Son tiempos de paz, reflexión y unión familiar. Aunque también la llegada de las Fiestas es el preciso momento para disfrutar y saborear los tradicionales alimentos que nos trae esta época del año. Es por ello que, durante estos días, nuestras mascotas se sienten atraídas por estos bocados. Ahora, ¿es bueno que los perros consuman los alimentos de la mesa festiva?
“Durante las Fiestas, es típico que la gente se dé un capricho con comidas especiales. Como tutora de una mascota, sé que muchos también quieren darles un capricho especial a las suyas. Sin embargo, como veterinaria e investigadora clínica veterinaria, también sé que algunos alimentos muy comunes -incluidos muchos de los alimentos básicos navideños- son peligrosos para los animales de compañía”, escribió en un artículo para la revista Science Alert Leticia Fanucchi, Profesora Adjunta Clínica de Ciencias Clínicas Veterinarias de la Universidad Estatal de Oklahoma.
Estas son algunas de las crisis más comunes relacionadas con la comida que los veterinarios se encuentran en urgencias de animales durante las Fiestas, y qué hacer en caso de que ocurran.
Riesgos de los alimentos grasos
El pavo con salsa es probablemente una de las comidas navideñas más populares. Y la mayoría de los perros y gatos estarían de acuerdo con sus tutores en que el pavo asado está delicioso.
Sin embargo, la grasa que contiene la piel del pavo -y el exceso de alimentos grasos y untuosos que pueden acompañarlo, como la salsa, la mantequilla y el beicon- no sientan bien a perros y gatos. Las mascotas que ingieren una sobrecarga de grasas pueden desarrollar pancreatitis, una inflamación del páncreas, el órgano que ayuda a descomponer las grasas, las proteínas y los carbohidratos.
La pancreatitis hace que el páncreas pierda enzimas digestivas y acabe “digiriéndose” a sí mismo. Si no se trata, la pancreatitis puede afectar a otros sistemas orgánicos, como los riñones y el hígado, e incluso provocar la coagulación de la sangre.
Los síntomas más comunes de la pancreatitis incluyen vómitos y diarrea. Las mascotas que puedan tener pancreatitis deben ser llevadas rápidamente al hospital veterinario o a urgencias más cercano. El veterinario realizará análisis de sangre de diagnóstico, incluida una prueba específica para las enzimas pancreáticas denominada inmunorreactividad de la lipasa pancreática o cPLI/fPLI.
El tratamiento de la pancreatitis consiste principalmente en tratar los síntomas. La mascota recibe líquidos intravenosos para ayudar a establecer el equilibrio de electrolitos, a los que se añaden medicamentos contra las náuseas y el dolor para detener los vómitos. Puede ser necesario administrar antibióticos, protectores hepáticos y probióticos, así como una dieta especial.
Los problemas con la cebolla y mal de pan
Varias especies de allium habituales en la cocina navideña, como puerros, ajos, cebollas, cebollines y chalotas, pueden ser saludables para las personas. Sin embargo, son tóxicos para perros y gatos. Si se ingieren, pueden provocar anemia hemolítica, es decir, una disminución del número de glóbulos rojos.
Los signos de la anemia hemolítica, que suelen aparecer pocos días después de la ingestión, incluyen vómitos, diarrea, letargo e ictericia. Para tratar la anemia hemolítica en los animales de compañía, los veterinarios realizan análisis de sangre para determinar si es necesaria una transfusión. Tratan los síntomas de la intoxicación por allium con líquidos intravenosos, antioxidantes y medicamentos contra las náuseas.
Los alimentos con levadura, como panecillos y panes, también son alimentos básicos en las cenas navideñas que deben mantenerse alejados de las mascotas. La levadura de estos alimentos puede fermentar en el estómago caliente de una mascota y producir niveles tóxicos de etanol. En los animales de compañía, la toxicidad del etanol puede provocar acidosis metabólica, que puede causar un descenso repentino de la glucosa en sangre, depresión respiratoria, convulsiones y parada cardiaca.
