El Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) presentó las cifras del Índice de Precios al Consumidor (IPC), que al cierre de febrero del 2023 fue del 13,28. Si bien el aumento es el menor que se ha registrado en los últimos meses, la cifra de la inflación sigue estando por encima de los valores vistos durante el siglo XXI.
La variación mensual fue del 1,66%, casi un punto porcentual por encima de lo que se vio en febrero del 2022, pero que supera ampliamente la variación anual del periodo anterior. Los principales jalonadores de la inflación fueron: los costos de educación, artículos para el hogar y el transporte.
“En febrero de 2023, la variación mensual del IPC fue del 1,66%, frente a enero de 2023. La división Educación registró una variación mensual del 8,50%, siendo esta la mayor variación mensual. En febrero de 2023, los mayores incrementos de precio se registraron en las subclases diplomados, educación continuada, preicfes, preuniversitarios (10,66%), otros gastos en educación superior (10,64%) y pagos por asesorías de tareas y clases dictadas por particulares (9,78%). Los menores incrementos de precio se reportaron en las subclases cursos de educación no formal (5,06%), educación preescolar y básica primaria (8,17%) y educación secundaria (8,35%)”, detalló el DANE.
Otros productos que impactaron severamente en la inflación fueron: comidas en establecimientos de servicio a la mesa y autoservicio, las matrículas de los colegios (principalmente de nivel preescolar y primaria) y el transporte urbano. Se destacan también lo referente con limpieza, aseo y mantenimiento.
Si se mira por la contribución anual, los alimentos y bebidas no alcohólicas siguen siendo los protagonistas principales, a esto se le suman los costos de alojamiento (arriendos) y servicios públicos. La arracacha, el ñame y otros tubérculos es lo que más se ha encarecido (103,90%), le siguen la cebolla (lo que más se incrementó en el 2022), con una variación del 75,78% y el plátano también ha tenido una significativa afectación del 48,84%. La única disminución de precio se reportó en la papa, con una leve reducción del -1,69%.
Inflación en comunidades pobres es del 14,34%. Tunja la ciudad más cara del país
Según el subdirector del DANE, Leonardo Trujillo Oyola, este valor del IPC (13,28%), es el segundo más alto de la historia reciente del país, recordemos que la mayor inflación se vio en marzo de 1.999, (13,51%). No obstante, esto es un ponderado nacional. La entidad hace un análisis también por estratos socioeconómicos, que permite entender el impacto en el costo de vida.
Según las estadísticas, a mayores ingresos, menor es el impacto de la inflación. Para la clase alta el IPC es del 12,38% (0,9% menos que el promedio nacional), en clases medias es del 13,34, en niveles vulnerables se fijó en el 14,31% y en los más pobres llegó al 14,34%, quiere decir, más de un punto porcentual.
Por ciudades, hay un positivo hallazgo y es que cada vez hay más ciudades por debajo del promedio nacional. Aun así, Tunja es la ciudad con los mayores incrementos del país (2,12%), seguido por Bogotá (1,89%), Cúcuta (1,83%) y Barranquilla (1,72%).
En contraste, Santa Marta con el 1,27%, Valledupar que registró el 1,22%, Riohacha que llegó al 1,16% y Sincelejo con el 1% son las capitales con el IPC más bajo del país.
No obstante, si se mira por la variación anual, Cúcuta, Sincelejo, Valledupar y Montería tienen las mayores cifras. A propósito de las ciudades de la región Caribe, la electricidad nuevamente tuvo incrementos, pero, empiezan a estabilizarse, lo mismo ocurre con el gas.
“En febrero de 2023 en comparación con febrero de 2022, la variación anual de las subclases que más aportaron al índice total fueron: comidas en establecimientos de servicio a la mesa y autoservicio, (18,89%), Vehículo particular nuevo o usado (23,06%),electricidad (19,51%), arriendo imputado (4,05%), transporte urbano (11,54%), arroz (48,42%), carne de res y derivados (17,20%), comidas preparadas fuera del hogar para consumo inmediato, (20,90%), leche (34,55%) y productos de limpieza y mantenimiento (32,12%). Las mayores contribuciones negativas se presentan en: papas (-1,69%), aparatos de procesamiento de información y hardware (-3,06%), elementos implementos médicos (-2,62%), y artículos para bebés y su reparación (-0,69%)”, concluye el DANE.