Las relaciones amorosas se transforman cada día y, con el paso de los años, se han derrumbado algunos tabúes sobre cómo debe funcionar una relación monógama. Cada vez más se escucha hablar de las relaciones abiertas o la poligamia, modelos de relaciones en los que algunas personas se encuentran más cómodas.
Para aclarar, en este tipo de relaciones, una pareja llega a acuerdos en los que se permiten tener aventuras o encuentros con otras personas, sin que esto sea infidelidad o se convierta en un problema para la relación. Al contrario, se espera que sea un factor que evite la rutina que normalmente causa las separaciones en las relaciones monógamas.
¿Cómo saber si una relación abierta funciona en su caso? Todo se reduce a la comunicación con su pareja. Un diálogo sincero y abierto puede llevar a conocer los deseos propios y de su pareja, para llegar a consensos y construir una relación a su medida. Pues una relación abierta no sólo se trata de poder tener relaciones sexuales con otros.
Según la doctora en psicología Tammy Nelson, autora del libro la Monogamia abierta y asesora de la app de citas extramatrimoniales Ashley Madison: “La monogamia abierta es más común en los matrimonios de hoy, donde cada pareja quiere una relación primaria o central, pero le gustaría tener un acuerdo de monogamia particular, con algún tipo de arreglo fluido que incluya sexo con otras personas”.
Aunque no todas las personas están dispuestas a ceder en que su pareja salga, coquetee o hasta tenga sexo con otros; la idea de las recomendaciones de la doctora en psicología es poder tener conversaciones sinceras sobre lo que el otro desea y analizar si se puede llegar a acuerdos que hagan felices a los dos.
Sin embargo, cuando una persona ha vivido siempre en relaciones monógamas exclusivas puede ser difícil llegar a esos acuerdos. Por eso Nelson recomienda que si una pareja desea tener un arreglo fluido en su relación deben tener en cuenta tres claves. La primera es que sea voluntario por las dos partes.
En segundo caso es que cada uno debe establecer sus “no negociables” y los temas en los que pueden ceder o ser más flexibles. Tras establecer esas cosas, también señala que constantemente deben estar revisando si han cambiado de opinión en alguno de esos puntos. Finalmente, el tercer punto son diez preguntas clave que toda pareja debería realizar en caso de querer abrir su relación.
Preguntas para parejas en relaciones abiertas
La experta señaló que al tener esta conversación las parejas deben tener claro que lo hacen por el disfrute y diversión de los dos, pues si alguno no está cómodo con el tema no va a funcionar. Así mismo, que se debe ser completamente sincero al responder los cuestionamientos y estar preparado para aceptar las respuestas del otro.
Las preguntas recomendadas por la doctora Nelson abordan fantasías sexuales, acuerdos sobre sentimientos con otras personas, reacciones ante amenazas a su relación, confesiones sobre deseos con terceros. Es por eso que recomienda a las personas empezar por tumbar sus creencias individuales sobre las relaciones tradicionales e informarse más sobre el amor abierto, anárquico y poliamoroso.
1. ¿Cuáles son nuestras fantasías sobre el sexo con otras personas?
2. ¿Hemos coqueteado con otras personas? ¿Cómo nos hizo sentir eso, como algo amenazante o algo positivo/atractivo?
3. ¿Qué pasaría con nuestra relación si tuviéramos sentimientos por otra persona?
4. ¿Tendríamos sexo junto con otras personas o por separado?
5. ¿Qué tipo de relación sexual tendríamos con otra persona?
6. ¿Cómo manejaríamos los celos?
7. ¿Cuánto tiempo y atención le daríamos a una relación abierta?
8. ¿Le contaríamos a otras personas sobre nuestra relación abierta?
9. Si una relación externa amenaza con nuestra conexión, ¿cómo manejaríamos eso?
10. ¿Podemos amar a más de una persona a la vez?