Normalmente, los dueños de mascotas no sospechan de la acidosis metabólica hasta que es casi demasiado tarde, porque presenta pocos síntomas externos. Así pues, si existe la posibilidad de que una mascota haya ingerido cualquier tipo de masa de levadura cocida o cruda, llévela de inmediato a urgencias veterinarias.
Por cierto, las mascotas también pueden sufrir toxicidad por etanol al ingerir cócteles o cerveza, por lo que también hay que mantener las bebidas alcohólicas fuera de su alcance.
Nada de chocolate
Las sustancias que pueden atraer a los humanos al chocolate -metilxantinas como la teobromina y la cafeína- son tóxicas tanto para perros como para gatos. Cuando los veterinarios atienden urgencias por ingestión de chocolate, lo normal es oír que los niños compartieron sus golosinas con su querida mascota.
Las mascotas que ingieren chocolate pueden desarrollar una “intoxicación por chocolate”, una afección en la que las metilxantinas se acumulan en el organismo y las hacen enfermar. Los signos de intoxicación por chocolate en los animales de compañía incluyen temblores, aumento del ritmo cardíaco, vómitos, diarrea, inquietud e incluso convulsiones.
La intoxicación por chocolate es una urgencia médica. Es necesario vaciar el estómago del animal y administrarle un tratamiento de apoyo con líquidos intravenosos y carbón activado. El veterinario probablemente querrá saber el tipo y la cantidad de chocolate que comió la mascota, porque algunos tipos de chocolate, como el de repostería, pueden tener efectos tóxicos peores.
El chocolate también tiene mucha grasa, por lo que el páncreas del perro o gato tampoco lo disfrutará.
Las uvas y los perros
¿Y las frutas? Bueno, hay una fruta muy tóxica para los perros que suele aparecer en las reuniones navideñas: las uvas, tanto frescas como deshidratadas en forma de pasas.
Si se ingieren, el ácido tartárico de las uvas o las pasas puede provocar una enfermedad renal aguda. Los signos comunes de la enfermedad renal aguda en perros son vómitos, diarrea intermitente y aumento de la ingesta de agua.
La enfermedad renal aguda en perros es una urgencia médica. Si se sospecha de ella, la mascota debe ser llevada inmediatamente a un hospital veterinario o a urgencias. El tratamiento suele limitarse a estabilizar al animal con líquidos intravenosos.
Dulce para las personas, veneno para las mascotas
“Aunque la intoxicación por xilitol es una de las urgencias más comunes que vemos los veterinarios en la actualidad, sigue siendo una gran desconocida entre los dueños de mascotas. Es un edulcorante artificial utilizado a menudo en productos sin azúcar. Aunque es seguro para los humanos, para los perros y gatos es un veneno de acción rápida y potencialmente mortal”, aseguró Fanucchi.
Según la especialista, la ingestión de una cantidad mínima de xilitol puede hacer que el hígado del animal libere insulina rápidamente, provocando hipoglucemia (niveles de glucosa en sangre inusualmente bajos). “En 30 minutos, la mascota experimentará síntomas como vómitos, letargo y convulsiones, y perderá la coordinación de sus extremidades, lo que se denomina ataxia”, detalló.
El tratamiento de urgencia de una mascota con toxicidad por xilitol consiste en administrarle fluidos intravenosos que contengan dextrosa para elevar su nivel de glucosa en sangre y vigilar atentamente su evolución.
“¿Cuál es la conclusión? Varios alimentos deliciosos que son seguros para los humanos pueden ser muy peligrosos para los animales de compañía en general, no sólo perros y gatos, sino también pájaros, reptiles y mascotas de bolsillo como ratones, hámsters y jerbos”, dijo la experta.
Sabemos lo importante que es compartir estos días especiales también con nuestras mascotas. Sin embargo, debemos ser prudentes y cautos con su alimentación. Lo más importante será no ofrecerles los restos o el sobrante de las comidas y avisar al resto de invitados que no le ofrezcan ningún tipo de comida sin nuestra supervisión. Solamente si tenemos claro que estas comidas no contienen ninguno de los alimentos de la siguiente lista podremos dárselas a nuestros animales.
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