos es la diversidad racial de la población, que hace que sea más propensa a ciertas enfermedades huérfanas los afrodescendientes, caucásicos de ascendencia europea y población indígena.

El otro factor es la microbiota intestinal, que está relacionada con la dieta, donde se pueden alojar ciertas bacterias que pueden contribuir al desarrollo de la enfermedad.

El trastorno de espectro neuromielitis óptica es una enfermedad rara del sistema nervioso central, en la cual el sistema inmune de la persona invade los nervios ópticos y la médula espinal, provocando pérdida de visión y parálisis.

De acuerdo con el Departamento de Neurología del Hospital General de Massachusetts, a lo largo de muchos años, esta enfermedad fue considerada una versión de esclerosis múltiple, pero en 2004, médicos descubrieron un anticuerpo que ayudó a crear una diagnosis distinta.

A diferencia de la esclerosis múltiple, la neuromielitis óptica causa discapacidad acumulada con cada ataque. Aunque la mayor parte de los pacientes se recuperan parcialmente entre recaídas, algunos pacientes sufren pérdida de visión y/o síntomas diversos neurológicos; algunos pocos, hasta la muerte.

El tratamiento para el trastorno de espectro neuromielitis óptica requiere de la combinación entre corticoides junto con un procedimiento llamado plasmaféresis y fármacos que inhiben el sistema inmunitario, normalmente anticuerpos mononucleicos.

La plasmaféresis consiste en extraer la sangre del paciente, retirar los anticuerpos anómalos para luego devolver la sangre al organismo.

La neuromielitis óptica no tiene cura. Sin embargo, los tratamientos pueden detener los episodios, controlar los síntomas, evitar que las crisis se repitan, además de ayudar a retrasar la discapacidad a corto plazo.

El doctor Luis Alfonso Zarco hizo un llamado a las autoridades sanitarias para que haya mayor acceso de los pacientes con neuromielitis óptica a tratamientos avanzados para combatir esta enfermedad rara.