La historia ha destacado el papel que cumple los perros en la vida de los seres humanos, ya sea como compañeros fieles, rescatistas, antiexplosivos, astronautas, guías, cazadores, transportadores o como íconos de la cultura popular.
Aunque la ciencia y la inteligencia artificial cada día generan cambios en los qué aceres de la cotidianidad de las sociedades, esta aún no ha podido impactar directamente en los sentires y aspectos emocionales que producen en los individuos que habitan el mundo de hoy, los cuales siguen escribiendo las historias de lo inimaginado.
Así lo destacó un guía canino de la Fuerza Aérea de Colombia en 2020 “A pesar de las nuevas tecnologías no existe un elemento que iguale la rentabilidad, eficiencia y precisión del olfato del perro, ni supere su tenacidad al momento de realizar su trabajo al lado de su guía”.
Ese trabajo colectivo permitió que el viernes 9 de junio de 2023, Colombia, después de 40 días de angustia, viviera una dicha inexplicable por el rescate de los cuatro niños huitotos desaparecidos en las selvas del Yari.
Aunque la fuerza y la coordinación por parte de las unidades de búsqueda, los saberes de las comunidades originarias y todos aquellos voluntarios en pro del rescate fueron fundamentales, no cabe duda de que el papel que jugaron los perros rescatistas fue de gran vitalidad, tal como es el caso de Wilson (canino que sigue desaparecido en la selva del Yari).
Un Trabajo en equipo
El gran valor y astucia de esos seres sintientes determina la siguiente interrogante: ¿Cómo y quiénes entrenan o adiestran a esos perros? Para responder dicha pregunta, la Fuerza Aérea Colombiana destacó que es un “trabajo en equipo”.
“La inteligencia humana y los sentidos desarrollados de los perros se han convertido en la dupla invaluable de la Fuerza Aérea Colombiana, para salvaguardar la seguridad de cada una de las Unidades Militares Aéreas, ubicadas estratégicamente en el Territorio Nacional”.
Además, la autoridad precisó que los perros empleados por la institución son certificados mediante un proceso que va desde una reproducción selectiva, capacitación primaria y avanzada en la Escuela de Instrucción Canino Militar (Escam), y a partir de un riguroso entrenamiento en la base; complementado con certificaciones anuales, efectuadas en visitas periódicas a las unidades por personal de la Escam.
Con forme con especialistas en Detección de Sustancias, Defensa y Protección, la Fuerza Aérea Colombiana le ha apostado en los últimos años a razas como el Pastor Belga Malinois, especie que se caracteriza por su alta resistencia, obediencia e inteligencia para potenciar sus habilidades olfativas.
Uno de los Guías Caninos del Grupo Aéreo del Amazonas precisó que desde que el canino se encuentra en la etapa de gestación, van recibiendo una serie de entrenamientos a través de una fase de socialización y estimulación.
Luego de nacer y cumplir un tiempo determinado de 45 días con la madre, son llevados a zonas de entrenamiento donde inician un vínculo con los “semovientes”. A su vez, comienzan a desarrollar habilidades de detección de sustancias explosivas, narcóticos, detección de divisas (dinero), búsqueda y rescate, entre otras funciones como:
- Perros de terapia asistida (colegio, niños con habilidades especiales, ancianos, personas con depresión).
- Perro de asistencia (ciegos, minusválidos).
- Perros de control aviar (control de aves en las rampas operativas).
- Perros de control aviar (control de aves en las rampas operativas).
Para lograr el cumplir de esas actividades de esos seres sintientes, los caninos deben realizar entrenamientos mínimo de dos veces a la semana, con el fin de potenciar sus instintos y fortalecer las capacidades operativas. Ese entrenamiento es llevado a cabo por el guía experto, con el apoyo de los soldados manejadores de perros.
Finalmente, la Fuerza Aérea Colombiana explicó que durante los entrenamientos se enfatiza bastante en las capacidades olfativas, con el objeto de que los semovientes asocien bien las sustancias, además de una preparación de obediencia para evitar novedades hacia los humanos.